La polic¨ªa ¡®barre¡¯ el Ministerio del Interior por las grabaciones a Fern¨¢ndez D¨ªaz

Miembros de la Polic¨ªa Judicial han entrado este viernes en la sede del Ministerio del Interior, en el n¨²mero 5 del Paseo de la Castellana, para realizar un "barrido" en profundidad ("barrido interior, inspecci¨®n exhaustiva y pericial exterior") y descartar as¨ª la existencia de elementos de grabaci¨®n en las dependencias, seg¨²n confirman fuentes de Interior.

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La actuaci¨®n es casi meramente protocolaria, en el marco de una investigaci¨®n policial por las recientes filtraciones de las grabaciones, realizadas hace dos a?os, al ministro Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz (ahora en funciones) y al ahora exdirector de la Oficina Antifraude Catalana (OAC) Daniel de Alfonso.

Las conversaciones, en las que supuestamente conspiran contra l¨ªderes independentistas catalanes en octubre de 2014 ¡ªen los d¨ªas previos a la consulta catalana del 9-N¡ª, habr¨ªan sido registradas por alg¨²n elemento de grabaci¨®n y su contenido ha sido filtrado recientemente por el diario digital P¨²blico, provocando un esc¨¢ndalo de dimensiones imprevisibles en ese ministerio en los d¨ªas previos a las ¨²ltimas elecciones generales del pasado 26 de junio.

El diario P¨²blico, que a¨²n no ha entregado las copias de las grabaciones a la polic¨ªa a falta de una orden judicial, deduce de las escuchas que se realizaron desde el tel¨¦fono m¨®vil de De Alfonso, recientemente cesado por el Parlamento catal¨¢n. Es lo que parece por el sonido y los ruidos que se registran con el movimiento del exdirector de la Oficina Antifraude Catalana. Desde que estall¨® el esc¨¢ndalo, De Alfonso se ha esforzado por repetir una y otra vez que ¨¦l no grab¨® al ministro, que no tiene ning¨²n sentido dado el tono "coloquial" que emplea en esas conversaciones y que no ha filtrado nada. El ministro tambi¨¦n ha negado que ¨¦l grabase nada, por lo que todas las sospechas se centran en su c¨ªrculo m¨¢s cercano en aquellos d¨ªas y en el propio grupo de agentes policiales (la llamada "polic¨ªa patri¨®tica"), a quienes presumiblemente se les encargaba obtener pruebas para criminalizar a adversarios u oponentes pol¨ªticos.

Las grabaciones, seg¨²n lo difundido por P¨²blico, se presentaron en clips de audio de aproximadamente media hora, como si cada vez que pasara ese tiempo se reactivara una nueva grabaci¨®n. Fuentes policiales han asegurado que existe la posibilidad de instalar un software en un tel¨¦fono, "una modalidad de "troyano", que puede activarse de manera remota y que incluso graba con el tel¨¦fono apagado.