El PP tiene asegurado el control del pacto para la Mesa del Congreso
Los populares tendr¨¢n que ceder un puesto para que pueda entrar Ciudadanos y el PSOE aspira a la Presidencia de la C¨¢mara
El PP tiene asegurado con sus 137 diputados el control de la Mesa del Congreso o, al menos, forzar al resto de partidos, especialmente a PSOE y Ciudadanos, a pactar. En su mano est¨¢ la decisi¨®n de mostrarse flexible y permitir que la presidencia de la C¨¢mara sea para otro partido y que Ciudadanos no quede fuera del ¨®rgano de gobierno del Congreso. Esa ser¨¢ la primera batalla a varias bandas en las negociaciones que se abren esta semana para formar Gobierno y que describen un panorama distinto en el reparto de las estructuras del Congreso del que sali¨® de las elecciones del pasado mes de diciembre.
Despu¨¦s de las elecciones del 20 de diciembre, como no hab¨ªa una mayor¨ªa clara y hubo un pacto entre el PP, el PSOE y Ciudadanos, se produjo casi con un reparto equitativo de la Mesa que dio tambi¨¦n entrada a Podemos.
La Mesa tiene unas funciones muy limitadas, superadas por las de la Junta de Portavoces, pero el resultado de esa negociaci¨®n da idea de la voluntad de acuerdos del partido mayoritario y de la correlaci¨®n de fuerzas. De hecho, en diciembre se aplic¨® el criterio de que la presidencia correspondiera a un partido que no sea el mayoritario, con lo que, en teor¨ªa, no coincid¨ªa con el que liderara la formaci¨®n de Gobierno.
El grupo de Converg¨¨ncia, en el aire y en manos del PSOE
Convergencia depende de PP y PSOE para tener grupo parlamentario propio y corre el riesgo de, por primera vez, pasar al Grupo Mixto.
CDC tuvo ocho diputados, pero no alcanz¨® el 15% en todas las circunscripciones como exige el reglamento. Por eso, necesita un pr¨¦stamo de siete diputados de alguno de los grupos mayoritarios, es decir, del PP y del PSOE. La Mesa siempre autoriza esos pr¨¦stamos, que obligan a que los diputados permanezcan en los grupos hasta el siguiente periodo de sesiones. El PSOE ya lo hizo en el Senado con CDC en diciembre.
ERC se ha negado a formar un solo grupo con CDC, sumando los diputados de ambos partidos.
En la Mesa, en la anterior legislatura el PP tuvo tres puestos de ocho; el PSOE, uno; Podemos, dos; y Ciudadanos, dos. Ahora la traslaci¨®n aritm¨¦tica de los votos dar¨ªa cuatro seguros para PP, dos para PSOE y dos para Podemos. Es decir, Ciudadanos quedar¨ªa fuera y solo podr¨ªa tener un representante si pacta con el PP para que le ceda uno.
Para la Presidencia, entonces fue elegido el socialista Patxi L¨®pez con los votos del PP, el PSOE y Ciudadanos. Podemos intent¨® en diciembre un acuerdo alternativo con Converg¨¨ncia, PNV y ERC para elegir a Carolina Bescansa, pero su gesti¨®n fracas¨®.
Ahora, en teor¨ªa, el PP tiene en su mano asegurarse la Presidencia si suma los votos de Ciudadanos, tras cederle un puesto en la Mesa. El PSOE aspira a pactar este cargo con el PP, aplicando el mismo criterio de diciembre, y, en todo caso, pretende mantener lo dos puestos que le corresponden en la Mesa. El partido de Albert Rivera pretend¨ªa que la Presidencia fuera para su diputado Ignacio Prendes, pero admite la dificultad tras los resultados del 26-J y solo podr¨ªa lograrlo por decisi¨®n del PP, si hay acuerdo para la investidura. En caso contrario, si Ciudadanos hiciera un pacto con todos los dem¨¢s grupos contra el PP para la Presidencia, los populares impedir¨ªan que entrara en la Mesa. Fuentes del PP explican que el proceso de negociaci¨®n es a¨²n muy incipiente y que, por tanto, no hay nada decidido, pero que su voluntad es que la Mesa refleje la pluralidad de la C¨¢mara, lo que se entiende como la probabilidad de que cedan un puesto a Ciudadanos o la Presidencia.
El sistema de elecci¨®n consiste en varias votaciones secretas y con papeleta para el presidente, los cuatro vicepresidentes y los cuatro secretarios de la C¨¢mara.
Una vez que la legislatura avance, si es que hay investidura, el poder de la Mesa ya estar¨¢ muy subordinado al de la Junta de Portavoces, que es la que, por ejemplo, tiene capacidad para frenar comparecencias de miembros del Gobierno solicitadas por la oposici¨®n. S¨ª tiene poder en el arranque del mandato, por ejemplo, para dar el visto bueno a la creaci¨®n de los grupos parlamentarios.
Grupos parlamentarios
La Mesa, seg¨²n el Tribunal Constitucional, tiene poder para decidir con la flexibilidad que crea necesaria sobre la forma de aplicar el reglamento. En esta pasada legislatura rechaz¨® que Izquierda Unida tuviera grupo propio, pero s¨ª permiti¨® que lo lograra ERC. Y no tuvo que decidir sobre los grupos de Podemos, porque renunciaron a pedirlos finalmente para las confluencias de Catalu?a, Galicia y Valencia.
En el Senado, P¨ªo Garc¨ªa Escudero tiene asegurada la Presidencia y el control de la Mesa de la C¨¢mara.
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