El misterio del joven espa?ol asesinado en plena calle en Berl¨ªn

La polic¨ªa alemana admite la dificultad del caso. Alejandro G., un hombre espa?ol de 26 a?os que estudiaba alem¨¢n en Berl¨ªn, fue apu?alado en la medianoche del s¨¢bado en plena calle. Tardar¨ªa unas pocas horas en morir. La v¨ªctima y el asesino no se conoc¨ªan ni ten¨ªan ninguna relaci¨®n, seg¨²n las primeras investigaciones de la polic¨ªa.

La investigaci¨®n se apoya tan solo en la vaga descripci¨®n del agresor que hicieron los testigos. La polic¨ªa volver¨¢ hoy al lugar de los hechos ¡ªel barrio de Kreuzberg, unos de los centros de la noche berlinesa¡ª con carteles con la foto de Alejandro G. con la esperanza de encontrar nuevos testigos que ayuden a esclarecer el caso. "?Qui¨¦n presenci¨® los hechos o puede dar datos sobre el autor del delito?", pregunta la polic¨ªa en los c¨¢rteles, redactados en alem¨¢n, ¨¢rabe y turco.?

¡°Fue todo muy r¨¢pido. Los testigos estaban muy sorprendidos y no pueden dar una descripci¨®n muy detallada¡±, asegura a este peri¨®dico un portavoz de la polic¨ªa. Tan solo acertaron a describir al agresor como un hombre de unos 25 a 30 a?os, una altura de 1,75 a 1,80 cent¨ªmetros, delgado y con perilla; llevaba una gorra gris y un abrigo largo. Seg¨²n la polic¨ªa ten¨ªan ¡°apariencia del sur", es decir, tez oscura.

El fallecido, que iba acompa?ado por un hombre y una mujer tambi¨¦n espa?oles, viv¨ªa en Berl¨ªn desde hac¨ªa un a?o. Los tres sal¨ªan en torno a las 0.45 de la madrugada de un local de Kreuzberg de vuelta a casa poco antes de la medianoche, cuando el joven fue apu?alado en la Oranienplatz.

Alejandro G., de origen ecuatoriano pero con nacionalidad espa?ola, hab¨ªa conocido a sus acompa?antes a trav¨¦s de una red de espa?oles en Berl¨ªn. Precisamente el s¨¢bado los tres volv¨ªan de pasar un d¨ªa en el que ¨¦l, que ya llevaba un a?o en la ciudad, hab¨ªa hecho de gu¨ªa a los otros dos espa?oles, reci¨¦n llegados, seg¨²n la polic¨ªa. La hermana del fallecido, cuya familia vive en Zaragoza, est¨¢ ya en Berl¨ªn para ocuparse de las gestiones, a?aden las mismas fuentes.? ?

Los investigadores aseguran que no hubo ninguna pelea ni ning¨²n signo de que algo fuera de lo normal estuviera ocurriendo. Los acompa?antes, seg¨²n cuenta el Berliner Zeitung, notaron que su amigo empezaba a tambalearse y de repente cay¨® al suelo ensangrentado. Una ambulancia traslad¨® a la v¨ªctima a un hospital, donde muri¨® en la misma noche del s¨¢bado.