Rajoy ir¨¢ a la cumbre de mandatarios del sur de Europa en Atenas

Mariano Rajoy acudir¨¢, ¡°con toda probabilidad¡±, a la cumbre de l¨ªderes mediterr¨¢neos de la UE que el jefe del Gobierno griego, Alexis Txipras, ha convocado para el 9 de septiembre en Atenas (Grecia), seg¨²n fuentes de La Moncloa. Aunque a¨²n no se ha tomado una decisi¨®n definitiva, las citadas fuentes dan casi por sentado que Rajoy aceptar¨¢ la invitaci¨®n, como ya lo ha hecho el presidente franc¨¦s Fran?ois Hollande y se espera que haga el primer ministro italiano Matteo Renzi.

El objetivo de esta cita es buscar una posici¨®n com¨²n de los pa¨ªses del sur de Europa ante la cumbre que los 27 socios de la UE (todos salvo Reino Unido) celebrar¨¢n el d¨ªa 16 en Bratislava (Eslovaquia) para preparar la respuesta ante el Brexit. A falta de que se cierre la lista de participantes, se espera que tambi¨¦n acudan a Atenas los mandatarios de Chipre, Malta y, posiblemente, Portugal y Croacia.

La presencia de Rajoy en Atenas dejar¨¢ m¨¢s en evidencia si cabe su ausencia de la cumbre que el pasado d¨ªa 22 celebraron a bordo del portaaviones Garibaldi Hollande, Renzi y la canciller alemana Angela Merkel. El Gobierno aduce que Rajoy no acudi¨® porque es un presidente en funciones. Lo cierto es que no lo hizo porque no fue invitado. Y es dif¨ªcil saber si lo hubiera sido de haber estado en pleno uso de sus competencias, especialmente tras el incumplimiento de los compromisos de d¨¦ficit por parte de Espa?a.

La reuni¨®n en el portaaviones italiano no es la primera del triunvirato franco-germano-italiano. Los tres l¨ªderes ya se vieron el 27 de junio en Berl¨ªn, tras el portazo a la UE en el refer¨¦ndum brit¨¢nico. Rajoy no fue invitado tampoco entonces. Pero Rajoy, recuerdan en Moncloa, ya se encontraba en funciones.

La consolidaci¨®n de este triunvirato, que vendr¨ªa a sustituir al debilitado eje franco-alem¨¢n (sobre todo del lado de Hollande) supone un riesgo de marginalizaci¨®n para Espa?a. Su existencia se justifica en base a que son las tres mayores econom¨ªas del euro (Espa?a es la cuarta) y en su condici¨®n de socios fundadores de la UE (Espa?a no ingres¨® hasta 1986).

En Moncloa se muestran convencidos de que Espa?a se incorporar¨¢ a este n¨²cleo dirigente cuando tenga un Gobierno con plemos poderes, pero recuperar el terreno perdido es mucho m¨¢s dif¨ªcil que defenderlo.

De momento, como presidente en funciones ¡ªse da por descontado que no lograr¨¢ la investidura ni el 31 de agosto ni el 2 de septiembre¡ª, Rajoy acudir¨¢ los d¨ªas 4 y 5 del mes pr¨®ximo a la cumbre del G-20 en Hangzhou (China), el 9 a Atenas y el 16 a Bratislava.

Es improbable que viaje a Nueva York para intervenir en septiembre ante la Asamblea General de la ONU, aunque Espa?a concluye en diciembre su etapa como miembro no permanente del Consejo de Seguridad. La campa?a para las elecciones vascas y gallegas, el d¨ªa 25, manda en la agenda.

Ya en octubre, hay dos citas ineludibles: la cumbre de la UE (20 y 21) y la iberoamericana (Cartagena de Indias, Colombia, el 28 y 29). Pero en Moncloa no se hacen planes tan a largo plazo.