El Gobierno reabre la puerta a vender bombas a Arabia Saud¨ª para mantener un contrato millonario de Navantia

El Gobierno abre la puerta a una nueva rectificaci¨®n, esta vez de un enorme calado pol¨ªtico y econ¨®mico. Espa?a trata de retener el jugoso contrato de 1.813 millones de euros por el que el astillero Navantia construir¨¢ cinco corbetas para Arabia Saud¨ª, que est¨¢ en peligro por la decisi¨®n de Defensa de anular una venta a Riad de 400 bombas pertenecientes al Ej¨¦rcito espa?ol que se firm¨® en 2015, cuando era ministro Pedro Moren¨¦s. Las autoridades saud¨ªes est¨¢n molestas por este anuncio del departamento que dirige Margarita Robles, y el Gobierno apunta que se est¨¢ replanteando ese anuncio. Eso supondr¨ªa una clara desautorizaci¨®n de la ministra, pero sobre todo implicar¨ªa entregar las bombas de precisi¨®n a Arabia Saud¨ª sabiendo que casi con seguridad ser¨¢n utilizadas contra la poblaci¨®n en el conflicto de Yemen. El dilema para el Ejecutivo es complejo, pero el Gobierno insiste en que es "prioritario" el contrato de Navantia, que garantiza unos 6.000 empleos en C¨¢diz. El Gobierno busca una soluci¨®n intermedia, pero en ning¨²n caso se plantea poner en riesgo ese contrato de los astilleros espa?oles, por lo que es probable que la ministra tenga que enmendar su decisi¨®n, que ahora en La Moncloa rebajan como una simple "declaraci¨®n de intenciones".

La portavoz del Gobierno, Isabel Cela¨¢, no lleg¨® a anunciar abiertamente esa marcha atr¨¢s, pero la dej¨® apuntada. Insisti¨® varias veces en que el Gobierno har¨¢ todo lo necesario para mantener "las excelentes relaciones con Arabia Saud¨ª" y el contrato de Navantia. Cela¨¢ repiti¨® que los trabajadores ¡°pueden estar tranquilos¡± porque se va a encontrar una soluci¨®n. "Pueden estar seguros de que el Gobierno est¨¢ con ellos", remat¨®.

Fuentes del Ejecutivo aseguran que la de Defensa no es una decisi¨®n firme ni est¨¢ ejecutada. De momento, explican, es un anuncio en la prensa ¡ªfue adelantado por la cadena SER y confirmado por el ministerio¡ª y se tiene que estudiar en una comisi¨®n interministerial, la JIMDDU, donde podr¨ªa revertirse. La secretaria de Estado de Comercio, Xiana M¨¦ndez, dej¨® claro en una comparecencia en el Congreso que el Gobierno "no pondr¨¢ en riesgo" el contrato de Navantia, apuntando as¨ª hacia una rectificaci¨®n de los planes de Defensa. Los parlamentarios le exigieron que aclarara si la anulaci¨®n de la venta de bombas fue un "globo sonda" de la ministra Robles, pero ella no quiso contestar aunque s¨ª dej¨® claro que el empleo en Navantia es un asunto "prioritario" para el Gobierno.

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Todo indica que Robles se est¨¢ quedando muy sola dentro del Gobierno en este asunto. La vicepresidenta, Carmen Calvo, ya ha entrado a analizar pol¨ªticamente la soluci¨®n, aunque la decisi¨®n definitiva la tomar¨¢ el presidente, Pedro S¨¢nchez.

El problema para el Gobierno es que ahora cualquier decisi¨®n es mala y tiene costes. Seguir vendiendo armas a Arabia Saud¨ª, que ser¨¢n con seguridad usadas contra la poblaci¨®n de Yemen, es un problema para un Ejecutivo progresista apoyado por Unidos Podemos, y ahora se ha puesto este asunto en el foco pol¨ªtico. Pero perder el contrato de Navantia es un problema enorme, y m¨¢s en plena precampa?a en Andaluc¨ªa.

Las fuentes del Gobierno consultadas tambi¨¦n recuerdan que un Gabinete de izquierda como el de S¨¢nchez es sensible a la crisis de Yemen, que ya ha provocado que otros pa¨ªses como Alemania o Canad¨¢ suspendan la venta de armas que iban a ser usadas en ese conflicto. El Ejecutivo busca ahora una soluci¨®n intermedia y cree que la encontrar¨¢.

La venta de las 400 bombas l¨¢ser, de fabricaci¨®n estadounidense, ten¨ªa una importancia estrat¨¦gica para Arabia Saud¨ª, ya que son muy sofisticadas desde el punto de vista tecnol¨®gico y pocos pa¨ªses disponen de ellas. No es f¨¢cil conseguir otro proveedor.?

