Espa?a tendr¨¢ que renegociar con Trump la limpieza de Palomares
James Costos, el hombre de Obama en Espa?a, ha dejado la embajada este mi¨¦rcoles
Este mi¨¦rcoles, dos d¨ªas antes de que Trump entre en la Casa Blanca, James Costos, el hombre de Obama en Espa?a, que se convirti¨® en un s¨ªmbolo de los derechos de los gais, ha abandonado la embajada de EE UU en Madrid. Hasta que tome posesi¨®n su sustituto, lo que dif¨ªcilmente ocurrir¨¢ antes de dos o tres meses, la legaci¨®n estadounidense queda a cargo del encargado de negocios, Kris R. Urs. El nuevo embajador de Trump tendr¨¢ que renegociar la limpieza de Palomares con Espa?a.
Exdirectivo de la cadena de televisi¨®n HBO y donante dem¨®crata, Costos no ha querido ser ni un solo d¨ªa el embajador de Trump en Madrid. Ha dejado este mi¨¦rcoles la representaci¨®n de EE UU en Espa?a en manos de su n¨²mero dos, a la espera de que la nueva Administraci¨®n designe su sucesor, que probablemente tendr¨¢ un talante muy diferente y deber¨¢ someterse a un laborioso tr¨¢mite de ratificaci¨®n por el Senado antes de aterrizar en Madrid.
La primera tarea que encontrar¨¢ el nuevo embajador sobre la mesa ser¨¢ el acuerdo para la descontaminaci¨®n de Palomares que en octubre de 2015 suscribieron el entonces ministro espa?ol de Asuntos Exteriores, Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa-Margallo, y el secretario de Estado estadounidense, John Kerry. En virtud de dicho acuerdo Washington se comprometi¨® a llevarse, para almacenarlos en el desierto de Nevada, hasta 50.000 metros c¨²bicos de tierra contaminada con plutonio por la ca¨ªda de dos bombas nucleares en la pedan¨ªa almeriense el 17 de enero de 1966, hace ahora 51 a?os.
El problema es que este acuerdo, presentado con gran aparato medi¨¢tico, era solo una declaraci¨®n de intenciones que deb¨ªa plasmarse en un texto jur¨ªdicamente vinculante que especificara, entre otros extremos, qui¨¦n pagar¨ªa los 640 millones de euros en los que se estimaba el coste de la descontaminaci¨®n; 140 correspondientes al empaquetado y transporte de la tierra radiactiva y 500 al almacenaje.
Ambos Gobiernos se dieron de plazo hasta el 31 de diciembre pasado para sellar este acuerdo, pero el calendario pol¨ªtico de los dos pa¨ªses se ha cruzado en este calendario.
Durante el periodo de Gobierno en funciones en Espa?a, desde el 20 de diciembre de 2015 hasta el 4 de noviembre de 2016, se mantuvieron las reuniones t¨¦cnicas, seg¨²n fuentes de la embajada estadounidense en Madrid, pero se suspendieron las pol¨ªticas, por estimar que el Ejecutivo espa?ol no ten¨ªa capacidad para suscribir un acuerdo internacional de este tipo.
Solo cuatro d¨ªas despu¨¦s de la toma de posesi¨®n del nuevo Gobierno espa?ol se celebraban las elecciones estadounidenses en las que, contra todo pron¨®stico, Trump result¨® vencedor. Fuentes diplom¨¢ticas espa?olas aseguran que se sonde¨® a la Administraci¨®n Obama para intentar que el acuerdo se firmara antes del relevo en la Casa Blanca, pero la respuesta fue que no hab¨ªa tiempo para ello, dado que se trata de un tema delicado, con repercusiones econ¨®micas y sujeto a un complejo proceso de tramitaci¨®n interna, por lo que el asunto quedaba en manos de la nueva Administraci¨®n.
Moren¨¦s a Washington
El Gobierno espa?ol se confi¨® porque el acuerdo sobre Palomares hab¨ªa empezado a negociarse cuando Hillary Clinton era secretaria de Estado, por lo que, si esta ganaba, como todos esperaban, no deber¨ªa haber pegas. La victoria de Trump lo deja todo en el aire, ya que el acuerdo Margallo-Kerry es solo una declaraci¨®n pol¨ªtica que no vincula al nuevo Gobierno de EE UU.
La incorporaci¨®n a Madrid del futuro embajador estadounidense coincidir¨¢ probablemente con la del nuevo embajador espa?ol en Washington, el exministro de Defensa, Pedro Moren¨¦s, cuya petici¨®n de pl¨¢cet se ha retrasado hasta la toma de posesi¨®n de Trump.
La ventaja para Moren¨¦s es que Palomares no es el ¨²nico tema pendiente. Espa?a tiene sobre la mesa dos peticiones de la Administraci¨®n de Obama: el despliegue en Mor¨®n de una veintena de helic¨®pteros antidroga y el establecimiento en Barajas de una aduana adelantadapara los vuelos con destino a EE?UU.?
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