Algunas claves del no-presupuesto catal¨¢n de 2016

No presupuesto, no 'proc¨¦s'

Lo formulaban con exactitud meridiana Artur Mas y el president, Carles Puigdemont. Dec¨ªa Mas: ¡°Si la CUP veta el presupuesto, el proc¨¦s queda muy tocado¡± (El Peri¨®dico, 29 de mayo). Deletreaba Puigdemont: ¡°No se puede ir hacia la independencia con unos presupuestos prorrogados¡± (entrevista a EL PA?S, 5 de junio).

Que sin presupuesto no hay proc¨¦s es una evidencia pol¨ªtica: un pa¨ªs cuyo liderazgo se muestra incapaz de aprobar siquiera un presupuesto anual, esa asignatura corriente, tampoco lo ser¨¢ de superar cualquier prueba de m¨¢s envergadura. Quien no puede lo menos tampoco puede lo m¨¢s, dec¨ªan los romanos. Un fracaso de ese calibre implica ¡°hacer el rid¨ªculo¡±, escribe el propio Mas (La Vanguardia, 5 de junio). Eso.

Lo mejor, solo 4 meses

Ni siquiera si la CUP hubiera dado marcha atr¨¢s en su promesa de interponer una enmienda a la totalidad del proyecto de presupuesto 2016 elaborado por el vicepresidente Oriol Junqueras, eso hubiera implicado su segura aprobaci¨®n. Lo ¨²nico que habr¨ªa garantizado es que de momento no se rechazaba. O sea, que habr¨ªa seguido su tr¨¢mite para aprobarse quiz¨¢ entrado julio. Tampoco era para tirar cohetes: descontada la par¨¢lisis de agosto, habr¨ªan quedado a lo sumo cuatro meses para su despliegue (y su correcci¨®n, si variables subyacentes como el crecimiento del PIB del 2,9% se contrajesen), calendario de voluntarista e ilusorio.

Recurrir al funambulismo

La imposibilidad de aprobar un presupuesto es un fracaso pol¨ªtico rotundo. Plasma la inexistencia de una mayor¨ªa parlamentaria. O de la ¡°estabilidad¡± que mil veces se nos prometi¨®. Los Gobiernos nacionalistas exhiben en esto tradici¨®n: de 2012 para 2013, cuando CiU gan¨® pero necesit¨® formar mayor¨ªa con Esquerra: prorrog¨® el presupuesto de 2012.

Los ¨²ltimos seis a?os han empezado, todos ellos, con pr¨®rrogas. Aunque la esforzada Neus Munt¨¦ asegura que eso ¡°no implica la par¨¢lisis¡± ¡ªargumento de sus aliados cupaires¡ª, la pr¨®rroga paraliza operaciones: se puede ejecutar cada mes solo la doceava parte de la cuant¨ªa del presupuesto de gasto del a?o anterior (?cuando este a?o habr¨¢ mucho m¨¢s dinero disponible!); se puede ampliar cr¨¦ditos, pero no crear nuevos; se cercenan inversiones de nuevo cu?o. Habr¨ªa que acudir al funambulismo para salvar el plan de choque social y las presuntas nuevas estructuras de Estado, algo complicado en una administraci¨®n sometida a estrecha vigilancia por su incapacidad de financiarse en los mercados al estar su deuda en la categor¨ªa de los bonos basura.

Afortunado Junqueras

Junqueras hab¨ªa nacido (como vice) de pie. La coyuntura espa?ola le ha regalado casi 3.000 millones de ingresos ¡ªprevistos para 2016¡ª en formato gratis total. Sin esfuerzo adicional, sin poner m¨¢s impuestos, sin negociar pactos nocturnos con el ministro de Hacienda, Crist¨®bal Montoro.

Los ¡ªal menos 2.777 millones¡ª extras se distribuyen en 850 de menor coste financiero de la deuda (por la bajada de los tipos de inter¨¦s; y a¨²n aumentar¨ªan otros cien si se negocia la continuidad del tipo cero a los pr¨¦stamos del FLA); 1.407 m¨¢s por la devoluci¨®n de partidas correspondientes a 2014 del sistema de financiaci¨®n auton¨®mica; y unos 520 m¨¢s por la mejora del ciclo: al crecer la econom¨ªa, aumenta la recaudaci¨®n de impuestos, sobre todo el muy relevante sobre Transacciones Patrimoniales y Actos Jur¨ªdicos Documentados, pues la construcci¨®n se reactiva.

Los ¡°m¨¢s sociales¡±

Estas cuentas deb¨ªan ser ¡°las m¨¢s sociales de la historia¡±, se ufanaba el vicepresidente, refiri¨¦ndose al peso del gasto social en el conjunto (73,6%) y al del gasto social nuevo (874 millones) dentro del paquete de 1.103 millones nuevos disponibles: suficiente para triplicar largamente el plan de choque social negociado con la CUP.

Este ser¨ªa el mejor baremo de la historia nacionalista, pero no muy distinto del alcanzado en otras autonom¨ªas. Y sobre todo, si en las condiciones actuales se pueden formular cuentas tan suculentas, ?c¨®mo se conjuga la posibilidad de cuadrarlas en el presupuesto m¨¢s rutilante, con la denuncia de la ¡°asfixia¡± econ¨®mica a las finanzas catalanas? Y por ende, ?con la urgencia de separarse de un Estado tan castrador, traidor y deleznable?

Pero los ind¨®mitos sindicalistas ve¨ªan ¡°insuficiente¡± el gasto social previsto, para una poblaci¨®n con una tasa de pobreza del 20,9% y con el 70% de parados sin prestaci¨®n. Y que los viejos roqueros del tripartito calculan que desde su ¨²ltimo a?o (2010) el gasto social nominal de la Generalitat se ha reducido en m¨¢s de 2.500 millones. Aguafiestas. De una fiesta definitivamente aguada.