?Han girado los catalanes a la derecha?
Catalu?a incurre en un paradoja: es la segunda comunidad aut¨®noma que se declara m¨¢s de izquierdas, pero tambi¨¦n una de las menos partidarias de subir los impuestos para mejorar los servicios p¨²blicos
Los resultados en Catalu?a arrojaban otra mayor¨ªa adem¨¢s de la independentista: 74 esca?os de 135 han ido a parar a partidos de centro y derecha. ?Pero quiere decir esto que Catalu?a, para muchos un lugar de izquierdas, ha girado ideol¨®gicamente? No tan deprisa.
Es cierto que Catalu?a se define como progresista. Solo un 12% de los catalanes se declara de derechas, mientras que en el conjunto de Espa?a ese porcentaje es del 23%, seg¨²n datos del CIS en 2016. Cuando se les pregunta, los catalanes aparecen como uno de los electorados m¨¢s de izquierdas de Europa. Pero incurren en una paradoja: la izquierda catalana solo ha sido mayoritaria en votos en dos de las nueve ¨²ltimas elecciones auton¨®micas (2003 y 2006). Desde la transici¨®n casi siempre presidi¨® la Generalitat un candidato de Convergencia, un partido que los propios catalanes defin¨ªan como de centro-derecha.
Lo que ocurre, en realidad, es que los catalanes tienen una relaci¨®n particular con las etiquetas ideol¨®gicas. Es lo que el polit¨®logo Llu¨ªs Orriols ha denominado?el mito progresista: "en Catalu?a nos caracterizamos por tener unos valores que podr¨ªamos definir como de izquierdismo no practicante". Una regi¨®n de izquierdas deber¨ªa, por ejemplo, estar m¨¢s dispuesta a aumentar los impuestos a cambio de mejores servicios. Pero no es el caso de Catalu?a, que aparece como una de las autonom¨ªas menos partidarias de subirlos.
El gr¨¢fico refleja esta anomal¨ªa comparando todas las Comunidades Aut¨®nomas, con datos del CIS de 2016. Los catalanes son los m¨¢s de izquierdas despu¨¦s del Pa¨ªs Vasco, pero tambi¨¦n son la quinta comunidad menos partidaria de subir los impuestos. La mayor¨ªa de regiones declaran una preferencia mayor por ¡°mejorar los servicios p¨²blicos aunque haya que pagar m¨¢s impuestos¡±. Especialmente llamativo es el caso de Madrid. La comunidad se define claramente a la derecha de Catalu?a, pero es menos cr¨ªtica con los impuestos: solo el 12% de los madrile?os cree, m¨¢s bien, que ¡°es m¨¢s importante pagar menos impuestos, aunque eso signifique reducir los servicios p¨²blico¡±, frente al 17% de los catalanes que opina lo mismo.
Por qu¨¦ ocurre esto
La explicaci¨®n de este fen¨®meno la estudi¨® Elias Dinas, profesor de Ciencia Pol¨ªtica en la Universidad de Oxford. Dinas se pregunt¨® en 2012 por qu¨¦ vascos y catalanes constituyen las regiones m¨¢s a la izquierda de Europa. Su respuesta fue mirar la cuesti¨®n nacional: en Catalu?a y Pa¨ªs Vasco el eje territorial hab¨ªa impregnado al ideol¨®gico, equiparando ¡°derecha¡± con ¡°centralista¡±. Parece que muchos catalanes conservadores, pero catalanistas, evitan la etiqueta porque tiene connotaciones antiautonomistas. Si en Catalu?a ser de derechas se confunde con ser espa?olista, es normal que algunos eviten la etiqueta. Aunque sean religiosos, defiendan el libre comercio o sean partidarios de los impuestos bajos.
Esto explica otro fen¨®meno que tambi¨¦n apunt¨® Lluis Orriols: el auge del independentismo ha ido acompa?ado por un aumento de los catalanes de izquierdas. Entre 2011 y 2013, el porcentaje de catalanes que se declaraban de izquierdas pas¨® del 33% al 42%, seg¨²n el Centro de Estudios de Opini¨®n (CEO). Uno de cada diez catalanes hizo ese viaje en esos dos a?os. La transformaci¨®n m¨¢s espectacular la hicieron los votantes de CiU. En 2011 el 29% de los convergentes se dec¨ªan de derechas, y el 7% de izquierdas. Dos a?os despu¨¦s esas proporciones se hab¨ªan dado la vuelta: solo el 18% segu¨ªan siendo de derechas y hasta el 33% ahora eran de izquierdas.
Esta paradoja se reproduce con los partidos. En Catalu?a hay dos formaciones consideradas de izquierdas y cuyos votantes favorecen una mayor redistribuci¨®n: ERC y CeC-Podem. Esto es lo esperado. Solo sorprende, quiz¨¢s, que ERC sea percibida m¨¢s de izquierdas que los comunes, aunque hayan gobernado dos a?os con Convergencia.
El resto de partidos son m¨¢s dif¨ªciles de explicar. Todos son menos partidarios de subir los impuestos que la media espa?ola. Pero la diferencia m¨¢s llamativa la encontramos cuando comparamos JxCat y Ciudadanos. Para los catalanes, la lista de Carles Puigdemont es menos de derechas que la de In¨¦s Arrimadas. Sin embargo, los votantes de JxCat son tan partidarios de bajar los impuestos como los de Ciudadanos. Tambi¨¦n son m¨¢s religiosos. En 2016, seg¨²n el CIS, la mitad de los votantes convergentes iba a misa alguna vez, por un 36% de los de Cs. Lo confirma el CEO: el 21% de los primeros dicen ir a misa cada mes, por un 16% de los segundos. Ser de derechas no consiste s¨®lo en ser religioso o preferir los impuestos bajos, pero son datos que cuestionan, o por lo menos matizan, el mito de la Catalu?a progresista.
Fuentes. Los datos de las CCAA los he tomado de las encuestas del CIS. La pregunta sobre impuestos ofrece ubicarse en una escala de 0 a 10, donde 0 es ¡°Mejorar servicios p¨²blicos aunque haya que pagar m¨¢s impuestos¡± y 10, ¡°Pagar menos impuestos aunque haya que reducir servicios p¨²blicos¡±. En la pregunta sobre impuestos, para mejorar la muestra he agregado dos estudios: el 3184 (2017) y el 3145 (2016). El margen de error para Catalu?a o Madrid es de 0,13 puntos; el del total, de 0,05; y otras CCAA peque?as tienen m¨¢rgenes de errores de 2 y 3 d¨¦cimas. Para la pregunta de ideolog¨ªa he tomado los datos del estudio 3141, la preelectoral de 2016, que tiene la mayor muestra. La ubicaci¨®n de los partidos catalanes la he tomado de la encuesta postelectoral del CIS de 2015. Para la pregunta de impuestos he agregado los mismos estudios que con las CCAA, el 3184 y el 3145. En este caso los m¨¢rgenes de error son mayores (porque la muestra es m¨¢s peque?as) y por eso los he representado.
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