El PP y Podemos se acusan mutuamente de ¡°amenazas¡± y ¡°matonismo¡±
La bronca entre los partidos obliga a interrumpir el debate del decreto de la estiba
Ana Pastor, la presidenta del Congreso, ha tenido que interrumpir la sesi¨®n de este jueves para llamar al orden a los diputados del PP y de Unidos Podemos. "Est¨¢n dando un ejemplo lamentable a los ciudadanos", ha dicho. La C¨¢mara Baja estaba en pleno debate sobre la convalidaci¨®n del decreto ley que pretende liberalizar el sector de la estiba.?Mientras los partidos defend¨ªan sus posiciones, el hemiciclo se ha llenado de gritos, abucheos, chillidos y protestas. Entonces, ha intervenido Miguel Barrachina, diputado del PP. "He recibido suficientes amenazas del sector como para que ahora los del brazalete vengan tambi¨¦n a amenazarme", ha dicho sobre el s¨ªmbolo con el que Unidos Podemos celebr¨® el d¨ªa de la mujer. Y ha estallado una bronca que ha enfrentado a gritos a representantes de los partidos de Mariano Rajoy y Pablo Iglesias.
"El se?or orador [en referencia Barrachina] ha referido a que mi grupo parlamentario estaba amenazando", ha descrito Irene Montero tras invocar el art¨ªculo 71 del reglamento ("ofensas") para intervenir. "Es radicalmente mentira", ha continuado la portavoz parlamentaria de Unidos Podemos. "Le pido que lo retire. El matonismo del grupo parlamentario popular tambi¨¦n merece una reflexi¨®n".
"Efectivamente, he dicho que Podemos amenaza", le ha contestado Barrachina. "Quienes amenazan a periodistas, a jueces y a polic¨ªas tambi¨¦n amenazan al Partido Popular".
Y han estallado de nuevo las protestas y los comentarios que han acompa?ado desde primera hora de la ma?ana al debate sobre el decreto que trae el Gobierno a la C¨¢mara para adaptar el mercado de la estiba a la legislaci¨®n europea.
"Mentiroso". "Eso lo dicen los tuyos". "No es as¨ª". M¨¢s de una decena de estibadores ha seguido desde la tribuna de invitados la intervenci¨®n de ??igo de la Serna. El ministro de Fomento ha defendido la convalidaci¨®n del decreto ley que pretende liberalizar su sector de trabajo mientras los profesionales de los puertos espa?oles han comentado en voz baja su argumentaci¨®n a favor de la medida. Ellos lo llaman "el decreto de la palmada".
"Es una palmada en la cara de los estibadores", ha dicho desde la tribuna F¨¦lix Alonso Cantorn¨¦, diputado de Unidos Podemos, que ha cerrado su intervenci¨®n enarbolando una camiseta en apoyo a los trabajadores junto a su compa?ero Sergio Pascual ("Estibadores de Avil¨¦s. Lucha. Uni¨®n. Fuerza").
Ha habido pu?os en alto. Antebrazos que dejaban ver coloridos tatuajes. Manos que se han chocado contra el pecho, pu?o contra coraz¨®n, mientras los estibadores respond¨ªan al gesto desde la grada de invitados. Ha habido, tambi¨¦n, aplausos desde la bancada de Unidos Podemos. Silencio en el resto del Hemiciclo. Y una intervenci¨®n de Pastor: "Ruego a las personas que ocupan las tribunas que no pueden hacer ninguna manifestaci¨®n".
Los estibadores, que no han dado ni una voz, han dejado de hacer gestos. Rodeados de ujieres del Congreso, han seguido el debate en silencio. Los abucheos son de los diputados del PP, que han protestado as¨ª contra la abstenci¨®n de Ciudadanos. Y las cr¨ªticas, de los representantes de la oposici¨®n, que han desgranado su argumentaci¨®n sin casi p¨²blico. La plana mayor del Ejecutivo se ha ausentado del debate, con la excepci¨®n de De la Serna y de F¨¢tima B¨¢?ez, la ministra de Empleo, refugiada en una de las ¨²ltimas filas del hemiciclo junto a Te¨®fila Mart¨ªnez, lejos de la bancada azul.
"Se?or Mariano Rajoy, est¨¦ donde est¨¦, el inter¨¦s por ser capataces de la oligarqu¨ªa est¨¢ poniendo en juego la econom¨ªa de este pa¨ªs", ha lamentado Alonso Cantorn¨¦. Y ha a?adido: "Despu¨¦s de pasar a la historia parlamentaria de este pa¨ªs al no lograr aprobar el decreto, desact¨ªvelo".
"Ganan las grandes compa?¨ªas multinacionales. Pierden los trabajadores, los asalariados, todos", dice Jordi Salvador i Duch, de ERC. La camiseta amarilla fosforito con la que el diputado ha subido a la tribuna ha sido todo un mensaje a los estibadores: "Ni un paso atr¨¢s".
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