La estafa de la moneda virtual espa?ola: un bot¨ªn de 228 millones
La jueza multiplica por cinco el volumen del fraude piramidal ideado por el valenciano Ram¨ªrez Marco
El sue?o del valenciano Jos¨¦ Manuel Ram¨ªrez Marco de poner en circulaci¨®n una moneda virtual ajena a los gobiernos y a las convulsiones del mercado se ha transformado en una pesadilla en 78 pa¨ªses. Los 22.000 inversores que confiaron sus ahorros en el invento de Ram¨ªrez, el unete, una ciberdivisa equivalente a un d¨®lar que promet¨ªa una rentabilidad anual del 275 %, perdieron 228 millones de euros entre 2013 y 2015. La cifra multiplica por cinco la estimaci¨®n inicial de este fraude piramidal, seg¨²n recientes informes de los investigadores a los que ha tenido acceso EL PA?S.
Y es que, tras el aparente altruismo del fundador de la divisa, existi¨® un plan para esfumar el dinero de los inversores, seg¨²n la causa por estafa y blanqueo de capitales que indaga la titular del Juzgado Central de Instrucci¨®n n¨²mero 3 de la Audiencia Nacional, Carmen Lamela.
Los ¨²ltimos avances de la investigaci¨®n judicial han destapado que -junto a los 48 millones de euros que Ram¨ªrez recaud¨® durante un a?o y medio- los usuarios del unete movieron otros 180 millones en transacciones entre particulares para adquirir la moneda virtual.
¡°Los perjudicados por el fraude se han multiplicado y, en algunos casos, el perjuicio ha pasado de unos a otros¡±, recoge el ¨²ltimo auto de la magistrada Lamela, que define as¨ª el prop¨®sito real de Ram¨ªrez: ¡°Vender un sue?o de enriquecimiento ut¨®pico¡±.
La jueza intenta ahora recuperar el bot¨ªn que ocult¨® Ram¨ªrez en para¨ªsos fiscales. La investigaci¨®n, que dura ya dos a?os, no ha destapado todav¨ªa la suma que escondi¨® el valenciano en San Vicente y las Granadinas, donde los usuarios enviaban su dinero para su conversi¨®n en monedas virtuales.
Obsesionado con Internet, Ram¨ªrez so?¨® siempre con ser millonario, seg¨²n relataron a este peri¨®dico quienes le conocieron en los 80 como trabajador del guardarropa de la discoteca Piper¡¯s de Torremolinos (M¨¢laga). Y, en cierto modo, cumpli¨® su fantas¨ªa.
Su unete recaud¨® dos millones de euros mensuales hasta 2015, cuando afloro que la divisa digital era en realidad un esquema Ponzi como el urdido en 2008 por Telexfree, una firma de Massachusetts que esfum¨® los ahorros de un mill¨®n de inversores.
El hundimiento de Ram¨ªrez y su moneda coincidi¨® con el estallido de la Operaci¨®n Fara¨®n, que culmin¨® con el arresto del valenciano en 2015.
A trav¨¦s de una madeja de 17 empresas en 11 pa¨ªses, Ram¨ªrez recibi¨® 7.419 transferencias. Y envi¨® los fondos de sus clientes a un entramado de cuentas bancarias en Malta, Eslovenia, San Vicente y las Granadinas y Letonia.
La magistrada Carmen Lamela ha ordenado una comisi¨®n rogatoria ¨Cprocedimiento de auxilio judicial entre Estados- a Estados Unidos para descubrir el capital que circul¨® a trav¨¦s de la plataforma de pagos International Payout System, que carece de implicaci¨®n en los delitos investigados pero que fue utilizada para canalizar 1,2 millones que acabaron en cuentas de la organizaci¨®n, seg¨²n las pesquisas.
La Polic¨ªa conf¨ªa adem¨¢s en el desbloqueo de un dep¨®sito en el banco let¨®n Rietumu donde el padre del unete guard¨® 30 millones de euros. La entidad letona congel¨® estos fondos ante la sospecha de que fueron usados para el blanqueo.
La red de Ram¨ªrez atrap¨® a peque?os ahorradores ¨Cla mayor¨ªa sin cultura financiera- de 78 pa¨ªses encabezados por Italia (22 millones), Espa?a (12,5), Estados Unidos, Per¨² y Colombia.
La jueza envi¨® a prisi¨®n provisional al padre del unete en octubre de 2015 junto a su pareja, la cofundadora de la empresa, Pilar Otero. Tras abonar una fianza de 150.000 euros, ambos se encuentran en libertad a la espera de un previsible juicio por estafa y blanqueo de capitales.?
¡°Ram¨ªrez ide¨® un sistema que atrap¨® a miles de inversores con la promesa de dinero f¨¢cil¡±, explica Manuel Carlos Merino Maestre, abogado personado en esta causa en representaci¨®n de la Asociaci¨®n Nacional de Afectados de Internet y Nuevas Tecnolog¨ªas (Anfitec).
investigacion@elpais.es
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