Eurodiputados del PSOE se sienten ninguneados por el giro sobre el CETA
Varios parlamentarios han recibido por escrito la instrucci¨®n de no hablar en p¨²blico sobre este tratado
La decisi¨®n del nuevo PSOE de Pedro S¨¢nchez de no apoyar el tratado comercial de la Uni¨®n Europea con Canada (CETA, por sus siglas en ingl¨¦s) ha sacudido al ya de por s¨ª convulso partido socialista espa?ol. Los europarlamentarios socialistas han recibido por escrito la instrucci¨®n de no hablar en p¨²blico sobre este tratado hasta que la ejecutiva federal tome este lunes una decisi¨®n formal. Una decisi¨®n que, casi con toda probabilidad, ser¨¢ la de abstenerse el pr¨®ximo jueves en la votaci¨®n definitiva en el Congreso. Algunos de esos eurodiputados se sienten indignados y ninguneados por la direcci¨®n.
Los diputados que durante a?os han negociado en Bruselas en nombre de los socialistas espa?oles y que dieron finalmente su respaldo al tratado en la votaci¨®n del pasado febrero se han enterado por un tuit de la presidenta del PSOE, Cristina Narbona, y un breve comunicado resumen de la reuni¨®n de S¨¢nchez con el comisario europeo Pierre Moscovici esta semana, de que todo su trabajo no hab¨ªa servido para nada.
La nueva direcci¨®n del PSOE repite como un mantra que representa una "izquierda de Gobierno", present¨¢ndolos como dos t¨¦rminos contradictorios, y plantea que esa contradicci¨®n solo puede salvarse en este caso con una f¨®rmula: la abstenci¨®n ante el CETA. Abstenci¨®n que, seg¨²n los cr¨ªticos de este partido, es pura t¨¢ctica pol¨ªtica y sirve s¨®lo para ganar tiempo, para colocarse al lado de Podemos sin mezclarse con ellos. En una palabra: para romper con el pasado reciente del PSOE sin comprometer demasiado el futuro inmediato.
El cambio radical y repentino que ha dado esta semana la direcci¨®n en su posici¨®n respecto al CETA ¡ªun acuerdo de 1.598 p¨¢ginas negociado a varias bandas¡ª re¨²ne todos los elementos para entender esta nueva estrategia, seg¨²n estos socialistas cr¨ªticos.
"Este giro tan dr¨¢stico no tiene nada que ver con el acuerdo comercial con Canad¨¢", dicen varias de esas fuentes, cargos del partido a los que la direcci¨®n ha conminado a permanecer en silencio estos d¨ªas sobre el CETA."Es una prueba para llevar bajo el brazo en la primera reuni¨®n que S¨¢nchez tenga con Pablo Iglesias, para ir abriendo camino a la construcci¨®n de esa mayor¨ªa alternativa de izquierdas que, como ya han anunciado, se pretende".
"No tenemos ning¨²n problema con Pablo Iglesias, ni ninguna necesidad de demostrarle nada", se revuelve Jos¨¦ F¨¦lix Tezanos al o¨ªr el argumento de que el PSOE se est¨¢ "podemizando". Este soci¨®logo, hist¨®rico guerrista que se alej¨® en los ¨²ltimos a?os del partido, parece haber recobrado el entusiasmo pol¨ªtico al lado de S¨¢nchez. Se ha convertido en uno de sus ide¨®logos de cabecera y ha asumido un puesto clave en la nueva ejecutiva federal: la secretar¨ªa de Estudios y Programas. Tezanos defiende que "la globalizaci¨®n es un fracaso que ha generado desigualdades y ha concentrado la riqueza en apenas ocho manos". Y sentencia: "Las cosas se han hecho mal. Debemos se?alar la diferencia de este nuevo PSOE respecto al anterior. Es un signo de coherencia. Estamos volviendo a los principios de la socialdemocracia".
El problema de ese discurso, muy parecido al de sindicatos, movimientos ecologistas y antiglobalizaci¨®n, y sobre todo calcado al de Podemos, es que resulta dif¨ªcil rematar principios tan rotundos con una respuesta tan ambigua como la abstenci¨®n, y eso es lo que pretende hacer el PSOE este pr¨®ximo jueves cuando el Parlamento espa?ol vote la ratificaci¨®n del acuerdo. "Ya sabemos que no se va a frenar nada, se trata de algo testimonial, a la espera de la evoluci¨®n del resto de partidos socialdem¨®cratas tras el verano. Las cosas est¨¢n cambiando, hay que tener paciencia", dice Tezanos, que sugiere as¨ª que que los cambios electorales en otros pa¨ªses podr¨ªan obstaculizar el proceso de ratificaci¨®n del tratado de los distintos Parlamentos nacionales.
