¡°Erradicar la corrupci¨®n, como los asesinatos, es imposible. Buscamos normas que la dificulten¡±

Manuel Cobo, Andr¨¦s Ayala y Beatriz Rodr¨ªguez Salmones tienen desde el lunes una misi¨®n clave en el PP: prevenir la aparici¨®n de nuevos casos de corrupci¨®n en una formaci¨®n azotada por las Operaciones P¨²nica, G¨¹rtel, Lezo o Taula. Los tres han cumplido los 60 a?os. Ya no son cargos p¨²blicos ni org¨¢nicos. Y conocen a la perfecci¨®n la personalidad pol¨ªtica de Mariano Rajoy. Esas tres caracter¨ªsticas han hecho que el l¨ªder del partido les elija para la oficina del cargo popular, un organismo de nueva creaci¨®n que auditar¨¢ la informaci¨®n fiscal, financiera y laboral de los representantes populares. Huyen de la etiqueta, pero ser¨¢n al PP lo que el departamento de asuntos internos a la polic¨ªa.

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¡°Hay muchas formas de luchar contra la corrupci¨®n. Decir que la erradicas¡­ me parece que es imposible¡±, resume Cobo, presidente del nuevo organismo y durante d¨¦cadas mano derecha de Alberto Ruiz-Gallard¨®n en Madrid. ¡°Es como si dices que no va a haber m¨¢s asesinatos. Ojal¨¢, pero la naturaleza humana, las ambiciones, las locuras, hacen que no los puedas quitar¡±, a?ade el exvicealcalde de Madrid, que subraya la necesidad de combinar los controles internos del partido con los de los interventores de los organismos p¨²blicos y la acci¨®n de la justicia. ¡°Este es un instrumento m¨¢s para prevenir¡±. Y remata: ¡°Se intenta tener un mayor conocimiento de los cargos p¨²blicos, sus actividades, bienes e incompatibilidades. Se intenta que haya normas que dificulten, eviten, obstruyan o prevengan la posibilidad de corromperse¡±.

As¨ª, el nuevo organismo busca prevenir la aparici¨®n de nuevos casos. El equipo de Fernando Mart¨ªnez-Maillo, coordinador del PP, tiene a¨²n que presentar una propuesta de reglamento para la oficina. Esta pedir¨¢ datos del IRPF, los bienes y las incompatibilidades laborales de las personas que opten a cargos p¨²blicos u org¨¢nicos del PP. Fuentes del partido argumentan que cotejar esa informaci¨®n podr¨ªa evitar que se repitan casos como los del exdiputado Pedro G¨®mez De la Serna o el exembajador Gustavo Aristegui, investigados por presuntamente usar su cargo para impulsar negocios privados en el extranjero a cambio de comisiones. Las sanciones y denuncias depender¨¢n del comit¨¦ de derechos y garant¨ªas.

¡°Deben establecerse controles con una secuencia determinada y otros aleatorios, para actualizar datos, comprobar comportamientos y que la oficina ofrezca la garant¨ªa de que nadie est¨¢ actuando por fuera de las normas¡±, dice Ayala. Las comprobaciones deben ser ¡°permanentes¡±, a?ade el exdiputado, que apuesta por implantar en el PP los sistemas de compromiso con las reglas (compliance) de las empresas privadas.

¡°Este es un ¨®rgano necesario, que nos da confianza a todos¡±, opina Rodr¨ªguez Salmones. ¡°Ya hemos pasado los momentos m¨¢s dif¨ªciles¡±, sigue, en referencia a que el PP considera que los casos que le golpean son ¡°del pasado¡±. Frente a la citaci¨®n de este partido como part¨ªcipe a t¨ªtulo lucrativo en el caso G¨¹rtel, o la del propio Rajoy para declarar como testigo en esa causa, la direcci¨®n nacional recuerda la obra legislativa del gobierno popular, que ha aprobado "decenas de medidas" para luchar contra la corrupci¨®n. Ese esfuerzo, a?aden, no cesa. Y el ejemplo, dicen, es la oficina del cargo popular.

Ninguno de los integrantes del nuevo organismo ha pasado el examen que pasar¨¢n los futuros cargos, precisamente porque no tienen ninguna otra responsabilidad. A¨²n se podr¨ªa nombrar a dos miembros m¨¢s de la oficina. ?Qu¨¦ ocurrir¨ªa si alguno tuviera un problema con la justicia? ?Qui¨¦n vigila al vigilante?

¡°Si ma?ana, por el motivo que fuera, alguien dijera que no debo seguir aqu¨ª, encantado de la vida¡±, contesta Cobo. ¡°El mundo de la inventiva es infinito, pero estoy absolutamente tranquilo¡±.