?Son ellos el problema?
El fracaso de S¨¢nchez tuvo una tabla de salvaci¨®n: la noticia del nombramiento de Soria
En la sesi¨®n de investidura de la semana pasada, el l¨ªder socialista se hab¨ªa metido en un callej¨®n sin salida. O con una salida ¨²nica: nuevas elecciones, la que nadie quiere. Su posici¨®n era insostenible: el malestar y el desconcierto reinaban hasta en sus propias filas. La situaci¨®n de Pedro S¨¢nchez me recordaba aquel conocido texto de Samuel Beckett: "Lo intentaste. Fracasaste. No importa. Int¨¦ntalo de nuevo. Fracasa otra vez. Fracasa mejor".
Quien fracas¨® en la sesi¨®n del viernes no fue Rajoy sino S¨¢nchez. Uno ofrec¨ªa salidas, el otro ninguna. No y no y todas las partes del no. Fracasaba otra vez aunque no fracasaba mejor sino peor: puro teatro del absurdo.
Pero en ocasiones llega una tabla de salvaci¨®n, esta vez lleg¨® en forma de noticia: Jos¨¦ Manuel Soria hab¨ªa sido designado candidato para cubrir una plaza de alto cargo en el Banco Mundial. El que tuvo que dimitir como ministro hace tan solo unos meses por haber depositado dinero sin declarar en para¨ªsos fiscales y, adem¨¢s, no explic¨® toda la verdad, era premiado. Estupefacci¨®n general, especialmente en las propias filas, en las del PP. ?Lo que nos faltaba!
El punto m¨¢s d¨¦bil de Rajoy es la corrupci¨®n, no porque ¨¦l sea un corrupto, nadie le ha acusado de eso, sino por despreocuparse de la corrupci¨®n en su partido. El mensaje "s¨¦ fuerte, Luis" ha pasado a la peque?a historia de Espa?a. Sin embargo, todo empezaba a olvidarse, a quedar lejos, hab¨ªa obtenido m¨¢s votos que nadie y al alza, se estaba pasando p¨¢gina. Pues no: otra vez aparec¨ªa el cad¨¢ver.
Lo de Soria, en s¨ª mismo, es peccata minuta comparado con otros casos, pero muestra la alegr¨ªa inconsciente desde la que se gobierna, la nula sensibilidad hacia la situaci¨®n por la que pasan muchos ciudadanos honestos, las ventajas del amiguismo. A veces los casos menores pero inoportunos alcanzan m¨¢s repercusi¨®n que los realmente graves. ?Se acuerdan de aquella cacer¨ªa en Botsuana? Ah¨ª radica la gravedad pol¨ªtica del caso Soria: llueve sobre mojado cuando ya el suelo empezaba a secarse. Eso irrita a todos.
Hoy es mucho m¨¢s complicado investir a Rajoy que hace una semana. Una parte del PSOE estaba contra S¨¢nchez por sus contradicciones irresueltas, hoy una parte del PP est¨¢ contra Rajoy por su dejadez y apat¨ªa. Ambos, por razones distintas, se sit¨²an a un nivel similar. ?Ser¨¢n ellos el problema? Recordemos aquella frase de Francisco Camb¨®: ¡°Hay dos maneras de llegar al desastre: una, pedir lo imposible; otra, retrasar lo inevitable¡±.
?Qu¨¦ l¨ªderes pol¨ªticos piden hoy lo imposible y, a la vez, retrasan lo inevitable?
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