S¨¢nchez exige a Podemos que explique su voto con el PP

Los diputados socialistas se sintieron ofendidos tanto por la interpretaci¨®n que hizo Pablo Iglesias, el l¨ªder de Podemos, del acuerdo con Ciudadanos como por la ausencia de alg¨²n reconocimiento a los Gobiernos socialistas de la democracia. El colof¨®n para muchos de ellos fue una descalificaci¨®n desde la tribuna al expresidente Felipe Gonz¨¢lez. A partir de este jueves, el PSOE se centrar¨¢ en pedir a Podemos que explique a sus votantes por qu¨¦ en su estreno en la C¨¢mara ha votado de forma coincidente con Mariano Rajoy y el Partido Popular.

¡°No es que no pueda, es que no quiere el acuerdo¡±. Esta sentencia de Pedro S¨¢nchez, candidato del PSOE a la presidencia del Gobierno, a Pablo Iglesias, l¨ªder de Podemos, tras el duro enfrentamiento dial¨¦ctico, fue la conclusi¨®n de numerosos socialistas. Nadie se atreve a dar por rotos todos los puentes entre las dos formaciones pol¨ªticas pero s¨ª es una realidad que desde el lado del PSOE la distancia con Podemos se ensanch¨® en pocas horas.

¡°No hace falta que reparta carn¨¦s de buen socialista¡±. Esta expresi¨®n de S¨¢nchez a Iglesias lleg¨® cuando los ¨¢nimos ya se hab¨ªan caldeado considerablemente ante el discurso de Iglesias con reivindicaci¨®n, recuerdo y homenaje de quienes sufrieron los destrozos del franquismo, y de todos aquellos que lucharon por las libertades en la dictadura. En la bancada socialista se hac¨ªan comentarios sobre ¡°el adanismo¡± del dirigente de Podemos al obviar que discursos de ese cariz se hab¨ªan pronunciado en el hemiciclo por centenares a lo largo de muchos a?os.

Los esfuerzos de contenci¨®n fueron in¨²tiles cuando Iglesias despach¨® la gesti¨®n gubernamental de Felipe Gonz¨¢lez, con una alusi¨®n ¡°a la cal¡±, en referencia al macabro episodio de los GAL. ¡°Nunca olvidaremos esa expresi¨®n de Pablo Iglesias; nunca la olvidaremos¡±, se?al¨® el diputado Rafael Simancas, portavoz de Educaci¨®n. Este parlamentario, se enfrent¨® con Iglesias cuando el l¨ªder de Podemos desde su esca?o ped¨ªa a los socialistas que no hicieran caso a los consejos de la ¡°vieja guardia de la cal¡±.

¡°Pablo, no insultes¡±

A pesar de los intentos del n¨²mero dos del PSOE, C¨¦sar Luena, y de los portavoces en el Congreso y en el Senado, Antonio Hernando y ?scar L¨®pez, para que los suyos no perdieran la calma, la explosi¨®n fue incontenible. ¡°?No nos insultes! ?T¨² crees que esa es la historia del PSOE? ?Vosotros est¨¢is aqu¨ª, como nosotros, porque antes muchos socialistas lucharon por la libertad!¡±, escucharon decir a Simancas, mientras otros gritaban ¡°intolerable¡±, e Iglesias les reprend¨ªa. La interpretaci¨®n de algunos socialistas es que Iglesias golpe¨® donde m¨¢s dol¨ªa, como es ¡°insultar al icono m¨¢s querido, Felipe Gonz¨¢lez¡±. Tras el barullo, S¨¢nchez, proclam¨® su ¡°orgullo¡± por el expresidente socialista.

No era previsible en absoluto que hubiera la menor posibilidad de acercamiento antes de la votaci¨®n. ¡°Podemos ha extremado y forzado el desencuentro de una manera tan artificial como insultante¡±, se?al¨® un miembro de la direcci¨®n del PSOE. ¡°La izquierda no suma, por mucho que digan¡±, insisti¨® S¨¢nchez en el intento de deshacer la aseveraci¨®n de Iglesias de que el PSOE ha optado por irse con Ciudadanos cuando pod¨ªa haber formado una mayor¨ªa por la izquierda.

Los n¨²meros solo saldr¨ªan con la abstenci¨®n de ERC y Democr¨¤cia i Llibertat, antes Converg¨¨ncia.

Todos los esfuerzos de S¨¢nchez se centraron en exhibir ante los grupos de izquierda el acuerdo con el partido de Rivera resaltando, con p¨¢ginas y apartados, las medidas m¨¢s avanzadas y sociales, para acabar pregunt¨¢ndose por qu¨¦ no las iban a apoyar. Sobre las mismas seguramente volver¨¢n a hablar porque nadie da por definitivamente rotas las relaciones a pesar de la enorme antipat¨ªa.