¡°El narco ha creado generaciones perdidas¡±
EL PA?S re¨²ne a una fiscal, un comisario, un alcalde y un representante vecinal para debatir sobre la lucha encarnizada contra el narco en La L¨ªnea de la Concepci¨®n
La L¨ªnea de la Concepci¨®n (C¨¢diz, 63.146 habitantes) ha acaparado este a?o cr¨®nicas y titulares explosivos por la violencia que los narcotraficantes han impuesto en su lucha contra las Fuerzas de Seguridad del Estado. La guerra es feroz y tanto polic¨ªa como Guardia Civil esperan sedientos los refuerzos prometidos por el Ministerio del Interior para doblegar a las bandas, a las que solo entre enero y abril les decomisaron 74.692 kilos de hach¨ªs, con la detenci¨®n aparejada de 295 supuestos narcotraficantes.
La fiscal antidroga de la Fiscal¨ªa de Algeciras, Macarena Arroyo, el comisario de La L¨ªnea Francisco L¨®pez, el alcalde, Juan Franco, y el presidente de la coordinadora antidroga Alternativas, Francisco Mena, analizan los problemas enquistados y posibles soluciones para atajar este mercado il¨ªcito con cifras de v¨¦rtigo. Pero tambi¨¦n diseccionan el grave problema social de esta localidad frente a Gibraltar, con un paro superior al 30% y ¡°generaciones perdidas¡± de j¨®venes que solo conocen el lenguaje de las planeadoras. En la conversaci¨®n, el comisario dispara una r¨¢faga clarificadora de preguntas y respuestas: ¡°?Cu¨¢nto hach¨ªs entra? Ojal¨¢ lo supi¨¦ramos. ?Hemos aprehendido m¨¢s? S¨ª. ?Ha entrado menos? Pues no lo s¨¦¡±.
Una lucha recrudecida
Sobre la batalla de las Fuerzas de Seguridad contra el narco, los cuatro protagonistas coinciden en que es esencial que el aumento de agentes se mantenga a largo plazo. ¡°El despliegue de las Fuerzas de Seguridad ha sido contundente, pero el temor es que sea algo puntual y que cuando el sufl¨¦ se asiente, cada uno se vaya para su casa¡±, subraya el alcalde. La fiscal apunta: ¡°El refuerzo debe tener una continuidad. La situaci¨®n se ha desbordado, aunque no se ha descontrolado. Estamos mejor, pero teniendo en cuenta que antes no est¨¢bamos mal¡±. El representante vecinal es m¨¢s cr¨ªtico: ¡°Hasta ahora, cuando el sufl¨¦ bajaba, se llevaban a los agentes, como en Semana Santa, cuando se los llevaron a M¨¢laga y Sevilla. La prioridad es la seguridad ciudadana, pero si queremos resolver este problema a largo plazo necesitamos investigaciones para desmontar a los grupos de la Udyco, el Greco o Vigilancia Aduanera, que tiene el acceso a nuestro patrimonio¡±. El comisario remacha: ¡°A veces el foco medi¨¢tico no nos gusta, pero tambi¨¦n nos permite pedir medios y apoyo para nuestro trabajo. A la comisar¨ªa de La L¨ªnea le falta unos 60 agentes y a Algeciras m¨¢s de 100¡±.
Tiempos cambiantes
La fiscal Arroyo utiliza una met¨¢fora para explicar c¨®mo ha aumentado la violencia: ¡°Antes yo siempre lo ve¨ªa como una obra de teatro: la polic¨ªa cog¨ªa al narcotraficante y este entraba en su rol y asum¨ªa que deb¨ªa cumplir con la pena. Pero ahora el narco no asume que ha perdido la partida, la gente joven tiene menos miedo y van m¨¢s a lo loco. Embisten y atacan, y se ven fuertes porque est¨¢n reforzados por una parte de la sociedad. Ni?os que atacan a la polic¨ªa con cocteles molotov, y la madre defiende a su hijo que est¨¢ implicado. La agresividad del ¨²ltimo a?o y medio es muy grande y ellos [los narcos] se han envalentonado¡±. El representante vecinal Mena lo redefine: ¡°Es lo que yo llamo la p¨¦rdida del principio de autoridad¡±. El alcalde matiza: ¡°Estos sujetos est¨¢n socializados, te los encuentras tomando tapas y comprando en el hipermercado. Ellos se vanaglorian de ocupar esa posici¨®n¡±.
