El senyor Torrent, el senyor Casamaj¨® y simplemente Soraya

No vino Puigdemont y esa es la noticia. Ni por tierra, ni por mar, ni por aire, ni por Skype. Puigdemont es Carles Puigdemont, de segundo Casamaj¨®, como el personaje de Xavier Sard¨¢ en la radio. Cuando Roger Torrent, el president del Parlament, se refiere a ¨¦l, y se refiere tanto, lo llama con los tres apellidos. Carles Puigdemont i Casamaj¨®. Y no queda m¨¢s remedio que recordar al legendario car¨¢cter que encarnaba el extraordinario radiofonista, el senyor Casamaj¨®. Un tipo enrabieta y sensato, algo as¨ª como Josep Pla enrazado con Josep Tarradellas. Puigdemont no se simp¨¢tico, tan solo sonr¨ªe. Carece del ingenio de Sard¨¢, y como periodista no le llega a la suela al venerable Pla. Como pol¨ªtico hace el rid¨ªculo, ese es su oficio, algo contra lo que se manifestaba Tarradellas.

En el momento en que, con palabras distintas, Roger Torrent anunci¨® que Puigdemont i Casamaj¨® no estaba ni se le esperaba (ni siquiera por Skype), el senyor president del Parlament se refiri¨® a otra persona, la vicepresidenta del Gobierno. El nombre completo de ¨¦sta es bien largo: Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa. Pero es su nombre, y por tanto a ¨¦l responde, y asimismo esa es su dignidad. Igual que mi amigo Lluis Bassets i S¨¢nchez se llama Lluis y no Luis (lo llaman Luis para insultarlo colegas suyos incluso), esa se?ora de tan largo nombre (Soraya) y de tan detenidos apellidos se llama con el nombre completo. Igual que Theresa May se llama as¨ª, o al menos as¨ª se debe llamar en sede parlamentaria. Puede imaginarse qu¨¦ pasar¨ªa en Westminster si el l¨ªder de los Comunes se dirige a la primera ministra de Su Majestad simplemente como Theresa.

Pues el introductor de Carles Puigdemont i Casamaj¨® se refiri¨® en su discurso oficial de aplazamiento (y vaciamiento) del dichoso pleno como si Soraya no tuviera apellidos. Ni cargo. Esconde el apellido y el cargo el senyor Torrent con alguna pretensi¨®n, indudablemente, o porque es mujer y se tiende en sociedad a evitar los apellidos de las damas por la mala educaci¨®n de los olvidos o porque se quiere degradar a aquella (o a aquel) al que no se le concede ni la dignidad de llamarse como quiera.

Se intenta herir con demasiada frecuencia. Y en esa omisi¨®n del apellido de la vicepresidenta puede advertirse tambi¨¦n burla, se?alamiento: ella es la culpable de lo que pasa. Subido a esa nueva pantalla, el desprecio al adversario hasta hacerle desaparecer los apellidos, hay otra intenci¨®n, adem¨¢s: poner de manifiesto que el valiente de la pel¨ªcula es Carles Puigdemont i Casamaj¨®, hombre con todos sus atributos y, por tanto, con todos sus apellidos. Roger Torrent est¨¢ tratando de hacer pasar al senyor Puigdemont i Casamaj¨® como un valiente habiendo sido un cobarde que dej¨® su pueblo tras proclamar una rep¨²blica. ?l se llama a s¨ª mismo, en Twitter, KARLS. Har¨ªa bien Torrent en hacerle caso al ap¨®cope cada vez que tenga la tentaci¨®n de quitarle sus dignidades a la se?ora Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa.