Madre con cuerpo y cerebro de abuela
La ley no pone l¨ªmites de edad a la fecundaci¨®n asistida pero se aconseja no pasar de 50 a?os
Los casos de Mauricia Ib¨¢?ez, que acaba de ser madre de gemelos con 64 a?os, y el de Lina ?lvarez, que lo fue en octubre con 62, rompen con lo habitual. Pero no son ni siquiera ilegales en Espa?a. ¡°En mi opini¨®n, no existen impedimentos jur¨ªdicos ni constitucionales para impedir el acceso de la mujer a t¨¦cnicas que le permitan ser madre a la edad que sea¡±, afirma Yolanda G¨®mez, catedr¨¢tica de Derecho Constitucional que fue miembro de la Comisi¨®n Nacional de Bio¨¦tica. Es verdad que, ¡°a partir de los 40 aumenta el riesgo, pero para eso est¨¢n los consentimientos informados¡±, apunta. ¡°No hay en el ordenamiento una prohibici¨®n y no debe haberla. Es una cuesti¨®n de libertad personal¡±, sostiene.
La Comisi¨®n Nacional de Reproducci¨®n Humana Asistida solo ha emitido al respecto una recomendaci¨®n: no emplear las t¨¦cnicas correspondientes en mayores de 50 a?os. En la sanidad p¨²blica ni siquiera llegan a ese l¨ªmite, y suelen dejarlo en los 40, indica Jos¨¦ Codesido, presidente de Anacer (Asociaci¨®n Nacional de Cl¨ªnicas de Reproducci¨®n). En las privadas, como las del grupo IVI, mantienen el tope en los 50. ¡°Pero lo hacemos porque hay razones m¨¦dicas¡±, dice el director m¨¦dico de estos centros, Antonio Requena.
¡°El ¨²tero es un ¨®rgano que con estr¨®genos y progesterona se embaraza con facilidad, pero a partir de los 45 aumentan mucho las patolog¨ªas asociadas (hipertensi¨®n, diabetes gestacional, partos prematuros)¡±, explica Requena. Por eso, aunque se emplean t¨¦cnicas de fecundaci¨®n hasta los 50, a partir de los 45 solo se implanta un embri¨®n. Porque en el caso de Ib¨¢?ez, con gemelos, el riesgo ha sido ¡ªpara ella y para los ni?os¡ª a¨²n mayor. ¡°De hecho, han sido beb¨¦s de bajo peso¡±, afirma el presidente de Anacer.
El m¨¦dico no quiere evaluar otros aspectos, como el psicol¨®gico. ¡°Trabajando donde trabajo, entiendo perfectamente el deseo de ser madre¡±. Pero apunta a que igual que para adoptar se exige un completo estudio de los candidatos, hay que tener cuidado con la fecundaci¨®n asistida.
?La psic¨®loga Mara Cuadrado, quien ha trabajado tanto en adopciones internacionales como en protecci¨®n de menores, cree que el caso de Ib¨¢?ez es especial. Por un lado, est¨¢n las cuestiones f¨ªsicas. ¡°En adopci¨®n internacional no se permite que el padre o la madre le saquen m¨¢s de 40 a?os al ni?o. Cuidar a un beb¨¦ es muy cansado y no se tiene el mismo cuerpo ni la misma paciencia¡±, afirma. ¡°Hay miles de fracasos cuando los adoptantes son mayores, sobre todo, cuando los ni?os llegan a la adolescencia, porque entonces ya los padres no est¨¢n como para soportarles¡±, dice.
Pero la catedr¨¢tica G¨®mez no coincide: ¡°Hay bastantes hombres que son padres a partir de los 60 y nadie se lo cuestiona¡±.
En este caso, adem¨¢s, la psic¨®loga considera clave el hecho de que a Ib¨¢?ez ya le hubieran retirado la custodia de una hija, la que tuvo en 2011. ¡°He estado en protecci¨®n de menores al menos 15 a?os y eso no se hace as¨ª como as¨ª. Para separar a un hijo de una madre hay que pasar un mont¨®n de filtros. Si se produce la retirada de la custodia, tiene que haber razones evident¨ªsimas¡±.
Con los pocos datos conocidos, Cuadrado no se atreve a opinar sobre el estado mental de la mujer, de la que se dijo que ten¨ªa un trastorno paranoide cuando perdi¨® a su primera hija. ¡°Con tratamiento se puede controlar¡±, afirma, aunque ¡°puede parecer una pataleta: como le han quitado a una hija, tiene otra¡±.
Codesido es m¨¢s duro. ¡°Deber¨ªa haber un control en los centros¡±, apunta, aunque tiene claro que la fecundaci¨®n se hizo en el extranjero. ¡°En Espa?a cualquier centro pod¨ªa haberlo realizado porque t¨¦cnicamente no aporta nada. Por desgracia, la mujer va retrasando su maternidad, pero se deben considerar otros aspectos que no sean solo la t¨¦cnica¡±, afirma ante lo que no duda en calificar como ¡°una triste noticia¡±.
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