El ruido medi¨¢tico de la guerra al narco
La L¨ªnea de la Concepci¨®n ha estado este a?o en las noticias por operaciones espectaculares y alijos de droga que han dado una fama a la localidad como punto caliente de la entrada del hach¨ªs en Europa. ?Magnifican los medios el problema? El alcalde, Juan Franco, rechaza quitarle hierro, pero censura la corriente medi¨¢tica de atribuirle cualquier suceso del narco a su localidad: ¡°Lo que pasa aqu¨ª ya es grav¨ªsimo. Que entren unos encapuchados y se lleven a un t¨ªo detenido eso ya es para grabar un cap¨ªtulo de la serie Narcos, pero estoy muy molesto con que, pase lo que pase en cualquier lado de Espa?a, siempre es La L¨ªnea (¡) Hemos estado de feria y no ha habido ni una pelea, ?esto no era la peque?a Colombia?¡±, inquiere.
Francisco Mena, de la coordinadora antidroga Alternativas, critica que se haya pasado de la nula repercusi¨®n a la grandilocuencia entre los periodistas: ¡°Ni tanto ni tan poco. Aqu¨ª hay un problema y durante demasiado tiempo no se han hecho eco de ¨¦l. Todo se quedaba en noticias locales y eran muy pocos medios los que lo hablaban. Hemos pasado de ese extremo al contrario. Sobre todo, las televisiones, en algunos casos, se han extralimitado dando una imagen que no es as¨ª¡±.
El alcalde apunta: ¡°Cuando antes, de forma espor¨¢dica, se hac¨ªan eco los medios la reacci¨®n era criticar porque eso se contaba. Nosotros cambiamos esa din¨¢mica. Siempre pongo el ejemplo del alcoh¨®lico: para salir del problema hay que reconocerlo. Tenemos un problema enorme, pero contando lo que ya es verdad ten¨¦is noticias de lo que quer¨¢is¡±. Y Mena a?ade: ¡°He predicado en el desierto muchos a?os y ning¨²n alcalde lo reconoc¨ªa. Juan [Franco] fue el primero. Sin embargo, ahora ya s¨ª se reconoce el problema, en el momento de que ya se ve afectada la imagen de toda la comarca porque no es solo La L¨ªnea, suceden cosas en otras localidades como Algeciras, Jimena, Castellar o Tarifa. Esto es un problema de todo porque los inversores se piensan que van con pistolas por la calle y los maestros o polic¨ªas no quieren venir¡±.
Seguridad Social paralela
?Han cubierto los narcos el flanco social que el Estado ha dejado de atender en el Campo de Gibraltar? El alcalde Franco se?ala: ¡°Ellos tienen hasta un sistema de Seguridad Social montado y matrimonios enlazados. Van comprando voluntades y de forma r¨¢pida, a un chaval con 15 a?os les dan 1.500 euros para hacer de punto, dile t¨² que se vaya a trabajar de camarero o de pe¨®n¡±. El comisario cree que est¨¢ aceptado entre ciertas pandillas: ¡°Es cierto que ha habido circunstancias de desempleo, pero hay una aceptaci¨®n social hacia el narcotr¨¢fico. Hay un intervalo entre los 16 y los 36 que ven como algo normal dedicarse al narcotr¨¢fico y ven que sus hijos se dedican al negocio familiar. Son generaciones perdidas sin posibilidad de recuperaci¨®n. Es una falta de principios y valores¡±.
Generaciones perdidas
El alcalde es derrotista sobre la posibilidad de rescatar a ciertos j¨®venes ¡°que no tienen remedio¡±. ¡°Son sujetos que no se pueden reinsertar¡±, considera. Con un desempleo superior al 30% como tel¨®n de fondo, la fiscal tambi¨¦n observa un panorama oscuro para ciertos delincuentes que forman las redes del narco y encadenan sentencias condenatorias, siempre por delitos contra la salud p¨²blica: ¡°A m¨ª me cuesta mucho trabajo creer en la reinserci¨®n en el ¨¢mbito del narcotr¨¢fico, porque tengo una hoja hist¨®rico-penal del que entra en prisi¨®n y a los cuatro a?os vuelve a la carga. Coinciden con sus amigos en la prisi¨®n y luego salen y ya tienen montada una colla. Tendr¨ªa que haber unas penas m¨¢s elevadas. Un fardo, 30 kilos. Y en un barco, da igual que sean 30 ¨® 3.000 kilos. No puedo pedir m¨¢s de seis a?os de c¨¢rcel. Y una guarder¨ªa [donde se almacena la droga] si no pasa de 2.500 kilos son cuatro a?os¡±.
