Pedro S¨¢nchez viaja a Lisboa en busca de consejo
El socialista Ant¨®nio Costa, pese a perder las elecciones, gobierna con el apoyo de la izquierda radical
?Pero Ant¨®nio, c¨®mo lo hiciste? Esta ser¨¢ la gran pregunta de Pedro S¨¢nchez a su colega socialista portugu¨¦s, Ant¨®nio Costa, a quien visita este jueves. Ambos perdieron sus respectivas elecciones generales el pasado trimestre, ambos recibieron peticiones de dimisi¨®n, sin embargo, hoy, Costa es el primer ministro de Portugal. Gobierna con los comunistas, un partido con el que nunca han tenido buena relaci¨®n. En 40 a?os jam¨¢s tuvieron su apoyo. En esta ocasi¨®n, s¨ª.
El secretario general del PSOE reanuda este jueves su agenda internacional, y lo hace con el vecino de la pen¨ªnsula Ib¨¦rica. A las dos de la tarde, S¨¢nchez ser¨¢ recibido por Costa en la sede del Partido Socialista (PS) en Lisboa. S¨¢nchez viaja con Iratxe Garc¨ªa, encargada de los temas de la Uni¨®n Europea, aunque no ser¨¢ Europa de lo que hablar¨¢n durante 90 minutos los dos dirigentes socialistas. Los dos se han reunido numerosas veces desde que son secretarios generales de sus partidos. Llegaron casi a la vez al cargo (S¨¢nchez, en julio de 2014; Costa, en noviembre), ambos estaban en la oposici¨®n y ten¨ªan que hacer frente a partidos que avanzaban por su izquierda (Podemos, Bloco¡).
Pese a las diferencias en la experiencia pol¨ªtica (Costa ha sido varias veces ministro y el alcalde que transform¨® Lisboa), sus destinos han ido paralelos, en pa¨ªses con Gobiernos conservadores y fuertes recortes sociales. Costa, que derroc¨® al anterior secretario general socialista porque solo hab¨ªa ganado las europeas por cuatro puntos, fue derrotado en octubre en las urnas por la coalici¨®n de centro derecha PSD-CDS-PP. Obtuvo el 32% de los votos, seis puntos menos que el vencedor. Aquella noche, varios compa?eros socialistas le pidieron que dimitiera. Tres meses despu¨¦s, el 20 de diciembre, S¨¢nchez fue derrotado en las urnas por el PP. Tambi¨¦n le sac¨® seis puntos de ventaja (28% contra 22%).
Sin mayor¨ªa absoluta
Pero la derecha hab¨ªa perdido en ambos casos la mayor¨ªa absoluta y la izquierda ten¨ªa posibilidades. En Portugal, aunque las cuentas parec¨ªan sencillas (cinco grupos en el Parlamento frente a los 13 partidos con representaci¨®n en el Congreso espa?ol) para lograr un acuerdo de Gobierno hab¨ªa que salvar un obst¨¢culo hist¨®ricamente imposible: la negativa del Partido Comunista a apoyar un Gobierno socialista. En 40 a?os, nunca lo hab¨ªa hecho; pero en el 41, lo hizo.
El art¨ªfice del milagro se llama Ant¨®nio Costa, que pas¨® en un mes de estar en la calle a situarse en el palacio de S?o Bento, sede del primer ministro.
Costa pas¨® en un mes de estar en la calle a estar en el palacio de S?o Bento, sede del primer ministro, una trayectoria a la que, sin duda, aspira su colega espa?ol
Nadie en Portugal daba un euro por aquel acuerdo. Para alcanzar una mayor¨ªa parlamentaria de 116 votos la izquierda ten¨ªa que sumar los 86 diputados del PS, los 19 del Bloco de Esquerda y los 17 del PC. A ojos espa?oles puede parecer sencillo, dado el agrupamiento del voto, pero hay que tener en cuenta que si el Bloco de Catarina Martins puede parecerse a Podemos, el PC portugu¨¦s no es Izquierda Unida, ni siquiera el PCE de Carrillo. La salida de la OTAN, del euro y la nacionalizaci¨®n de la banca son algunas de las banderas de este partido "marxista-leninista, internacionalista y patri¨®tico". Costa jam¨¢s contempl¨® pactar con el centroderecha; un pacto con el partido ganador ¡ªcomo en el caso de S¨¢nchez¡ª le llevaba, en el mejor de lo casos, a ser portavoz de la semioposici¨®n; en el m¨¢s probable, a casa.
A favor del Gobierno socialista con apoyo del resto de fuerzas de izquierdas, jug¨® el auge inesperado del Bloco, m¨¢s proclive al pacto con los socialistas, que arrastr¨® al PC, pues no pod¨ªa impedir un Gobierno que promet¨ªa acabar con la austeridad. Y, desde finales de noviembre, el PS gobierna en Portugal. Al Comit¨¦ Central del PC le bastaron 11 horas para aprobarlo; la Bolsa se asust¨® un d¨ªa, Bruselas resopl¨® otro; y Fitch, Morgan y Stanley esperan acontecimientos.
Costa ha logrado lo imposible: Gobierno monocolor socialista con apoyo parlamentario del Bloco y el PC, a cambio de pasar p¨¢gina a la austeridad: reponer pensiones, acabar con cortes salariales, rebajar el IVA¡ olvid¨¢ndose ambos de los principios fundacionales de sus partidos, como la salida del euro.
Costa le podr¨¢ mostrar a S¨¢nchez c¨®mo se negocia a cuatro manos, por separado y sin fotos; pero S¨¢nchez bien puede recordarle que en Portugal no hay nacionalismos, ni partidos que exigen referendos en Catalu?a.
Parlamentos vecinos y fragmentados
Las elecciones en Portugal dejaron cinco grupos en el Parlamento. En el Congreso espa?ol 13 partidos obtuvieron representaci¨®n en los pasados comicios.
Para alcanzar una mayor¨ªa parlamentaria de 116 votos, la izquierda portuguesa ten¨ªa que sumar los 86 diputados del Partido Socialista, los 19 del Bloco de Esquerda y los 17 del PC.
En Espa?a, la mayor¨ªa absoluta son 176 diputados. El PP obtuvo 123; el PSOE, 90; Podemos, 69; Ciudadanos, 40; ERC, 9; Democracia y Libertad, 8; PNV, 6; Unidad Popular-IU, 2; Bildu, 2 y CC, 1.
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