Podemos queda al margen del primer gran pacto tras el 20 de diciembre

El acuerdo para la composici¨®n de la Mesa del Congreso no debe relacionarse con el proceso de investidura, advierten las distintas formaciones, pero s¨ª anticipa una foto en negativo de las conversaciones que deben abrirse para intentar formar Gobierno. El Partido Popular ha podido constatar que est¨¢ en soledad, a pesar de ser la fuerza m¨¢s votada. Y ya ha recibido la primera lecci¨®n, al verse obligado a ceder la Presidencia de la C¨¢mara. Fuentes del entorno de Rajoy, sin embargo, defienden que al abandonar sus pretensiones el PP ha querido demostrar su voluntad de ser flexible ante futuros pactos.

Podemos tambi¨¦n ha recibido un mensaje claro: su pretensi¨®n de lograr grupo parlamentario propio para los partidos territoriales con los que se ali¨® para acudir a las urnas se enfrenta al muro levantado por las otras tres fuerzas mayoritarias, conjuradas en impedir cualquier avance de las aspiraciones soberanistas en esta legislatura.

El primer gran acuerdo tras las elecciones del 20 de diciembre lo han cerrado el PSOE y Ciudadanos. El PP ha decidido no presentar candidato propio, por lo que Patxi L¨®pez ser¨¢ elegido Presidente del Congreso. Todos rechazan, sin embargo, que esta primera decisi¨®n anticipe acercamientos futuros. En primer lugar, porque al PP no le ha quedado m¨¢s remedio que hacer de la necesidad virtud. Hasta el ¨²ltimo minuto los populares defendieron como l¨®gico y razonable que el presidente del Congreso fuera, como lo hab¨ªa sido siempre, el candidato de la lista m¨¢s votada. La nueva realidad aritm¨¦tica ha tumbado su pretensi¨®n y ha dado al PP un ba?o de humildad.

Y en segundo lugar, porque la voluntad de que el Congreso lo presida una fuerza distinta de la que ostenta el Gobierno -y de momento el Ejecutivo sigue en manos del PP-, era compartida por PSOE, Ciudadanos y Podemos. Solo el empe?o de la formaci¨®n de Pablo Iglesias de vincular el acuerdo a su pretensi¨®n de tener cuatro grupos parlamentarios le ha dejado al margen.

Podemos obtendr¨¢ dos puestos en la Mesa. Los que le corresponden en funci¨®n de su peso parlamentario. Ni uno m¨¢s. Este resultado arroja dos pistas sobre la actitud de esta fuerza pol¨ªtica y de las ataduras que tiene Iglesias en las semanas venideras. Han demostrado, en esta primera ronda, poca flexibilidad negociadora. Y ha quedado claro que el margen interno de que disponen para tomar decisiones es muy limitado, con cuatro formaciones que se van a vigilar mutuamente en todo momento.

Una mala se?al para S¨¢nchez, que va a tener muy cuesta arriba cualquier intento de alcanzar un acuerdo con Podemos.

La primera prueba a la que deb¨ªan hacer frente las fuerzas pol¨ªticas en la nueva etapa surgida tras el 20 de diciembre, la constituci¨®n de la Mesa del Congreso, ha servido para mostrar la disponibilidad a transigir de cada uno de los partidos. Y para reflejar una realidad que S¨¢nchez, en su empe?o por construir una mayor¨ªa alternativa, deber¨¢ superar. En la distribuci¨®n de poder que supone el ¨®rgano directivo de la C¨¢mara, el centro derecha dispone de la mayor¨ªa: PP y Ciudadanos suman cinco puestos; PSOE y Podemos, cuatro.