La direcci¨®n de Podemos se dividi¨® ante la posibilidad de dejar gobernar a S¨¢nchez
El debate se plante¨® dos veces, pero se impuso la tesis de Iglesias de no hacer concesiones a los socialistas
La direcci¨®n de Podemos debati¨® en sus m¨¢ximos ¨®rganos de decisi¨®n la posibilidad de dejar gobernar al l¨ªder del PSOE, Pedro S¨¢nchez, aunque finalmente se impuso la tesis mayoritaria de Pablo Iglesias, quien rechaza hacer concesiones a los socialistas y solo aceptar¨ªa un Ejecutivo de coalici¨®n. Esa discusi¨®n se dio en al menos dos ocasiones, seg¨²n aseguran fuentes de la ejecutiva. Ocurri¨® en la pasada legislatura, despu¨¦s de que el secretario general del PSOE alcanzara un acuerdo con Ciudadanos, y tras las elecciones del 26 de junio.
La discusi¨®n que se produjo en las reuniones del consejo ciudadano refleja las discrepancias entre el sector m¨¢s pr¨®ximo a Iglesias y los afines a ??igo Errej¨®n en una cuesti¨®n clave: la forma de relacionarse con el principal partido de la oposici¨®n para alcanzar un acuerdo. Nadie defendi¨® los planteamientos en p¨²blico. De hecho, todos negaron repetidamente que hubiera divisi¨®n al respecto.?
En el consejo ciudadano celebrado el pasado mes de abril, algunos cargos encuadrados en el llamado sector errejonista invitaron a una reflexi¨®n sobre una posible abstenci¨®n t¨¦cnica que hubiera permitido a S¨¢nchez gobernar con el apoyo de los 40 diputados con los que entonces contaba Ciudadanos. El n¨²mero dos, sin posicionarse claramente, s¨ª llam¨® a tener en cuenta las intervenciones de sus afines. En ese ¨®rgano de direcci¨®n se sientan varios dirigentes considerados pr¨®ximos al secretario pol¨ªtico como el portavoz de en la Comisi¨®n de Econom¨ªa, Alberto Montero, y la portavoz del Ayuntamiento de Madrid, Rita Maestre. Nadie plante¨® directamente la abstenci¨®n, aunque se pidi¨® una reflexi¨®n sobre la situaci¨®n pol¨ªtica. Las dudas expresadas en esa reuni¨®n y el debate que se gener¨® llevaron a Iglesias a convocar una consulta a las bases para legitimar su ¨²nica oferta al PSOE, esto es, reclamar una vicepresidencia, varios ministerios estrat¨¦gicos y un Gobierno compartido.
El 9 de julio, tras los comicios del 26-J, los ochenta miembros de la direcci¨®n de Podemos volvieron a citarse en el C¨ªrculo de Bellas Artes de Madrid. En esa ocasi¨®n, hubo quien defendi¨® la posibilidad de negociar con S¨¢nchez un acuerdo program¨¢tico sin entrar en el Ejecutivo, una hip¨®tesis que el equipo de Iglesias vio como un ¡°cheque en blanco¡± al PSOE, que solo tiene 85 diputados. Fue el propio secretario de Organizaci¨®n, Pablo Echenique, quien defendi¨® que un pacto exigir¨ªa entrar en el Gobierno. Lo hizo relatando su propia experiencia al poner como ejemplo los problemas que tiene en Arag¨®n por apoyar, tras las auton¨®micas de 2015, al socialista Javier Lamb¨¢n.
El entorno de Iglesias defiende una relaci¨®n de ¡°igual a igual¡± con los socialistas. ¡°Nuestros cinco millones de votos valen igual que el resto de votos de los ciudadanos espa?oles. Yo deseo y creo que es una buena noticia que vaya a intentar formar Gobierno¡±, mantuvo ayer el secretario general. Sus afines inciden, adem¨¢s, en que si bien Errej¨®n no se ha manifestado nunca con claridad en los ¨®rganos internos, s¨ª lo han hecho algunos cargos pr¨®ximos a ¨¦l. "Quer¨ªan dar un cheque en blanco a S¨¢nchez", se?alan en la direcci¨®n entre los pr¨®ximos a Iglesias.
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