¡°No s¨¦ por qu¨¦ la Xunta quiere acabar conmigo¡±

"?Por qu¨¦ me est¨¢n haciendo esto a m¨ª? Soy mayor y quieren acabar conmigo, no s¨¦ por qu¨¦¡±. Cumplidos los 90, Lucila V¨¢zquez ve pasar los meses alojada en una peque?a habitaci¨®n interior de un hotel al que se traslad¨® el pasado agosto tras romperse la cadera, despu¨¦s de que el Gobierno gallego, su casero, clausurase el ascensor del edificio de Ourense en el que vive en alquiler desde 1963.

La Xunta de Galicia, que se hizo con el inmueble en 2001 y quiere destinarlo a oficinas de sus departamentos para ahorrarse los alquileres que ahora paga, lleva desde entonces intentando desalojarla del piso. Tras un fracaso del intento de desahucio por v¨ªa judicial, acab¨® suprimiendo el mantenimiento b¨¢sico del inmueble (los servicios de limpieza y luz) y, finalmente, el pasado enero, clausur¨® el ascensor ¡ªapelando a problemas t¨¦cnicos no resueltos de momento¡ª que le permit¨ªa a la anciana salir y entrar a su cuarto piso tantas veces como quer¨ªa. ¡°Al principio me conformaba con salir por la ma?ana a la calle, com¨ªa algo por ah¨ª y volv¨ªa a la noche pero en cuanto me romp¨ª la cadera, este verano, me tuve que encerrar en casa, as¨ª que acab¨¦ viniendo al hotel¡±, cuenta, agitada, desde la cafeter¨ªa del establecimiento en el que se aloja.

Est¨¢ a escasos metros del piso de su hija, en el que tampoco puede instalarse porque no est¨¢ acondicionado para ella. ¡°Tanto en mi casa como en el hotel tengo ducha y mi hija tiene una ba?era en la que no puedo meterme¡±, explica ejemplificando alguno de los inconvenientes. Consciente de que tiene al d¨ªa sus pagos del alquiler y el contrato en vigor, la mujer cree que est¨¢ siendo perseguida. La Fiscal¨ªa, tambi¨¦n.

El fiscal jefe de Ourense, Florentino Delgado, se ha querellado contra dos cargos del Ejecutivo de Alberto N¨²?ez Feij¨®o (PP): la secretaria general t¨¦cnica, Socorro Mart¨ªn Hierro y el subdirector de Patrimonio de la Conseller¨ªa de Facenda. Los acusa de acoso inmobiliario. Sostiene la Fiscal¨ªa que el Gobierno gallego est¨¢ utilizando con la inquilina ¡°medidas de compulsi¨®n irregulares y no amparadas en Derecho, con dejaci¨®n consciente y manifiesta de las obligaciones¡± de propietario-arrendador. Asegura adem¨¢s el ministerio p¨²blico que la supresi¨®n de los servicios b¨¢sicos del edificio, convertido en ¡°insalubre¡±, se produce tras fracasar en el desahucio judicial, alude al intento de la Xunta de ¡°forzar y doblegar¡± la voluntad de la anciana para que abandonara el piso o aceptara un acuerdo ¡°sin especificar¡± y que ¡°de antemano sab¨ªa que no iba a ser concretado ni aceptado porque habr¨ªa de ser con condiciones peores que la situaci¨®n actual¡±.

Feij¨®o, que se ha mostrado muy sorprendido por la querella, asegura que la Xunta solo busca ¡°recuperar un bien de la comunidad¡±. ¡°No se trata de recuperar un inmueble para altos cargos, sino para el patrimonio de la comunidad, que es bien distinto¡±, ha se?alado para salir en defensa de los funcionarios acusados. ¡°S¨¦ perfectamente que tienen absoluto rigor en sus decisiones y son honorables¡±, ha destacado, asegurando que ¡°por supuesto¡± que los defender¨¢. ¡°Porque no me parece aceptable que se diga que quieren cometer delitos¡±. Lucila V¨¢zquez lo escucha atentamente desde la cafeter¨ªa del hotel y se remueve en la silla. ¡°?Se imaginan estos se?ores de la Xunta que les hicieran lo mismo a sus madres?¡± ¡°?Se imaginan lo que es hacerse mayor? No s¨¦ si alguno de ellos podr¨ªa mantenerme la mirada; no la tienen alta¡±, sentencia.