?Te meto dos tiros y me quedo tan ancho!
La Fiscal¨ªa pide cuatro a?os de c¨¢rcel para cinco alf¨¦reces por acosar a un compa?ero
- ?Como coincidas en la misma compa?¨ªa o batall¨®n que yo, te vas a cagar. Te meto dos tiros y me quedo tan ancho! Me voy al penal. ?Me da igual!
Tras cuatro kil¨®metros de caminata, arrecia la lluvia. Y los oficiales preguntan al jefe del entrenamiento, otro alf¨¦rez veintea?ero, si se pueden poner un impermeable. Ante su silencio, los corredores bromean sobre la timidez del gu¨ªa. ¡°Le da verg¨¹enza preguntarnos si nos ponemos el gore-tex¡±, se mofa uno. Estallan las carcajadas.
Se genera un silencio. El jefe de la maniobra recrimina las chanzas. Y, entre insultos de ¡°eres un mierda¡± y advertencias de ¡°?Te vas a cagar!¡±, el responsable del adiestramiento recibe varios empujones de sus compa?eros. Dos de ellos, que van armados con un fusil, como el resto del grupo, le amenazan de muerte. ¡°Si te cojo fuera, te doy una paliza y te arranco los ojos¡±, le reta uno.
El episodio de la carrera es la gota que colma el vaso de un rosario de cinco a?os de insultos y amenazas contra un compa?ero a cargo de cinco alf¨¦reces de la 146 promoci¨®n del Cuerpo de Infanter¨ªa de Marina, seg¨²n un escrito del fiscal jur¨ªdico militar Jorge Arang¨¹ena al que ha tenido acceso EL PA?S.
¡°Si te cojo fuera, te doy una paliza y te arranco los ojos¡±, le ret¨® a la v¨ªctima un compa?ero.
El grupo agresor lo formaban cinco oficiales, donde resaltaba un alf¨¦rez 18 a?os mayor que la v¨ªctima que actuaba de l¨ªder. ?l fue el encargado de ejecutar el "acoso" y las ¡°amenazas concretas y cre¨ªbles¡± durante cinco a?os, seg¨²n el Ministerio P¨²blico.
La Fiscal¨ªa solicita cuatro a?os de c¨¢rcel para los cinco alf¨¦reces que participaron en el acoso. Les culpa de un delito contra los derechos fundamentales y las libertades p¨²blicas de los militares (art¨ªculo 50 del C¨®digo Penal Militar). Y considera que los implicados ¡°mantuvieron de forma permanente y continua en el tiempo un trato de desprecio, cr¨ªtica y burla con comentarios despectivos sobre la falta de aptitud profesional de la v¨ªctima¡±.
El afectado declar¨® en el juzgado que la cacer¨ªa contra ¨¦l arranc¨® despu¨¦s de que, en el primer curso de la Escuela Naval Militar, se negara a facilitarle un trabajo de una asignatura al l¨ªder de la banda. Entonces, este y otros cuatros alf¨¦reces le aislaron.
Una psic¨®loga del Ej¨¦rcito, que trat¨® al afectado en cinco ocasiones, conoci¨® la soledad de la v¨ªctima tres a?os antes del episodio de la carrera. Pero no advirti¨® nada extra?o porque el alf¨¦rez ¡°iba acad¨¦micamente bien¡±, seg¨²n las pesquisas judiciales.
¡°Desde el primer curso de carrera, la v¨ªctima sufri¨® el desprecio y rechazo [¡], que se tradujo en una permanente desconsideraci¨®n y aislamiento del mismo, que se materializaba en comentarios como monstruo o ?gor¡±, recoge la Fiscal¨ªa. El Ministerio P¨²blico a?ade que la persecuci¨®n caus¨® en el damnificado ¡°un quebrantamiento de la resistencia moral durante los cinco a?os de carrera¡±.
Recomendaci¨®n del mando: Docilidad y pasar por el aro
Las pesquisas muestran que la v¨ªctima lleg¨® a informar a un mando de sus problemas cuando cursaba el segundo a?o de la Escuela Naval Militar. El damnificado relat¨® en el juzgado que su superior le sugiri¨® entonces ¡°que ten¨ªa que ser m¨¢s d¨®cil y, de vez en cuando, entrar por el aro¡±.
Cuando los superiores de la v¨ªctima se enteraron de que denunci¨® el acoso a la Guardia Civil en lugar de informar antes a sus superiores jer¨¢rquicos, el afectado fue sancionado con una falta leve.
Y un capit¨¢n de Infanter¨ªa de Marina amonest¨® en mayo de 2016 as¨ª la v¨ªctima por ¡°no seguir el conducto reglamentario¡±. ¡°Dichos hechos [denunciar antes ante el instituto armado] conllevan una p¨¦rdida de confianza y fiabilidad por parte del alumno [v¨ªctima] a ojos del que suscribe¡±, indic¨® el mando.
Los presuntos acosadores del alf¨¦rez se sentar¨¢n en el banquillo del Tribunal Militar Cuarto de A Coru?a entre el 28 de mayo y el 1 de junio.
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