PP, Ciudadanos y PSOE pugnan por la victoria el 20-D; Podemos, al alza

Atr¨¢s queda la fotograf¨ªa de cuatro partidos al mismo nivel en la disputa por la primac¨ªa electoral. Ahora son tres, aunque el baile entre el segundo y el tercero es incesante. El PP se sit¨²a a la cabeza, pero la sorpresa est¨¢ en que Ciudadanos adelanta al PSOE en porcentaje de voto, aunque no en n¨²mero de esca?os, seg¨²n un sondeo de Metroscopia para EL PA?S. Los efectos de la ley electoral permiten a los socialistas superar en diputados al partido de Albert Rivera. Mientras que el electorado del PP apenas se mueve, la volatilidad contin¨²a en el PSOE, en tanto que Podemos registra una sensible recuperaci¨®n.

Primero, superar a Podemos y, despu¨¦s, a por el PSOE para colocarse cara a cara con el PP. Estos eran los objetivos de Ciudadanos, que hoy por hoy avalan las encuestas. El estudio de Metroscopia consolida al partido de Mariano Rajoy, empuja al PSOE a la tercera posici¨®n y coloca a Ciudadanos a solo un punto de distancia del PP. Esta es la fotograf¨ªa a 50 d¨ªas de las elecciones generales y ante una campa?a en la que la lucha va a ser sin cuartel porque ninguno de los contendientes va a darse por vencido ante las posibilidades abiertas de hacerse con la primera posici¨®n.

Hasta Podemos, que ha visto caer sus expectativas en m¨¢s de diez puntos en nueve meses, ha recuperado tres puntos en un mes. Todo a costa del PSOE; el partido m¨¢s asediado del arco pol¨ªtico, seg¨²n el estudio que Metroscopia realiz¨® entre los d¨ªas 26 y 28 de octubre.

La fuga de votos socialistas hacia el partido de Albert Rivera es una realidad a pesar de que los dirigentes socialistas hab¨ªan decidido no tener en cuenta a ning¨²n otro rival que no fuera el PP. El flujo de votantes del PSOE hacia Ciudadanos fue de un 5% en agosto; de un 7% en septiembre y un 11% de octubre. Por eso, le van a plantar cara. Pedro S¨¢nchez ya menciona por su nombre a Rivera y le dedica diatribas en el terreno de la ideolog¨ªa. "La nueva derecha es igual que la vieja derecha", resalta el l¨ªder socialista. Durante este fin de semana, S¨¢nchez se ha referido al partido centrista como "las nuevas generaciones del PP".

Si S¨¢nchez tiene que taponar el centro, no puede descuidar el flanco izquierdo. Podemos parece haber superado el bache de los ¨²ltimos meses y vuelve a recibir un flujo de votantes potenciales del PSOE: un 11% en el bar¨®metro de ¨²ltimos del mes de septiembre, y un 16% en el actual estudio. Si S¨¢nchez empuja a Rivera a la derecha, otro tanto hace Pablo Iglesias, l¨ªder de Podemos, con su rival socialista: hacia ese mismo rinc¨®n. A "los tres del b¨²nker" se refiere el secretario general de Podemos para hablar del PP, Ciudadanos y PSOE. El movimiento en intenci¨®n de voto de quienes ocupan el segundo, tercer y cuarto puesto en el espectro electoral no se produce en el PP, que parece haber detenido el trasvase de sus votos hacia Ciudadanos. Ya se llev¨® muchos: un 20% de votantes de los populares en 2011 se han pasado a la fuerza naranja.

El reparto de esca?os

Sin embargo, las estimaciones de adjudicaci¨®n de esca?os reflejan la fuerte p¨¦rdida del PP y del PSOE, aunque el sistema electoral beneficia claramente a ambos. Tanto es as¨ª que aunque Ciudadanos est¨¢ por encima del PSOE en intenci¨®n de voto, los socialistas ser¨ªan segunda fuerza parlamentaria. En el fondo hay 52 elecciones, tantas como circunscripciones, en las que se reparte un n¨²mero muy desigual de esca?os y se prima a las fuerzas cuyos apoyos electorales est¨¢n m¨¢s homog¨¦neamente repartidos en toda Espa?a. En las grandes circunscripciones, como Madrid, Barcelona, Valencia o Sevilla, el reparto es casi proporcional; en estos casos el sistema favorece a PP o PSOE, a los que les cuesta mucho menos obtener un esca?o.

El PP obtendr¨ªa entre 93 y 100 esca?os; el PSOE de 88 a 98 y Ciudadanos entre 72 y 84. Podemos entrar¨ªa en el Congreso con 42 a 46 diputados e Izquierda Unida colocar¨ªa 5. En el estudio actual, IU, con solo seis d¨¦cimas menos en voto que en 2011, conseguir¨ªa menos de la mitad de los diputados de entonces. La unidad de Podemos e IU les hubiera sido mucho m¨¢s favorable.