A?os negociando
"Si est¨¢s en contra del tratado, votas en su contra; pero no inicias un recorrido continuo hacia la abstenci¨®n al que te van a llevar una y otra vez las distintas propuestas de Podemos", responde una de las voces an¨®nimas en este debate, que augura trampas continuas procedentes de la formaci¨®n de Iglesias. "Son muchas las razones para defender nuestra postura a favor. Llevamos a?os negociando en Bruselas, y las mismas l¨ªneas rojas que pusimos al acuerdo comercial con EE UU las hemos puesto con Canad¨¢. Todas se han aceptado", prosigue este eurodiputado. "Se ha aceptado un Tribunal P¨²blico de Inversiones que supere el arbitraje privado; se ha obligado a Canad¨¢ a ratificar convenios de la Organizaci¨®n Internacional del Trabajo; se ha reforzado la competencia exclusiva de los Estados de regular en exclusiva sus servicios p¨²blicos. Por eso decidimos finalmente dar el s¨ª al CETA".
"Pero sobre todo", a?ade otra fuente que ha conocido de primera mano el proceso negociador, "se trata de Canad¨¢, que nos da mil vueltas en materia laboral o medioambiental". Y a?ade: "Es una decisi¨®n geopol¨ªtica. Europa y Canad¨¢ de la mano para hacer frente a los avances populistas hacia la desregulaci¨®n que encabeza un personaje como el presidente de EE UU, Donald Trump. Nadie puede parar la globalizaci¨®n, pero s¨ª regularla. Y es bueno que Europa lo haga con una sola voz. ?O acaso no es mejor eso que acuerdos bilaterales de Canad¨¢ con cada pa¨ªs europeo para que luego se hagan entre ellos dumping social?".
La direcci¨®n de Pedro S¨¢nchez admite que "Canad¨¢ es un socio estrat¨¦gico", defiende a ultranza el proyecto europeo y se declara defensora del comercio internacional "regulado", pero al mismo tiempo ha cambiado de un plumazo la posici¨®n del partido respecto al CETA. Tambi¨¦n hay contradicciones estrat¨¦gicas. Reci¨¦n elegida la nueva direcci¨®n del PSOE en el 39? congreso celebrado hace una semana, reci¨¦n aprobado su proyecto pol¨ªtico en el que ¡ªseg¨²n subrayan ahora¡ª ya quedaba claro su nuevo giro, se dio instrucci¨®n a sus diputados en la comisi¨®n de Exteriores del Congreso para que votaran el pasado martes a favor de la ratificaci¨®n del CETA.
"Por coherencia, mientras nos tomamos un tiempo para reflexionar", dicen fuentes conocedoras de esa decisi¨®n.
La posici¨®n hasta entonces de los socialistas hab¨ªa sido claramente a favor del acuerdo. La ejecutiva federal de la anterior etapa de S¨¢nchez como secretario general (entre julio de 2014 y octubre de 2016) aprob¨® las l¨ªneas rojas de la negociaci¨®n del TTIP (el acuerdo comercial con EE UU) y del CETA, y a partir de ah¨ª defendi¨® su aprobaci¨®n frente a la radical oposici¨®n que mostraba Podemos. El propio S¨¢nchez ten¨ªa publicado un libro acad¨¦mico sobre diplomacia econ¨®mica donde defend¨ªa las virtudes de una Uni¨®n Europea negociando con una sola voz acuerdos comerciales.
P¨¦rdida de empleos
Un solo tuit ha dado al traste con un trabajo de a?os. "No lo vamos a apoyar", escribi¨® la presidenta del PSOE, Cristina Narbona, en Twitter el pasado martes como respuesta a las cr¨ªticas de otros usuarios que le reprochaban que apoyar el CETA no era de izquierdas. A partir de ah¨ª, la propia Narbona, la portavoz en el Congreso, Margarita Robles, o el portavoz de la ejecutiva federal, ?scar Puente, se esforzaron por hilvanar argumentos en defensa de un giro brusco e inesperado. Hablaron de la posible p¨¦rdida de 200.000 puestos de trabajo por culpa del tratado, del escaso peso que le dedica a las cuestiones medioambientales o de las dudas jur¨ªdicas que algunos expertos siguen viendo en su redactado.
Para otros socialistas, sin embargo, la sensaci¨®n ha sido la de que el nuevo PSOE constru¨ªa sobre la marcha un discurso que les permitiera justificar que el pr¨®ximo jueves vayan a borrar, con una abstenci¨®n, el trabajo y los debates dedicados a la pol¨ªtica comercial europea.
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