La econom¨ªa al rescate de la pol¨ªtica
"El Brasil de 2017 se parece a la Espa?a de 1982¡±
La crisis econ¨®mica de Brasil y el terremoto de la corrupci¨®n que sufre parecen disuasorios para invertir. Los asistentes al primer Foro Espa?a-Brasil, celebrado este lunes en S?o Paulo, lo entienden al rev¨¦s: las empresas deben marcar el camino a la pol¨ªtica y volver a creer en esta potencia mundial, como ocurri¨® hace 30 a?os, cuando era todav¨ªa un pa¨ªs emergente. ¡°Es un lugar de aut¨¦nticas oportunidades en el sector privado. Es el pa¨ªs en el que hay que estar, aqu¨ª y ahora. El Brasil de 2017 se parece a la Espa?a de 1982¡±. Lo asegura Santiago Fern¨¢ndez Valbuena, que lo conoce bien de su etapa en Telef¨®nica y que ahora es vicepresidente de EBN Banco. Para el presidente de Mapfre, Antonio Huertas, otro firme defensor de que este es el momento de fortalecer relaciones, las empresas tienen, adem¨¢s de la creaci¨®n de empleo, este papel: ¡°Ser paladines de la decencia, de la honestidad¡±. No es poco reto en Espa?a y en Brasil, tal y como est¨¢n las cosas.
Por lo dem¨¢s, es obvio que la parte pol¨ªtica de este encuentro tiene algo de ¡°toma l¨¢, d¨¢ c¨¢¡±, de ¡°te doy para que me des¡±. La vieja alocuci¨®n latina ¡ªdo ut des¡ª viene bien para hablar de la cita entre Mariano Rajoy y el presidente brasile?o, Michel Temer. Salvando las distancias, oce¨¢nicas en m¨¢s de un sentido, las necesidades econ¨®micas de los dos pa¨ªses y los problemas pol¨ªticos que cercan a ambos l¨ªderes tienen espacios comunes. Para la recuperaci¨®n de la econom¨ªa espa?ola y las oportunidades de cientos de empresas, Brasil ¡ªa pesar de la crisis¡ª es importante. Y para animar el escu¨¢lido crecimiento brasile?o y finalizar el acuerdo ente la UE y Mercosur en Bruselas, el papel de Espa?a es notable. Tanto para Rajoy como para Temer, estos ¨¢mbitos de conversaci¨®n no pueden ser m¨¢s oportunos.
¡°El presidente Rajoy va a encontrar un pa¨ªs en transformaci¨®n¡±, escrib¨ªa en EL PA?S el presidente Temer la semana pasada. Cierto, aunque en muchos sentidos, y no todos positivos. El tsunami de corrupci¨®n del caso Lava Jato complica todo: la clase pol¨ªtica, empatada con Temer en impopularidad, es reacia a facilitar las reformas que, en su faceta de concesiones y privatizaciones, exhibe Temer ante Espa?a: ¡°Hay un amplio espacio para m¨¢s inversiones (...) las oportunidades se multiplican¡±. Temer necesita mejoras econ¨®micas, romper su aislamiento diplom¨¢tico y tener un embajador potente en Bruselas. Rajoy le da juego en todos esos campos. Y el presidente del Gobierno respira durante unas horas, lejos de la asfixia informativa de la corrupci¨®n, y puede hablar de empleo, recuperaci¨®n, exportaciones e inversiones. Do ut des.
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