Carencias sociales
La L¨ªnea padece un 30% de paro, 8.500 personas de las que el 92% carece de estudios secundarios finalizados. El alcalde protesta porque est¨¢ "harto de clamar en el desierto: aparte del narcotr¨¢fico tenemos la cuesti¨®n del Brexit. Parece que es algo que ya vendr¨¢, pero es que, para nosotros, 11.000 residentes empezaron a cobrar un 17% menos porque cobran en libras y gastan en euros. Llevamos dos a?os con el consumo por los suelos y eso influye en el pago de los impuestos. Desde hace dos a?os pedimos un plan integral".
Mena dispara: "El caldo de cultivo de todo esto es el fracaso y el absentismo escolar y, cuando se entra en este mundo, ya no se sale por una cuesti¨®n meramente econ¨®mica. Cuando un ni?o, por hacer de punto con un tel¨¦fono y una esc¨²ter gana en una noche 600 euros, a ver c¨®mo le dices que se venga a trabajar por 1.200 euros al mes". La fiscal responde: "Pero teniendo ese concepto econ¨®mico, vamos a buscar un lado positivo. ?D¨®nde les duele? El dinero. Llegando a ¨¦l se les puede hacer da?o. Son los procedimientos de blanqueo de capitales". El comisario a?ade: "El tema del blanqueo es una realidad necesaria que tiene que ir asociada a toda investigaci¨®n policial".
El final de la guerra
Mena es optimista sobre la resoluci¨®n de la batalla contra el narco: ¡°Estoy convencido de que este pulso lo ganamos¡±. La fiscal Arroyo tambi¨¦n ve el vaso medio lleno: ¡°Soy positiva. Se est¨¢ trabajando muy duro y muy bien. Estamos persiguiendo el narcotr¨¢fico y hemos ampliado la persecuci¨®n al blanqueo. Se est¨¢ aprendiendo de los errores, porque ha habido fallos. Tenemos que estar igualados, no nos pueden llevar a?os luz¡±. Se suma el comisario: ¡°Los polic¨ªas somos siempre optimistas, si no, mal vamos. Creo que s¨ª podemos acabar con esto, pero no tiene que temblar la mano del legislador. Es muy importante. Luego tiene que haber un soporte de educaci¨®n y medios¡±.
Los efectos ignorados del hach¨ªs
Los efectos del consumo del hach¨ªs han sido tradicionalmente minimizados, hasta que investigaciones recientes han alertado de su dimensi¨®n transcurridos los a?os. ¡°Ahora empezamos a ver los efectos del hach¨ªs: las paranoias, la esquizofrenia, los delirios, el alzh¨¦imer¡ Una persona que consume un tiempo se cree que con un porro no pasa nada. Y ahora el THC [tetrahidrocannabinol] est¨¢ alterado¡±, alerta la fiscal Macarena Arroyo.
Francisco Mena, presidente de la coordinadora Alternativas, que tiene dos comunidades terap¨¦uticas, admite resignado: ¡°La batalla medi¨¢tica la hemos perdido. La sociedad ha perdido la percepci¨®n del riesgo y hay que alertar del grave perjuicio que crea el hach¨ªs, sobre todo consumido a edades tempranas, con 12 o 14 a?os¡±. Mientras, el comisario Francisco L¨®pez abre el foco sobre los efectos de la droga en la sociedad, m¨¢s all¨¢ del deterioro de la salud de las personas. ¡°El narcotr¨¢fico no solo es un da?o contra la salud p¨²blica, sino contra la forma de ingresar capitales, el blanqueo, crea un Estado paralelo y distorsiona el mercado por su ilicitud, crea estructuras de poder paralelo¡±. Y a?ade sobre sus tent¨¢culos en la pol¨ªtica o cualquier otro ¨¢mbito: ¡°El narco no duda en poner un t¨ªo en la alcald¨ªa y genera una sensaci¨®n de impunidad que va m¨¢s all¨¢, cuando se asientan, se sienten impunes en la capacidad de coaccionar, de agredir, de violar a una chica, y eso a niveles extremos lo vemos con los c¨¢rteles en Latinoam¨¦rica. Y aqu¨ª existe porque hay gente que tiene miedo. Desde el instante en que hay gente que tiene miedo ya hay una coacci¨®n¡±.
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