La cancelaci¨®n de la venta la orden¨® la ministra Robles poco despu¨¦s de aterrizar en Defensa. La opacidad de la operaci¨®n ¡ªresulta muy inusual que el propio Ej¨¦rcito venda armamento en su poder a otro pa¨ªs¡ª y la certeza de que las bombas de precisi¨®n ten¨ªan como destino la guerra de Yemen? aconsejaron el freno inmediato de la entrega, a pesar de que los pagos (9,2 millones de euros) estaban ya desembolsados. Incluso hab¨ªa una empresa de transportes preparada para llevar el armamento a Riad.?

Sin llegar a hablar de ilegalidades, los encargados de revisar esos n¨²meros detectaron varias irregularidades y decidieron paralizar el env¨ªo a las autoridades saud¨ªes, lo que supondr¨¢ devolver el dinero que ya hab¨ªa sido abonado. Aunque el Gobierno pretend¨ªa que se tratara de algo quir¨²rgico, limitado a esa operaci¨®n y sin poner el riesgo el ingente negocio comercial que hay con las ventas de material de defensa a Arabia, parece evidente que la decisi¨®n puede afectar al contrato firmado con Navantia el pasado julio y a otros que ata?en al fabricante europeo de aviaci¨®n Airbus. El Ejecutivo espa?ol sostiene que son cuestiones muy diferentes y no deben conectarse.

Los intereses en juego son enormes. Arabia Saud¨ª es el primer comprador de material militar espa?ol fuera de la OTAN (el quinto si se incluyen todos los pa¨ªses aliados y europeos), con una inversi¨®n de 270 millones de euros el a?o pasado, seg¨²n datos suministrados este viernes por la secretaria de Estado de Comercio. La monarqu¨ªa saud¨ª recibi¨® el 6,2% de todas las exportaciones militares de Espa?a.

Los trabajadores de Navantia en San Fernando (C¨¢diz) se mueven entre la crispaci¨®n y el nerviosismo. La posible cancelaci¨®n del contrato de fabricaci¨®n de las cinco corbetas ha puesto en pie de guerra a Andaluc¨ªa. ¡°El contrato est¨¢ pr¨®ximo a su cancelaci¨®n¡±, ha asegurado sin ambages el presidente del comit¨¦ de empresa, Jes¨²s Peralta. Unos 1.500 empleados han acabado cortando la autov¨ªa que pasa por San Fernando durante casi una hora. Los empleados han mostrado as¨ª su malestar con el anuncio realizado por Robles a principios de semana que afecta a un acuerdo distinto: la venta a Arabia de 400 bombas de precisi¨®n l¨¢ser. Peralta cree que el anuncio ¡°no se ha madurado bien¡±.

El presidente del comit¨¦ de empresa asegura que la decisi¨®n de la ministra ya ha tenido efectos inmediatos: ¡°Un alto cargo militar saud¨ª que ten¨ªa que viajar la semana que viene a Madrid y al astillero ha suspendido su viaje. Lo mismo ha ocurrido con el viaje que Navantia ten¨ªa que hacer a Arabia Saud¨ª¡±. Por el momento, fuentes de Navantia prefieren no hacer declaraciones y tan solo recuerdan que el convenio de las bombas es diferente y afecta a otra empresa que el de las corbetas. Sin embargo, Peralta cree que la decisi¨®n del Gobierno espa?ol va a tener un efecto colateral para un acuerdo valorado en 2.000 millones de euros y que iba a garantizar la carga de trabajo para hasta 6.000 empleados de este astillero militar.?

No son los ¨²nicos que han mostrado su enfado.?En la Junta de Andaluc¨ªa hay malestar por la incertidumbre que se est¨¢ generando ante la posibilidad de que pueda rescindirse el contrato. La visualizaci¨®n de esos resquemores los ha dejado claros la presidenta andaluza, Susana D¨ªaz. ¡°Es un elemento de bastante preocupaci¨®n para C¨¢diz, su bah¨ªa y toda Andaluc¨ªa y as¨ª se lo hemos trasladado al Gobierno de Espa?a que, cuanto antes, tiene que encontrar una soluci¨®n¡±, ha asegurado a trav¨¦s de Twitter.

¡°Me duele much¨ªsimo cuando los derechos humanos entran en colisi¨®n con otros derechos humanos que es el derecho al futuro y el derecho a que suene el pito de la olla en tu casa. Por tanto, es un elemento absolutamente doloroso¡±, asegur¨® el pasado martes el alcalde de? C¨¢diz, Jos¨¦ Mar¨ªa Gonz¨¢lez, Kichi (Podemos). Aunque el regidor se mostr¨® en su d¨ªa a favor de la construcci¨®n de las corbetas, apuesta por ¡°un modelo de desarrollo productivo que no dependa exclusivamente de la industria militar¡±, centrado en las energ¨ªas renovables.?

Peralta duda de la efectividad de dicha medida. ¡°Si nosotros no hacemos las corbetas las har¨¢ otro. Hacemos barcos de guerra desde hace 300 a?os¡±, se?ala el sindicalista, que a?ade que la p¨¦rdida del acuerdo de las corbetas ¡°hundir¨ªa Navantia al completo¡± y que puede tener efectos colaterales en otras empresas espa?olas que tengan acuerdos con Arabia Saud¨ª.?