La Manada encara la recta final del juicio
El proceso contra los acusados de una violaci¨®n grupal en los Sanfermines de 2016 llega a su fin
El juicio a La Manada ¡ªel grupo de cinco hombres que formaban parte de un chat de Whatsapp con esa denominaci¨®n¡ª por la supuesta violaci¨®n a una joven de 18 a?os en los Sanfermines de 2016 entra en su recta final. Los informes finales ser¨¢n defendidos hoy y ma?ana por las acusaciones (que sostienen que la chica fue violada por el grupo) y las defensas (que afirman que la relaci¨®n sexual fue consentida). Estos han sido los puntos clave de un caso que ha adquirido una enorme resonancia social:
El an¨¢lisis de los v¨ªdeos
Los siete fragmentos de v¨ªdeo grabados durante la presunta violaci¨®n con sus tel¨¦fonos m¨®viles por dos de los acusados, un guardia civil y un militar, duran 96 segundos. A lo largo de la vista, el acusado Alfonso Cabezuelo reconoci¨® haber borrado el m¨¢s largo de ellos, que fue luego recuperado por la Polic¨ªa Foral. El cuerpo auton¨®mico realiz¨® un extenso informe analizando cada uno de los fotogramas. En sus conclusiones afirma que la chica ¡°adopta un rol pasivo y neutro¡± durante el acto sexual y que sus movimientos son ¡°dirigidos y/o controlados¡± por los encausados. No hay di¨¢logo entre ellos y la joven permanece con los ojos cerrados.
La contradicci¨®n
La principal contradicci¨®n surgida en el juicio apareci¨® en ¨²ltima jornada: es la de la polic¨ªa municipal de Pamplona que recogi¨® aquel 7 de julio de 2016 la primera declaraci¨®n de la denunciante. A preguntas de la defensa, la agente afirm¨® que la chica le dijo que sab¨ªa que la hab¨ªan grabado en v¨ªdeo, algo que la polic¨ªa no anot¨® en el atestado de aquel d¨ªa ni tampoco hab¨ªa comunicado durante la instrucci¨®n judicial. Los abogados de la defensa sostienen que es un dato fundamental porque, seg¨²n ellos, apunta a la posibilidad de que la chica denunciara un acto consentido por miedo a que salieran a la luz los v¨ªdeos; las acusaciones niegan rotundamente esa tesis y creen que la agente se equivoc¨® en el juicio porque no recordaba bien los hechos de 2016.
El informe de los detectives
Uno de los aspectos que m¨¢s controversia gener¨® en la vista oral fue la admisi¨®n como prueba de un informe encargado a unos detectives por una de las defensas sobre el comportamiento en redes sociales de la chica durante las semanas posteriores al suceso. En la ¨²ltima jornada del juicio ese informe se retir¨® porque ¡°pod¨ªa generar problemas de derecho a la intimidad¡±, seg¨²n el abogado de la acusaci¨®n Miguel ?ngel Mor¨¢n. Lo ¨²nico que qued¨® fue una fotograf¨ªa p¨²blica en Instagram de septiembre de 2017.
Estos informes trataban de rebatir la existencia del da?o psicol¨®gico de la denunciante, por el que la fiscal solicita una indemnizaci¨®n de 100.000 euros para la chica y las acusaciones elevan a 250.000. Colectivos sociales y organizaciones feministas consideraron que se trataba de juzgar la vida posterior al suceso de la denunciante y criticaron duramente la decisi¨®n del tribunal.
Los antecedentes
El caso es conocido como La Manada por el grupo de Whatsapp que un¨ªa a los encausados y en el que uno de ellos, Jos¨¦ ?ngel Prenda, escribi¨® en la madrugada de los hechos: ¡°foll¨¢ndonos una entre cinco¡±; y anunci¨®: ¡°hay v¨ªdeo¡±. Analizando las conversaciones e im¨¢genes encontradas en los tel¨¦fonos m¨®viles de los cinco acusados, la Polic¨ªa Foral encontr¨® indicios de que cuatro de ellos pudieron haber agredido sexualmente a otra chica, a la que podr¨ªan haber narcotizado, en Pozoblanco (C¨®rdoba). Esa posible agresi¨®n se habr¨ªa producido dos meses antes de los Sanfermines de 2016, durante la feria de la localidad cordobesa en la que Antonio Manuel Guerrero, uno de los acusados, estaba destinado como guardia civil. La investigaci¨®n de este suceso previo al de Sanfermines fue trasladada al Juzgado de Instrucci¨®n 1 de Pozoblanco. El asunto a¨²n no tiene fecha de juicio. La fiscal¨ªa y las acusaciones del caso de Sanfermines pidieron que se incorporaran a la causa como prueba los mensajes referidos a ese suceso, para tratar de mostrar una conducta previa de los encausados. Sin embargo, la secci¨®n segunda consider¨® que no hab¨ªa lugar para admitirlos.
