¡°Este premio es para los periodistas sin gloria que no reciben palmaditas¡±

Mientras le daba vueltas a las razones por las que los periodistas gallegos le han otorgado el XIII Premio Jos¨¦ Couso a la Libertad de Expresi¨®n, un galard¨®n que ha reca¨ªdo en anteriores ediciones en reporteros que han padecido la c¨¢rcel o protagonizado ¡°audacias en guerras lejanas¡±, Xos¨¦ Hermida (Boiro, 1963) obtuvo la respuesta de su t¨ªa Primitiva. ¡°Entonces, el premio te lo han dado por trabajar, ?no?¡±, le desvel¨® estos d¨ªas ella al periodista de EL PA?S, que este jueves ha recogido la distinci¨®n del Colexio Oficial de Xornalistas de Galicia en el teatro Jofre de Ferrol. ¡°Este es un premio a los periodistas ordinarios, que no tienen fama, que no salen en las tertulias, que no conocen la gloria y que no reciben palmaditas de personas importantes¡±, ha resumido Hermida en su discurso.

Rodeado de familiares, amigos y compa?eros de profesi¨®n, el delegado de EL PA?S en Brasil y exdelegado del diario en Galicia ha celebrado que el segundo galard¨®n que recibe en sus 30 a?os de carrera sea el ¡°m¨¢s antiinstitucional del mundo¡±, dedicado al c¨¢mara de televisi¨®n que falleci¨® en 2003 en Irak por el ataque del ej¨¦rcito estadounidense al hotel donde se alojaba. ¡°Couso solo pretend¨ªa informar de lo que ocurr¨ªa en aquella guerra que fue una vergonzosa mentira, enfrent¨¢ndose a aquellos que no quer¨ªan testigos inc¨®modos de sus desmanes¡±.

M¨¢s informaci¨®n

Xos¨¦ Hermida, periodista de El PA?S, Premio Jos¨¦ Couso a la Libertad de Prensa

Entrevista con Xos¨¦ Hermida

Hermida ha admitido la ¡°mala fama¡± que la profesi¨®n se ha ganado entre los ciudadanos por culpa de las ¡°plantas trepadoras que se valen del periodismo para hacer carrera social¡±. Pero ha reivindicado el trabajo ¡°duro¡± de ¡°cientos y cientos de periodistas¡± que, mal pagados y con pocos medios, siguen ¡°jug¨¢ndose el cuello por publicar una informaci¨®n a pesar de que recibir¨¢n una llamada de sus jefes¡±. De aquellos, ha incidido, que contin¨²an ¡°haciendo preguntas inc¨®modas¡± a sabiendas de que entrar¨¢n de lleno en la ¡°lista negra¡± de alg¨²n poderoso.

En presencia del conselleiro de Pol¨ªtica Social, Jos¨¦ Manuel Rey Varela, y de la secretaria general de Medios de la Xunta, Mar S¨¢nchez, el periodista Nicol¨¢s Vidal ha le¨ªdo un manifiesto del Club de Prensa de Ferrol en el que ha destacado la figura de Hermida como un ¡°periodista que prestigia la profesi¨®n y del que los que lo conocen solo saben hablar bien, como profesional y como jefe¡±. ¡°Humilde en la excelencia¡±, ha destacado la periodista Lorena Bustabad, presentadora del acto y extrabajadora de la delegaci¨®n de EL PA?S en Galicia, desaparecida en 2015.

La dif¨ªcil situaci¨®n que atraviesan los medios de comunicaci¨®n tambi¨¦n se ha colado en el teatro Jofre. Vidal ha criticado ¡°el papel lamentable de las empresas period¨ªsticas en la gesti¨®n de esta crisis¡±, ¡°m¨¢s pendientes de captar la subvenci¨®n de turno que de contar lo que interesa a la gente¡±, y ha recordado a los 8.000 periodistas en paro que hay en Espa?a, 400 de ellos en Galicia.

El galardonado con el Premio Couso no cree que en estos tiempos de redes sociales y despidos masivos de periodistas est¨¦ en peligro la libertad de expresi¨®n. Lo que est¨¢ realmente amenazado, esgrime, es el derecho de los ciudadanos a estar bien informados, por la debilidad econ¨®mica de los medios y su susceptibilidad ante las presiones de los gobernantes y porque se cae en el error de ¡°dar el mismo valor al rumor de un tuitero que a una informaci¨®n contrastada¡±. Evitar este grave ¡°perjuicio a la sociedad y a la democracia¡± depende, sostiene Hermida, de ciudadanos y periodistas. De que los primeros ¡°distingan la informaci¨®n y la intoxicaci¨®n¡± y de que los segundos ¡°no olviden que el ¨²nico compromiso es con el p¨²blico¡±. La menci¨®n m¨¢s sentida y especial de la noche se la ha dedicado Hermida a la periodista Ana Viqueira, recientemente fallecida: ¡°Ella fue mi compa?era durante 30 a?os y mi maestra. La mejor reportera de la tierra entera¡±.