¡°Quien se ahoga no puede gritar¡±

Fueron dos minutos en los que Sebasti¨¢n Quintana pas¨® del terror a la cama. Ten¨ªa ocho a?os y como cada d¨ªa de verano baj¨® con sus hermanos a playa de Ba?aderos, al norte de la isla de Gran Canaria. Su madre sol¨ªa dejarles al cargo de otros chicos mayores que les supervisaban cuando se ba?aban, pero ese d¨ªa algo sali¨® mal. La marea estaba alta y acab¨® en una zona profunda de una de las piscinas naturales que hay en la zona, de donde fue incapaz de salir nadando. Pudo ver con impotencia c¨®mo una mujer que jugaba con su beb¨¦ le miraba, pero no se daba cuenta de que no pod¨ªa salir del agua. "El gran problema de la persona que se ahoga es que no puede gritar, es una muerte silenciada. Un ahogado no genera un escenario con humo, tr¨¢fico o sirenas", cuenta. Entre el sufrimiento y un dolor que nunca hab¨ªa experimentado, las fuerzas le vencieron y entonces se abandon¨®: "Tuve la clara convicci¨®n de lo que era la muerte, sent¨ª como si estuviera en la nada".

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El n¨²mero de ahogados es ya la mitad que el de los fallecidos en carretera

Lo siguiente que recuerda Quintana es a un joven que le hac¨ªa el boca a boca. Vomit¨® el agua que hab¨ªa ingerido y respir¨® profundamente. Hab¨ªa sobrevivido a un semiahogamiento. "Ten¨ªas el coraz¨®n parado, Chano", le espet¨® quien le reanimaba. Lo primero que hicieron sus padres cuando se enteraron fue apuntarle a ¨¦l y a sus hermanos a clase de nataci¨®n. Ahora tiene 57 a?os, pero lo recuerda como si fuera ayer. Es la tercera vez que vuelve al lugar del incidente y la "emoci¨®n" le invade por dentro. "Aqu¨ª volv¨ª a nacer", manifiesta tras un suspiro.

Desde entonces, ha hecho de la lucha contra los ahogamientos su propia cruzada. "Pese a todo el tiempo que ha pasado las cosas siguen igual", se queja. Lamenta que no haya iniciativas de prevenci¨®n ni estudios exhaustivos como s¨ª ocurre contra los accidentes de tr¨¢fico o los incendios. La comunidad aut¨®noma de Canarias registr¨® el mayor n¨²mero de ahogamientos que se contabilizaron en 2016, seg¨²n los datos de la Real Federaci¨®n Espa?ola de Salvamento y Socorrismo (RFESS), un 16,2% del total, 71 de los 416 fallecidos. Ante la "pasividad" de las administraciones en la lucha contra los ahogamientos y condicionado por una experiencia que "le cambi¨® la vida", comenz¨® a estudiar estos accidentes y a lanzar campa?as de concienciaci¨®n.

Con la iniciativa sin ¨¢nimo de lucro Canarias, 1.500 kil¨®metros de costa, que por tercer a?o consecutivo se difunde a trav¨¦s de los medios de comunicaci¨®n, las redes sociales y mediante charlas, pretende concienciar a la ciudadan¨ªa de la importancia de perseguir estos accidentes e investigar sus causas. "Estuve en una clase con peque?os y el 80% de ellos dijeron que hab¨ªan tenido alg¨²n incidente en el agua", cuenta. Para ejemplificar los continuos casos que se producen en su comunidad, recuerda que, durante una de las grabaciones de su campa?a, se toparon con un equipo de rescate que intentaba salvar a un chico del mar. Quintana ha estado recientemente en el Parlamento Canario para instar a los diputados a elaborar una normativa que ataje de lleno estos incidentes.

M¨¢s all¨¢ de las v¨ªctimas mortales

La Asociaci¨®n Espa?ola de T¨¦cnicos de Salvamento y Socorrismo (AETSAS) lleva desde el a?o 2000 investigando las causas de los ahogamientos, pero ponen el acento no solo en las v¨ªctimas mortales, sino tambi¨¦n en todos aquellos incidentes que se produzcan en los medios acu¨¢ticos y requieran de asistencia de socorristas, como el caso de Quintana. Seg¨²n sus estudios, en 2016 se produjeron 6.000 rescates en playas vigiladas en verano. Su director de investigaciones, Luis Miguel Pascual, demanda a las administraciones p¨²blicas datos cualitativos y no tanto cuantitativos para atajar la ra¨ªz de estos accidentes. Ellos proponen algunas medidas tales como entrevistar a familiares de v¨ªctimas de ahogamientos o a quienes sobreviven, no desde una perspectiva policial, sino mediante especialistas en salvamento o sanitarios que entiendan realmente qu¨¦ ha ocurrido. "Decir solamente que hay m¨¢s de 300 muertos no nos deja ver la dimensi¨®n real del problema", explica.

Los estudios de la AETSAS muestran que los ahogamientos son una cuesti¨®n multifactorial y diferencia las causas de los mismos seg¨²n distintos par¨¢metros, como la edad. En el caso de personas muy mayores, suelen ocurrir porque gozan de peor salud; respecto a los ni?os, muchas veces es por falta de supervisi¨®n y, en el caso de los ba?istas de entre 20 y 30 a?os, juega un papel importante la imprudencia. Tambi¨¦n inciden en el hecho de que suelen ser los hombres los que m¨¢s se ahogan porque asumen un mayor riesgo. "Hay veces que est¨¢n en grupo, en sitios peligrosos y se dicen los unos a los otros 'yo me tiro", a?ade Pascual.