¡°Era imposible imaginar algo as¨ª¡±
La comunidad musulmana en Espa?a, con 1,9 millones de fieles, sorprendida por la juventud de los terroristas
Nadie los vio venir. Ni las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado ni la comunidad musulmana en Espa?a. La juventud de los terroristas de Barcelona y Cambrils, una cuadrilla de amigos en apariencia integrados que pese a su temprana edad fueron capaces de organizarse en la c¨¦lula autora del primer atentado yihadista en Espa?a desde el 11-M, ha dejado en shock a los casi dos millones de fieles que practican el Islam en el pa¨ªs. ¡°Estamos impactados¡±, asiente Riay Tatary, presidente de la Comisi¨®n Isl¨¢mica de Espa?a (CIE), ¨®rgano representativo de las comunidades religiosas isl¨¢micas ante la Administraci¨®n. ¡°[Los terroristas] han sido un instrumento, el alfiler que te pincha... Hay que profundizar, no quedarse en la superficie y averiguar qui¨¦n est¨¢ detr¨¢s¡±, a?ade Tatary, que tambi¨¦n est¨¢ al frente de la Uni¨®n de Comunidades Isl¨¢micas de Espa?a (UCIDE). ¡°Nuestros j¨®venes son gente sana y que se sienten espa?oles¡±, concluye Sami El Mushtawi, portavoz del Centro Cultural Isl¨¢mico de Madrid, el principal del pa¨ªs.
Catalu?a es la regi¨®n con m¨¢s musulmanes
- Espa?a contaba con 1,9 millones de musulmanes en 2016, seg¨²n los datos del Observatorio Andalus¨ª y la Uni¨®n de Comunidades Isl¨¢micas de Espa?a. De ellos, 1.115.124 son de origen extranjero y 804.017 son musulmanes espa?oles.
- Catalu?a es la comunidad aut¨®noma que concentra m¨¢s musulmanes (515.482). La siguiente regi¨®n con la poblaci¨®n m¨¢s numerosa es Andaluc¨ªa, con 309.586 ciudadanos. A poca distancia se sit¨²a la Comunidad de Madrid (283.063). Las siguientes autonom¨ªas con mayor presencia de musulmanes son la Comunidad Valenciana, con 204.479 fieles, y Murcia, con 98.167. Cantabria y Asturias son las regiones con menos presencia, con una poblaci¨®n de 5.013 y 7.820 personas respectivamente.
- Barcelona es la provincia con m¨¢s musulmanes (324.483). Despu¨¦s se sit¨²an las comunidades uniprovinciales de Madrid y Murcia, y a continuaci¨®n Valencia (92.080).
- 753.425 musulmanes son nacionales de Marruecos. Pakist¨¢n, con 78.071, es el siguiente pa¨ªs de origen por importancia. De Senegal proceden 62.489, una cifra muy similar a la de Argelia.
La incredulidad y el temor a que el desarraigo de los descendientes de la primera generaci¨®n de inmigrantes de pa¨ªses de mayor¨ªa musulmana alimente futuros ataques monopoliza desde el jueves la atenci¨®n de un credo temeroso de su estigmatizaci¨®n. Y de que el Estado Isl¨¢mico y otras organizaciones terroristas exploten los problemas de identidad acentuados en los j¨®venes para engrosar sus filas. Tatary y El Mushtawi coinciden en que la integraci¨®n ¡°es real¡± en Espa?a. A diferencia de lo que ocurre en otros Estados de la UE como Francia, apuntan la docena de musulmanes consultados en la mezquita central de Madrid y la conocida como mezquita de la M-30, la de mayores dimensiones de Espa?a.
Los ataques terroristas en La Rambla de Barcelona y el paseo mar¨ªtimo de Cambrils han sembrado no obstante la duda sobre esa integraci¨®n que los referentes oficiales de los musulmanes de Espa?a ponen como ejemplo. Son la muestra de un caldo de cultivo que el jueves llev¨® la firma de unos adolescentes de Ripoll (Girona) incluido Moussa Oukabir, un menor de edad de 17 a?os, que no dieron muestra de su radicalizaci¨®n hasta el final. Que hasta entonces jugaban al f¨²tbol como uno m¨¢s. Y que incluso hablaban a la perfecci¨®n catal¨¢n.
¡°Era imposible que alguien imaginara un escenario as¨ª, que gente tan joven llegase a atacar a la sociedad en la que viven. En anteriores casos lo que hab¨ªa eran chavales que eran captados y se iban a combatir a Siria en las filas del Estado Isl¨¢mico. Ahora, por primera vez, no han hecho el viaje... Los atentados de Catalu?a marcan un antes y un despu¨¦s¡±, explica Mohammed Azahaf, experto en gesti¨®n de la diversidad y prevenci¨®n de extremismos. De padres de origen marroqu¨ª, Azahaf fund¨® en 2001 Sababia, la primera asociaci¨®n de hijos de inmigrantes en Espa?a. Miembro del gabinete de crisis por los atentados del 11-M del Ayuntamiento de Madrid, plantea que la Administraci¨®n debe reforzar la intervenci¨®n psicosocial como medida de prevenci¨®n ante las dudas sobre su identidad que pueda sufrir la denominada como segunda generaci¨®n de musulmanes en Espa?a.
Los responsables de dicha comunidad comparten que los terroristas no eran devotos. ¡°No eran religiosos¡±, incide El Mushtawi, que les tilda de ¡°incultos¡± e ¡°ignorantes¡±. De serlo habr¨ªan acudido a las mezquitas y, por extensi¨®n, habr¨ªan provocado la alarma. Atra¨ªdo la atenci¨®n de las fuerzas de seguridad. El problema fue que, en el caso de los yihadistas de Ripoll, el proceso de radicalizaci¨®n se habr¨ªa llevado lejos de los canales bajo control de las autoridades. ¡°El im¨¢n que les llev¨® a ese punto de extremismo sab¨ªa muy bien lo que hac¨ªa. Como captador, seguro que lo intent¨® con much¨ªsimos j¨®venes antes¡±, concluyen fuentes de la polic¨ªa. La Polic¨ªa Nacional ya desarticul¨® en Ceuta en 2016 una c¨¦lula de captaci¨®n y radicalizaci¨®n de menores que buscaba reclutar para el Daesh, acr¨®nimo en ¨¢rabe del Estado Isl¨¢mico. Los atentados de Catalu?a abren una nueva etapa en la lucha antiterrorista.
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