Espa?a, un pa¨ªs sin guetos para musulmanes
La comunidad isl¨¢mica reclama que el Estado cumpla el Acuerdo de Cooperaci¨®n de 1992 para afianzar su integraci¨®n
En Espa?a hab¨ªa poco m¨¢s de 200.000 musulmanes a principios de los a?os noventa, Ceuta y Melilla incluidas. Desde entonces, los miembros de esta comunidad han multiplicado casi por 10 su poblaci¨®n hasta rozar los dos millones de personas, de los que m¨¢s de 800.000 tienen la nacionalidad espa?ola. Condici¨®n que cada a?o adquieren un promedio de 15.000 a 20.000 ciudadanos (187.296 desde 2008). ¡°Que ya la mitad de musulmanes sean espa?oles entre conversos, descendientes de los primeros inmigrantes procedentes de pa¨ªses principalmente magreb¨ªes, etc¨¦tera, permite hablar de una primera generaci¨®n de musulmanes espa?oles¡±, destaca Jordi Moreras, antrop¨®logo y especialista en islam en Europa.
Una generaci¨®n de cultura espa?ola y confesi¨®n isl¨¢mica cuyo grado de integraci¨®n es el opuesto al de las banlieues de Francia. ¡°A diferencia de lo que ocurre en otros pa¨ªses de la Uni¨®n Europea, aqu¨ª no hay guetos¡±, sentencia Sami El Mushtawi, portavoz del Centro Cultural Isl¨¢mico de Madrid, el principal del pa¨ªs. ¡°Queda por hacer, pero la integraci¨®n es de verdad¡±, coincide Riay Tatary, presidente de la Comisi¨®n Isl¨¢mica de Espa?a (CIE), el ¨®rgano representativo de las comunidades religiosas isl¨¢micas ante la Administraci¨®n. ¡°Conviene no idealizar nada, pero es cierto que la convivencia es m¨¢s normal, aunque la discriminaci¨®n existe... Pese a que hay una mayor integraci¨®n en general, sin embargo, no se ve correspondida con la representaci¨®n en las instituciones¡±, destaca Bernab¨¦ L¨®pez, catedr¨¢tico honorario de Historia del Islam Contempor¨¢neo en la Universidad Aut¨®noma de Madrid.
Los responsables de la comunidad isl¨¢mica traslucen el asombro que les sigue provocando que detr¨¢s de los ataques yihadistas de Barcelona y Cambrils estuviera una cuadrilla de j¨®venes, entre ellos menores, captados y adoctrinados por el im¨¢n de Ripoll, un pueblecito en el prepirineo catal¨¢n. ¡°El problema que puede darse y que habr¨ªa explotado el im¨¢n [Abdelbaki es Satty] es que haya dudas sobre la identidad, que no sea reconocida¡±, se?ala Moreras.
55 profesores para 290.000 alumnos
De los 55 profesores reconocidos por la Comisi¨®n Isl¨¢mica de Espa?a, 22 ense?an en Andaluc¨ªa, 14 en Ceuta, 10 en Melilla, tres en Arag¨®n y en Euskadi y el resto, uno por autonom¨ªa, en Canarias, Castilla y Le¨®n y la Comunidad de Madrid. ¡°Es necesaria una educaci¨®n supervisada¡±, apunta Tatary. Los dirigentes de la CIE reclaman al Gobierno el cumplimiento del acuerdos de 1992 una vez superada la bicefalia que desde ese a?o caracteriz¨® a la organizaci¨®n.
El pulso entre la Uni¨®n de Comunidades Isl¨¢micas de Espa?a (UCIDE) y la Federaci¨®n Espa?ola de Entidades Religiosas Isl¨¢micas (FEERI) dificult¨® una estrategia com¨²n: las decisiones en la CIE se deb¨ªan tomar por mayor¨ªa absoluta y no sol¨ªan prosperar. ¡°Parece que el Estado por fin se est¨¢ dando cuenta de que el cumplimiento del Acuerdo de Cooperaci¨®n es una garant¨ªa para evitar la radicalizaci¨®n¡±, observa Romero.
¡°En Espa?a tenemos un islam que es muy diverso. Que se perciba nuestra religi¨®n como algo monol¨ªtico, con predominancia de una influencia de los pa¨ªses ¨¢rabes, por ejemplo, no se ajusta a la realidad. Los j¨®venes musulmanes contempor¨¢neos est¨¢n lejos de ese clich¨¦¡±, explica Isabel Romero, presidenta de la Junta Isl¨¢mica. Esta organizaci¨®n, fundada en 1989, se implic¨® en la firma hace 25 a?os del Acuerdo de Cooperaci¨®n entre el Estado y la CIE. Su articulado de 14 puntos recoge los derechos que la Constituci¨®n reconoce a los fieles musulmanes. ¡°Se ha producido un escaso cumplimiento del acuerdo por problemas internos, diferencias de visi¨®n y escasa voluntad pol¨ªtica¡±, contin¨²a Romero.
La presidenta de la Junta Isl¨¢mica, que re¨²ne a muchos conversos, pone como ejemplo que cuesta que se respeten los preceptos halal. El Acuerdo de Cooperaci¨®n establece que la alimentaci¨®n de los alumnos musulmanes de los centros p¨²blicos y privados concertados que lo soliciten ¡°se procurar¨¢n adecuar a los preceptos religiosos isl¨¢micos¡±, as¨ª como el horario de comidas durante el Ramad¨¢n. ¡°Es una pelea que los ni?os tengan derecho a una alimentaci¨®n halal¡±, lamenta.
¡°Hay que desarrollar el Acuerdo de Cooperaci¨®n¡±, comparte Tatary, que incide en la ¡°necesidad¡± de atender la educaci¨®n religiosa de los 290.000 alumnos musulmanes escolarizados en Espa?a. En 1996 se aprob¨® el contenido de las clases de Ense?anza Religiosa Isl¨¢mica y el convenio para la contrataci¨®n de los profesores para impartir la asignatura. Solo seis regiones (Andaluc¨ªa, Arag¨®n, Canarias, Castilla y Le¨®n, Madrid y Pa¨ªs Vasco) y las ciudades aut¨®nomas de ?frica cumplen unos m¨ªnimos legales en la etapa de Educaci¨®n Primaria.
Catalu?a es, con 515.482 musulmanes, la comunidad con la mayor poblaci¨®n de este credo. Tambi¨¦n es la regi¨®n con m¨¢s alumnos escolarizados: 82.284 (54.968 inmigrantes y 27.316 espa?oles). Pese a la potencial demanda, no cuenta con ning¨²n profesor de la religi¨®n isl¨¢mica. Expertos en la lucha antiterrorista recuerdan la implantaci¨®n del salafismo (corriente con una visi¨®n rigorista del islam) en la regi¨®n, solo comparable a B¨¦lgica. ¡°Estos muchachos han tenido acceso a una sola formaci¨®n, una sola lectura, un ¨²nico discurso¡±, incide Tatary de la exposici¨®n de la joven c¨¦lula terrorista al extremismo del im¨¢n Es Satty.
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