¡°?Unidad! ?Unidad!¡±
El PSOE intenta cerrar las heridas de las primarias y recuerda a Pedro Zerolo y Carme Chac¨®n
La llamada a la unidad del PSOE comienza con un sentido homenaje a Pedro Zerolo y acaba con los gritos de Gianni Pittella. Los socialistas llegan a su 39? Congreso tras dirimir unas primarias que terminan con Pedro S¨¢nchez como secretario general y con cientos de heridas abiertas. En el arranque de la cita, Luis Tudanca, presidente del c¨®nclave, intenta conjurar los fantasmas de la divisi¨®n invocando a los compa?eros que se fueron. ¡°Pedro Zerolo, Jos¨¦ Antonio Alonso, Carme Chac¨®n¡¡±, recita. Los 941 delegados se unen en un aplauso. Es la introducci¨®n perfecta para que Pittella, l¨ªder de los socialistas europeos, suba al escenario, mencione a Susana D¨ªaz y a Patxi L¨®pez, los derrotados en las primarias, y ponga en pie a los asistentes. ¡°?Unidad! ?Unidad¡±, gritan todos.
¡°Quiero saludar a Susana D¨ªaz y a Patxi L¨®pez, el reflejo de un partido plural¡±, atruena el pol¨ªtico italiano mientras levanta un brazo y se le agita el fular con el que protege su garganta del aire acondicionado. ¡°Pero el pluralismo debe conjugarse con la unidad¡±, a?ade, provocando un terremoto que sacude todo el anfiteatro cuando menciona "la bella batalla" de las primarias. Como un resorte, los delegados se unen en un coro. ¡°?Unidad! ?Unidad!¡±, gritan.
D¨ªaz lo observa todo desde un extremo de la fila doce y apenas reacciona cuando Pittella la menciona. Sin embargo, la presidenta de Andaluc¨ªa acaba sec¨¢ndose las l¨¢grimas que acompa?an a la risa que le provoca la intervenci¨®n en italiano, una mezcla de pasi¨®n e iron¨ªa para atacar a Emmanuel Macron y a los partidos conservadores. En primera fila, Javier Fern¨¢ndez y el resto de integrantes de la gestora siguen atentos su discurso. Javier Lamb¨¢n, el presidente de Arag¨®n, escucha hier¨¢tico ¡ª¡°Soy un delegado mudo¡±, dice¡ª. Agrupados con sus delegaciones, ning¨²n dirigente territorial ocupa un lugar de honor. No se ve a Antonio Hernando, exportavoz socialista en el Congreso, ni al diputado Eduardo Madina, que renunci¨® a coordinar la ponencia pol¨ªtica del congreso tras la vitoria de S¨¢nchez en las primarias.
¡°Pedro, dicen que el socialismo ha muerto, pero yo, desde lo m¨¢s profundo de mi coraz¨®n, digo que mientras haya injusticias, mientras haya refugiados y emigrantes, mientras haya personajes como Trump y como Putin, habr¨¢ necesidad de socialismo¡±, se despide Pittella.
S¨¢nchez, que se sienta junto a Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero y cerca Alfredo P¨¦rez-Rubalcaba, ambos circunspectos, aplaude con fervor su intervenci¨®n. Nada es casual. Todo responde a un plan. La iluminaci¨®n, el sonido y las intervenciones se unen para reforzar el mensaje que encierra el lema del congreso: Somos la izquierda.
Alrededor del auditorio cuelgan los carteles del fundador del partido, Pablo Iglesias; se venden rosas y se exponen camisetas serigrafiadas con los s¨ªmbolos del PSOE. Se recuerda la figura de Antonio, un afiliado ¡°fallecido con 100 a?os de edad y casi tantos de socialismo en las venas¡±. Ignacio Fern¨¢ndez Toxo (CC OO) y Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez (UGT) intervienen para reclamar unidad a la izquierda. Hasta las luces que les iluminan en el escenario son rojas. Queda claro que el PSOE emplea la jornada para transmitir lo que quiere ser.
El auditorio se llena de luces rojas. La iluminaci¨®n, el sonido y las intervenciones se unen para reforzar el mensaje que encierra el lema del Congreso: Somos izquierda.
La tortura de las primarias
Ese es el lema que asumen en p¨²blico los perdedores de las primarias. "Me va a parecer bien el equipo que elija porque se querr¨¢ rodear de los mejores para que el PSOE vuelva a ser la alternativa de gobierno en Espa?a", dice D¨ªaz. "Queremos demostrar que hay una alternativa y un proyecto de izquierdas capaz de conectar con la mayor¨ªa progresista que espera ah¨ª fuera", manifiesta Patxi L¨®pez, que ser¨¢ presidente del Consejo de Pol¨ªtica Federal aceptando la oferta de integraci¨®n de S¨¢nchez. "Toca un esfuerzo por parte de todos para salir de aqu¨ª poniendo rumbo a La Moncloa", remata Emiliano Garc¨ªa-Page, presidente de Castilla-La Mancha. "Llevamos muchos meses de tortura interna, que todos seguramente hemos vivido con mucho dolor. A mi, que apoyaba a otra candidata [en referencia a D¨ªaz], solo me queda apoyar lo que ha votado la militancia".
Para olvidar esa tortura, los organizadores intentan provocar el ambiente de un concierto de rock. En el principio de todo, S¨¢nchez irrumpe en el auditorio acompa?ado por los aplausos y los gritos de ¡°?presidente!¡±. Pronto truenan los acordes de unas guitarras el¨¦ctricas, que sirven de pre¨¢mbulo a un v¨ªdeo por el que desfilan Mariano Rajoy, Rodrigo Rato o Francisco Camps, se?alados como culpables de la crisis, de la desigualdad y de la corrupci¨®n. En la pantalla aparecen fugazmente protestas y manifestaciones. ¡°Somos la izquierda¡±, se lee de nuevo el lema del congreso.
Los murmullos de los delegados acompa?an a las intervenciones, especialmente cuando se emite un v¨ªdeo del expresidente Felipe Gonz¨¢lez deseando ¡°la mayor capacidad de acierto¡± al nuevo secretario general, sin mencionar su nombre.
¡°Lo que nos ha costado verle ah¨ª arriba, casi una enfermedad¡±, dice una delegada cuando S¨¢nchez sube a saludar desde el escenario acompa?ado por Jos¨¦ Luis ?balos, Cristina Narbona y Adriana Lastra. ¡°Por lo menos hay paz¡±, dice luego, desencantado, un colaborador de uno de los derrotados en las primarias. Todos hablan de unidad, pero las heridas siguen abiertas.
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