Tres de los acusados ¡ªJos¨¦ Angel Prenda, Alfonso Cabezuelo y ?ngel Boza¡ª cuentan con antecedentes penales, aunque no son computables a efectos de reincidencia. El primer caso es un robo con fuerza, el segundo por lesiones y el tercero por conducir ebrio. Cabezuelo, adem¨¢s, hab¨ªa ingresado en el Ej¨¦rcito de Tierra, destinado en la Unidad Militar de Emergencias. Tambi¨¦n ten¨ªa un empleo p¨²blico Antonio Manuel Guerrero, que hab¨ªa ingresado recientemente en la Guardia Civil. Ambos est¨¢n suspendidos de sus empleos. El quinto acusado es Jes¨²s Escudero.
Sesi¨®n a puerta cerrada
La secci¨®n segunda de la Audiencia de Navarra, encargada de juzgar el caso, comunic¨® un mes antes del comienzo de la vista oral que esta se llevar¨ªa a cabo a puerta cerrada. Tanto la denunciante como la acusaci¨®n popular ejercida por el Ayuntamiento de Pamplona y dos de las defensas solicitaron la medida para proteger la intimidad de la joven y evitar la difusi¨®n de im¨¢genes de los denunciados. El tribunal dict¨® medidas de protecci¨®n especial para la chica, que declar¨® el 14 de noviembre. Los acusados siguieron su declaraci¨®n por videoconferencia en una sala anexa. Durante todo el proceso el acceso a la informaci¨®n por parte de los periodistas ha pasado por el tamiz ¡ªa menudo opuesto¡ª de los abogados de las partes, los ¨²nicos que han podido acceder a la sala.
El tribunal
El turno de asignaci¨®n llev¨® el caso a la secci¨®n segunda de la Audiencia de Navarra, presidida por Jos¨¦ Francisco Cobo junto a Ricardo Gonz¨¢lez y Raquel Fernandino como magistrados. Seg¨²n varios abogados de Pamplona, esta secci¨®n tiene fama de garantista de los derechos de defensa. Fue el tribunal el que decidi¨® que la declaraci¨®n de los cinco acusados se realizara al final del proceso de testificales y no al principio, para que los acusados pudieran escuchar antes los argumentos en su contra. Esta pr¨¢ctica, que se realiza en muchos sistemas penales, no es habitual en Espa?a. El m¨¢s veterano de los abogados colegiados en ejercicio en Pamplona, ?ngel Ruiz de Erenchun, se?ala que ¡°es la primera vez que ocurre en la ciudad¡±, seg¨²n su recuerdo.
Las acusaciones populares
En el proceso est¨¢n personados tanto el Ayuntamiento de Pamplona como el Gobierno de Navarra (en este caso, en cumplimiento de la Ley Foral de Atenci¨®n a V¨ªctimas de Violencia de G¨¦nero). Las defensas trataron, infructuosamente, de evitar esa personaci¨®n. Ninguno de los acusados respondi¨® a sus preguntas por considerar su personaci¨®n de ¡°car¨¢cter pol¨ªtico¡±, seg¨²n el abogado Agust¨ªn Mart¨ªnez Becerra.
Los informes finales, abiertos al p¨²blico
Debido a la pol¨¦mica generada al trascender fuera de la sala de vistas la admisi¨®n como prueba, al principio del juicio, de los informes de los detectives sobre la denunciante, el Tribunal Superior de Justicia de Navarra tuvo que enviar una nota aclaratoria sobre qu¨¦ se hab¨ªa aceptado y qu¨¦ no. Esto provoc¨® una protesta al d¨ªa siguiente por parte de Agust¨ªn Mart¨ªnez Becerra, abogado de tres de los acusados. La queja del letrado ¡ªque ped¨ªa que la vista fuese abierta al p¨²blico¡ª hizo que los tres magistrados del tribunal se reunieran de urgencia para barajar una posible apertura del juicio. A eso se opon¨ªa la magistrada, que consideraba que no se hab¨ªan producido cambios en las circunstancias que les hab¨ªan llevado a decidir la vista a puerta cerrada. Finalmente acordaron, con el pl¨¢cet de todas las partes, que se realizaran a puerta abierta las conclusiones finales de las partes, lo que suceder¨¢ en las sesiones de hoy y ma?ana.
Habr¨¢ 46 periodistas acreditados y 24 sitios para p¨²blico general, entre los que tienen preferencia los familiares de los acusados y la denunciante. No podr¨¢n introducirse tel¨¦fonos m¨®viles ni ning¨²n aparato de grabaci¨®n. La Polic¨ªa Foral avisa de que desalojar¨¢ a quien incumpla estas condiciones y recomienda llevar ¡°l¨¢pices o bol¨ªgrafos sencillos¡±.
La fiscal¨ªa mantiene su petici¨®n de 22 a?os y 10 meses de prisi¨®n para cada uno de los cinco acusados. La acusaci¨®n particular la eleva a 24 a?os y 9 meses; y las populares, a 25 a?os y 6 meses por delitos continuados de agresi¨®n sexual, contra la intimidad y robo con violencia. Dos de los defensores piden la absoluci¨®n, mientras que Jes¨²s P¨¦rez, abogado de Antonio Manuel Guerrero, anunci¨® que solicitar¨¢ la nulidad del proceso por ¡°vulneraci¨®n de derechos fundamentales¡±. El presidente del Tribunal Superior de Navarra, Joaqu¨ªn Galve, se?al¨® que esta petici¨®n no se ha formalizado. Hasta el momento de presentar su informe final, las partes pueden variar sus peticiones.
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