Fin de fiesta en Roma
Operaci¨®n rel¨¢mpago para colocar al frente de la Obra P¨ªa a un asesor de Jorge Fern¨¢ndez
En secreto, deprisa y corriendo, apenas 72 horas antes de la jornada electoral y cuando ya se est¨¢ despidiendo del cargo, el embajador espa?ol ante la Santa Sede, Eduardo Guti¨¦rrez S¨¢enz de Buruaga, ha ejecutado una operaci¨®n de urgencia para colocar al frente de la Obra P¨ªa, una instituci¨®n tricentenaria que explota m¨¢s de 260 inmuebles en el centro hist¨®rico de Roma, a Ra¨²l Armando Sandoval, un asesor del ministro del Interior, Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz, visitador frecuente de la legaci¨®n diplom¨¢tica. Aunque a¨²n no se ha producido el nombramiento oficial, varios consejeros de la Obra P¨ªa, algunos de ellos religiosos, han confirmado el nombre del nuevo jefe in p¨¦ctore y afeado al embajador Guti¨¦rrez una operaci¨®n que atribuyen a ¡°maniobras pol¨ªticas en el seno del Gobierno espa?ol¡±.
La ¡°Obra P¨ªa de los Establecimientos Espa?oles en Roma¡± es, literalmente, una de las m¨¢s apetecibles joyas de la corona. Desde el siglo XVIII gestiona, no siempre de forma primorosa y casi nunca transparente, un ingente patrimonio inmobiliario que, seg¨²n la voluntad de sus padres fundadores, deb¨ªa destinarse a ¡°dotar a doncellas en apuros, socorrer a los peregrinos y ejercer el cuidado espiritual de las almas difuntas¡±. En la actualidad, la Obra P¨ªa espa?ola ¨Cmucho m¨¢s rica que la francesa, la alemana, la portuguesa o la polaca¡ª destina una parte del alquiler de sus 180 apartamentos y 80 locales comerciales a la caridad ¨Csosteniendo ¨®rdenes religiosas que atienden a necesitados o a trav¨¦s del ?bolo de San Pedro que gestiona el Papa¡ªy otra parte a sufragar los gastos de la Iglesia espa?ola en Roma. Durante las pasadas d¨¦cadas, la Obra P¨ªa ha estado casi siempre rodeada del misterio y la pol¨¦mica, sobre todo al descubrirse que algunos de sus m¨¢s preciados apartamentos eran alquilados a bajo precio a destacadas figuras de la pol¨ªtica o la nobleza.
La operaci¨®n rel¨¢mpago del embajador Guti¨¦rrez para colocar al frente de tan preciada instituci¨®n a un cargo de confianza del ministro del Interior ha sorprendido, y en cierta forma escamado, a buena parte de la legaci¨®n diplom¨¢tica en Roma. Sobre todo por la urgencia ¨Csolo unos d¨ªas antes de unas elecciones que se presentan inciertas¡ªy el secretismo. El embajador, un diplom¨¢tico de partido que no oculta su gran afinidad con el PP y en especial con Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, ha rehusado en varias ocasiones durante los ¨²ltimos d¨ªas hablar del relevo en la Obra P¨ªa con este peri¨®dico. ¡°Ya hablaremos m¨¢s adelante, m¨¢s adelante, todav¨ªa no hay nada oficial¡±, dec¨ªa el martes tras la entrega de un premio de poes¨ªa m¨ªstica en la sede de la embajada en la Plaza de Espa?a.
Dos d¨ªas despu¨¦s, durante una junta de la Obra P¨ªa, Guti¨¦rrez S¨¢enz de Buruaga inform¨® a los consejeros ¨Cen su mayor parte miembros de la embajada ante la Santa Sede y altos representantes de la Iglesia espa?ola en Italia¡ª de que el director de la instituci¨®n durante los ¨²ltimos 36 a?os, el italiano Eugenio Ruggeri, iba a ser sustituido por Ra¨²l Armando Sandoval. Un nombramiento que tambi¨¦n confirm¨® a este peri¨®dico el viernes por la noche uno de los m¨¢s cercanos asesores del embajador. Algunos consejeros afearon al diplom¨¢tico el m¨¦todo utilizado ¨Crapidez, secretismo, intereses no explicados del partido en el poder o de alguno de sus altos cargos¡ªpor considerarlo perjudicial para la fama, no siempre saludable, de la Obra P¨ªa en Roma.
El abogado Ra¨²l Armando Sandoval forma parte del c¨ªrculo pol¨ªtico y tambi¨¦n piadoso del ministro Fern¨¢ndez D¨ªaz, hasta el punto de que ambos son coautores de una obra sobre Sor Patrocinio, la Monja de las Llagas (Cuenca, 1811-Guadalajara, 1891). Durante los ¨²ltimos cuatro a?os al frente de Interior, Fern¨¢ndez D¨ªaz ha encargado a Sandoval algunas de las misiones m¨¢s peliagudas, entre ellas la de reunirse con responsables de M¨¦todo 3, la agencia que grab¨® la conversaci¨®n de la l¨ªder del PP en Catalu?a, Alicia S¨¢nchez Camacho, y Victoria ?lvarez, la exnovia de un hijo de Jordi Pujol. Al ser consultado por su inminente nombramiento, Ra¨²l Armando Sandoval asegur¨® que a¨²n no se hab¨ªa producido e hizo adem¨¢n de negarlo: ¡°Est¨¢ equivocado. Solo me han pedido mi curr¨ªculo. Supongo que habr¨¢ m¨¢s candidatos. Ni siquiera hemos hablado de las condiciones.¡±
Eugenio Ruggeri, el hasta ahora responsable de la Obra P¨ªa, tampoco quiso hacer declaraciones, por cuanto, seg¨²n asegura, solo ha recibido una comunicaci¨®n verbal de su cese. La embajada de Espa?a ante la Santa Sede se ha visto en las ¨²ltimas semanas salpicada por la detenci¨®n de monse?or Lucio Vallejo Balda, el sacerdote acusado de filtrar documentaci¨®n secreta del Vaticano. La doble vida del monse?or ¨Csupuesto guardi¨¢n de las finanzas del Papa por la ma?ana y juerguista por las noches¡ª siempre ten¨ªa en los imponentes salones de la embajada de Espa?a un lugar reservado, dada su estrecha relaci¨®n con el embajador Guti¨¦rrez. Monse?or Vallejo compart¨ªa afici¨®n por la embajada espa?ola ante la Santa Sede con el ministro del Interior. Fern¨¢ndez D¨ªaz era un habitual y su visita era siempre celebrada con cenas y recepciones. La ¨²ltima vez que visit¨® Roma, con motivo de una canonizaci¨®n, el carpintero de la embajada tuvo que alargar la mesa ya de por s¨ª amplia dado el elevado n¨²mero de invitados.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.