Muere Pedro Alcorisa, uno de los ¨²ltimos guerrilleros republicanos

Pedro Alcorisa, de 97 a?os, antiguo combatiente de la Agrupaci¨®n Guerrillera de Levante y Arag¨®n (AGLA), falleci¨® este s¨¢bado en Valencia. "Tuvo una vida muy triste, como todos los hermanos, pero al final logr¨® su sue?o, enterrar los restos de nuestro padre, Te¨®filo, junto a los de mi madre, Maximina, en el cementerio de Burjassot", ha se?alado a este diario su hermana Pilar. "Empezamos cinco hermanos la b¨²squeda de la tumba y luego el proceso para la exhumaci¨®n de los restos y acabamos solo dos, Felisa, que tiene 84 y yo que soy la peque?a", ha agregado Pilar.

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El 16 de abril de 1947 la Guardia Civil detuvo a Te¨®filo Alcorisa en su casa, en Las Higueruelas, una aldea de Santa Cruz de Moya (Cuenca), localidad colindante con la provincia de Valencia. Buscaban al mayor de sus hijos, Pedro, pero no lo encontraron porque estaba en las monta?as. Era un maqui, un guerrillero republicano. Pilar apenas ten¨ªa seis a?os de edad cuando se llevaron a su padre. Te¨®filo fue torturado durante semanas, y, finalmente, ahorcado, con los propios cordones de sus zapatos, en el cuartel de Arrancapins, en Valencia, seg¨²n el Grupo para la Recuperaci¨®n de la Memoria Hist¨®rica.

Pedro y sus hermanos tardaron m¨¢s de 20 a?os en saber que su padre yac¨ªa en una fosa com¨²n del cementerio. Y m¨¢s de 70 en poder enterrarlo. En 2007 Pedro Alcorisa, con 86 a?os, solicitaba la apertura de una fosa com¨²n en el cementerio de Valencia y exhumar los restos de su padre. Algo que no permiti¨® en aquella ¨¦poca la entonces alcaldesa, la popular Rita Barber¨¢. El caso anduvo por los tribunales durante ocho a?os y el Sind¨ªc de Greuges de la Generalitat apremi¨® a Barber¨¢ para que cumpliera con la Ley de la Memoria Hist¨®rica.

La reclamaci¨®n del exmagistrado Baltasar Garz¨®n, que present¨® en nombre de la familia una denuncia penal para reclamar los restos como prev¨¦ la ley de memoria de 2007 hizo sucumbir a la Corporaci¨®n. "La defensa del juez?y el informe que present¨® el Grupo de Trabajo de Desapariciones Forzadas de la ONU criticando la actitud municipal fue determinante para que Barber¨¢ cambiara de opini¨®n y accediera", ha manifestado a EL PA?S Mat¨ªas Alonso, portavoz del Grupo para la Recuperaci¨®n de la Memoria Hist¨®rica.?

"Fue un acoso inhumano, una largu¨ªsima lucha con el equipo de Barber¨¢ porque tras dar su permiso no quiso sufragar la exhumaci¨®n. La familia no pod¨ªa porque ya hab¨ªa devuelto la subvenci¨®n que obtuvo para hacerla", ha explicado Alonso, que ha descrito a Pedro Alcorisa como un castellano austero, parco en palabras, que se entregaba a las causas. Un antih¨¦roe, uno de los ¨²ltimos guerrilleros republicanos.?