La propuesta del PP choca con el pacto de S¨¢nchez y Rivera
Socialistas y Ciudadanos pactaron dar marcha atr¨¢s a muchas de las reformas del PP y consensuaron una amplia reforma constitucional que soslayan los populares
La propuesta que ha entregado el PP a los partidos para que apoyen la investidura de Mariano Rajoy refleja profundas diferencias con el pacto de Gobierno que alcanzaron Pedro S¨¢nchez y Albert Rivera el pasado febrero. No solo porque socialistas y Ciudadanos pactaron dar marcha atr¨¢s a muchas de las reformas del PP, sino porque consensuaron una amplia reforma constitucional que ni siquiera mencionan ahora los populares. Impuestos y marco laboral tambi¨¦n les separan.
En las 55 p¨¢ginas del ¡°Programa para el Gobierno de Espa?a¡± del PP las propuestas son mucho m¨¢s gen¨¦ricas que las m¨¢s de 200 medidas que el PSOE y Ciudadanos plasmaron en su ¡°Acuerdo para un Gobierno reformista y de progreso¡±, de 67 p¨¢ginas. Esa falta de concreci¨®n del PP, sin embargo, no evita puntos de fricci¨®n importantes con lo pactado por los socialistas y Ciudadanos:
El PSOE y Ciudadanos quieren tumbar reformas del PP. Pedro S¨¢nchez y Albert Rivera se comprometieron a sustituir la reforma laboral del Gobierno de Rajoy con un nuevo Estatuto de los Trabajadores aprobado en el plazo de un a?o. Aunque la secretaria general del PP, Mar¨ªa Dolores de Cospedal, asegur¨® ayer que su partido est¨¢ dispuesto a ¡°mejorar¡± su reforma laboral, nada dice de ello su documento, que solo incluye como gui?o a Ciudadanos la aceptaci¨®n del llamado ¡°Fondo de capitalizaci¨®n¡± austriaco para los trabajadores, con el cual los empleados costean parte de su futura indemnizaci¨®n.
El PSOE y Ciudadanos incluyeron en su acuerdo la recuperaci¨®n del peso de la negociaci¨®n colectiva que modific¨® el PP y de la que nada dice en su propuesta, y definieron dos ¨²nicas modalidades de contrato: uno indefinido y otro ¡°estable y progresivo¡± con una indemnizaci¨®n creciente, lo que supone cambiar el marco laboral de contrataci¨®n de los populares, que estos no plantean modificar en su propuesta para lograr la investidura de Rajoy.
S¨¢nchez y Rivera acordaron tambi¨¦n revisar la reforma del PP de la Ley de Seguridad Ciudadana (conocida como Ley Mordaza) en los preceptos recurridos ante el Tribunal Constitucional y en ¡°los que reconocen facultades excesivas de intervenci¨®n de las fuerzas de seguridad¡±, dec¨ªa su acuerdo. Ambos partidos se comprometieron a revocar la reforma del PP en materia de jurisdicci¨®n universal y a la derogaci¨®n ¡°inmediata¡± del art¨ªculo 315.3 del C¨®digo Penal, sobre el ejercicio del derecho de huelga. El texto del PP no aporta ninguna propuesta a sus posibles socios sobre estas otras dos reformas que rechazan.
En materia educativa, PSOE y Ciudadanos pusieron por escrito la ¡°paralizaci¨®n del calendario de la LOMCE¡± (la ley educativa del PP). Los populares proponen en su documento un pacto nacional educativo, pero no detener su ley. El pacto de Estado les une, pero hay diferencias en las materias concretas. El PP habla de ¡°incrementar¡± las becas, advirtiendo de antemano ¡°que se encuentran ya en m¨¢ximos hist¨®ricos¡±, mientras S¨¢nchez y Rivera pretenden que estas sean un ¡°derecho subjetivo¡±, de modo que el cr¨¦dito de los Presupuestos Generales pueda ser ampliable si no llega para cubrir a todos los alumnos que las necesiten. Ahora, una vez superado, ya no se conceden.
La reforma de la Constituci¨®n que soslaya el PP. El PSOE y Ciudadanos promueven una amplia reforma de la Ley Fundamental que obvia el PP y con la que quieren dar respuesta tambi¨¦n al desaf¨ªo independentista de Catalu?a. Los populares plantean a cambio: ¡°Promoveremos un marco de entendimiento con las fuerzas pol¨ªticas constitucionalistas a la hora de dar respuesta a los retos que plantea el debate territorial¡±. Nada dice el PP de cambiar la Constituci¨®n, mientras el PSOE y Ciudadanos escribieron en su acuerdo que Espa?a necesitaba una reforma de la Constituci¨®n para asegurar los derechos sociales y para ¡°completar el funcionamiento federal de la organizaci¨®n territorial del Estado¡±. En esa reforma se abordar¨ªa la revisi¨®n del t¨ªtulo VIII (el de la organizaci¨®n territorial del Estado) para ¡°desarrollar el concepto del Estado federal¡±. En lo que s¨ª coinciden las tres formaciones es en oponerse a cualquier refer¨¦ndum de autodeterminaci¨®n.
Un modelo fiscal diferente. El PP propone una reforma del sistema de financiaci¨®n auton¨®mica y una rebaja fiscal generalizada de dos puntos en el IRPF. S¨¢nchez y Rivera pactaron al final no subir los impuestos y bajarlos cuando fuera posible, pero s¨ª definieron que la riqueza tribute m¨¢s (con el estudio de la creaci¨®n de un impuesto a las grandes fortunas) y que se recupere el Impuesto de Sucesiones y Donaciones y el del Patrimonio en las comunidades que los han vaciado. Rebajar el IVA cultural al 10% es otra de las medidas consensuadas por el PSOE y Ciudadanos que revocar¨ªa la reforma del PP y que este obvia en su propuesta.
Diputaciones, conciliaci¨®n, sanidad y religi¨®n. Uno de los puntos m¨¢s pol¨¦micos del acuerdo del PSOE y Ciudadanos fue la supresi¨®n de las diputaciones, que el PP aboga por mantener. Los populares no est¨¢n tampoco por la ampliaci¨®n de los permisos de paternidad y maternidad de las 18 semanas actuales a 26, como recogieron en su acuerdo S¨¢nchez y Rivera, y tampoco les ofrecen recuperar la sanidad universal para los inmigrantes irregulares, como ambos partidos incluyeron pactaron. El PP nunca se ha manifestado a favor de la ¡°revisi¨®n¡± de los acuerdos con la Santa Sede, como se comprometieron los dos partidos a los que interpela. Estos definieron tambi¨¦n como esencial un plan de 7.000 millones de euros para un Ingreso M¨ªnimo Vital y un Complemento Salarial Garantizado. El PP solo les propone, a cambio, armonizar las rentas m¨ªnimas de las comunidades aut¨®nomas.
El d¨¦ficit les une. Las tres formaciones se comprometen a cumplir el objetivo del d¨¦ficit y a buscar ¡°flexibilidad¡± en el marco de la normativa de la UE.
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