Los protagonistas de hace un a?o est¨¢n ahora presos o fugados

Carles Puigdemont encabez¨® como president la ofrenda floral del Govern al monumento de Rafael Casanova de la Diada de 2017. Le acompa?aban el vicepresidente Oriol Junqueras y el resto de miembros de su Ejecutivo. Un a?o despu¨¦s, ninguno de ellos figur¨® en la foto oficial. Cinco, entre ellos el propio Puigdemont, est¨¢n huidos de la justicia espa?ola; seis se encuentran en prisi¨®n preventiva; y los tres restantes (Carles Mund¨®, Santi Vila y Meritxell Borr¨¢s) han abandonado la pol¨ªtica tras estar encarcelados.

La causa por rebeli¨®n abierta en el Tribunal Supremo dinamit¨® a la c¨²pula independentista que hab¨ªa impulsado el refer¨¦ndum ilegal del 1-O y la declaraci¨®n de independencia. Tras 11 meses, el alto tribunal se prepara para juzgar a los procesados que se quedaron en Espa?a. Estas son algunas de las claves que marcar¨¢n los pr¨®ximos meses del calendario judicial y del independentismo.

No antes de diciembre. El alto tribunal quiere celebrar cuanto antes el juicio y aspiraba a hacerlo este oto?o, pero ya ha asumido que dif¨ªcilmente podr¨¢ empezar antes de diciembre. Fuentes del caso trabajan con el escenario de hacer antes de Navidad la vista de cuestiones previas y dejar el juicio para el inicio de 2019. Ser¨¢n varios meses, con sesiones de ma?ana y tarde para intentar que no se eternice. Tras la vista del Supremo se celebrar¨¢ la de la Audiencia Nacional, donde est¨¢n procesados por sedici¨®n el exjefe de los Mossos Josep Llu¨ªs Trapero y otras tres personas.

La estrategia de la defensa. Los abogados de los l¨ªderes independentistas encarcelados han asumido que sus clientes no van a salir de prisi¨®n antes del juicio. Los propios interesados parece que tambi¨¦n. A todos ellos les convendr¨ªa que la vista oral se celebrase cuanto antes. Esa perspectiva, sin embargo, no va a marcar su estrategia. Las defensas denuncian, de hecho, que la causa sobre el proc¨¦s ha pecado de ¡°aceleraciones indebidas¡± y que esa rapidez les ha generado ¡°indefensi¨®n¡±. Por eso, anuncian que, antes de que se abra juicio oral, van a plantar batalla. Y van a solicitar, entre otras cosas, la admisi¨®n de pruebas que creen ¡°fundamentales¡± y que no se han tenido en cuenta. De cara al juicio, van a intentar coordinar una estrategia conjunta, aunque admiten que habr¨¢ matices: mientras algunos pondr¨¢n el acento en el trasfondo pol¨ªtico, otros atacar¨¢n los detalles m¨¢s t¨¦cnico-jur¨ªdicos y rebatir¨¢n, por ejemplo, la existencia de los delitos de rebeli¨®n o sedici¨®n.

Las causas catalanas. En paralelo, en Catalu?a se mantienen abiertas otras dos causas por el proc¨¦s. El Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a (TSJC) debe decidir si investiga al vicepresidente de la Generalitat Pere Aragon¨¦s y los diputados de Esquerra Llu¨ªs Salvad¨® y Josep Maria Jov¨¦. Los indicios contra ellos surgen del juzgado de instrucci¨®n 13 de Barcelona, que mantiene investigadas a decenas de personas ¡ªpol¨ªticos de segunda l¨ªnea, empresarios, t¨¦cnicos¡ª en un proceso que comenz¨® con las declaraciones del exjuez Santiago Vidal sobre las supuestas irregularidades cometidas por el anterior Govern. De ese juzgado han salido la mayor parte de las pruebas ¡ªcomo un documento denominado Enfocats y considerado la hoja de ruta de la secesi¨®n, o la agenda personal de Jov¨¦, arquitecto del refer¨¦ndum del 1-O- que han servido para nutrir la causa del Supremo.

Tras la sentencia. En cualquier caso, lo previsible es las acusaciones pidan para los principales encausados elevadas penas de prisi¨®n y una condena en ese sentido previsiblemente abrir¨ªa un nuevo escenario de incertidumbre. El presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha asegurado que el Govern no obedecer¨¢ una posible sentencia condenatoria contra los l¨ªderes independentistas procesados, aunque no ha explicado c¨®mo piensa hacerlo.