El Gobierno asegura ahora que Franco no ir¨¢ en ning¨²n caso a La Almudena

El Gobierno ha dado un giro de 180 grados en el complejo asunto del entierro de los restos del dictador Francisco Franco despu¨¦s de la reuni¨®n en Roma de la vicepresidenta Carmen Calvo con el secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin. Si hasta ahora el Ejecutivo dec¨ªa que no pod¨ªa hacer nada para impedir que el dictador fuera enterrado en catedral de La Almudena, como quiere la familia, Calvo ahora se?ala que el Ejecutivo ¡°tiene mecanismos¡±, a trav¨¦s de la ley de memoria hist¨®rica, para impedir que los restos acaben all¨ª, y as¨ª se lo explic¨® al n¨²mero dos del Papa. Los restos no ir¨¢n en ning¨²n caso a la cripta de La Almudena, seg¨²n explic¨® la vicepresidenta, que dijo que entre la Iglesia y el Gobierno est¨¢n buscando una salida para que vayan a otro lugar.

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Sin embargo, el Vaticano, en un comunicado de correcci¨®n nada habitual, ha matizado a la vicepresidenta asegurando que el cardenal Pietro Parolin no se opone a la exhumaci¨®n de Francisco Franco, si as¨ª lo han decidido las autoridades competentes, "pero en ning¨²n momento se pronunci¨® sobre el lugar de la inhumaci¨®n¡±. La discrepancia no parece estar tanto en el fondo de la cuesti¨®n, esto es que no vaya a La Almudena, como en la implicaci¨®n activa de las dos instituciones. La Iglesia quiere que sea el Gobierno, bien convenciendo a la familia o bien a trav¨¦s de una imposici¨®n legal, el que impida que los restos vayan a la catedral. Por eso responde con el matiz cuando el Ejecutivo trata de decir que la decisi¨®n es conjunta.

El giro del Ejecutivo es muy importante. Hasta ahora, tanto el presidente del Gobierno como la vicepresidenta hab¨ªan asegurado que el Ejecutivo no iba a decirle a la Iglesia d¨®nde se pod¨ªa enterrar o no al dictador. "No podemos m¨¢s que respetar la voluntad de la familia", dijo la vicepresidenta el 12 de octubre. "La inhumaci¨®n no nos corresponde", a?adi¨® la portavoz del Ejecutivo, Isabel Cel¨¢a, la semana pasada. La realidad es que el Gobierno estaba sondeando al Vaticano y negociando para buscar una salida. Calvo finalmente ha admitido la verdad, despu¨¦s de decir lo contrario, tras comprobar en la reuni¨®n de este lunes que tambi¨¦n la Iglesia est¨¢ muy inc¨®moda con la posibilidad de que Franco vaya a La Almudena. "El propio cardenal Osoro [arzobispo de Madrid] dijo que no les parece bien [que vaya a La Almudena], acordamos [con el Vaticano] trabajar de manera conjunta para encontrar una salida que obviamente no puede ser La Almudena", ha rematado la vicepresidenta.

Los dos parecen interesados en encontrar una soluci¨®n, pero la Iglesia reclamaba que sea el Gobierno el que facilite las cosas, impidiendo de forma legal el entierro y asumiendo as¨ª el coste. El Ejecutivo ped¨ªa que fuera la Iglesia la que convenciera a la familia. Al final, todo indica que se ha llegado a una soluci¨®n intermedia en la que la Iglesia admite indirectamente que no le gusta la idea de que vaya all¨ª, y probablemente mantendr¨¢ alg¨²n contacto con los Franco para intentar convencerlos, pero es el Ejecutivo el que toma la iniciativa apelando a la ley de memoria hist¨®rica, que impide la exaltaci¨®n del franquismo. Aun as¨ª, la batalla no ha hecho m¨¢s que empezar y todo depende de que la familia, que compr¨® un espacio en la cripta donde ya est¨¢ enterrada la hija del dictador, quiera o no llegar hasta el final. Si deciden recurrir cualquier decisi¨®n administrativa que le impida enterrar a Franco en la cripta, el asunto acabar¨¢ finalmente en los tribunales con el riesgo que eso implica. El Gobierno dec¨ªa haber previsto todos los escenarios, pero ahora parece evidente que entre ellos no estaba la jugada de la familia de pedir el entierro en La Almudena.

Calvo ha desarrollado en los pasillos del Congreso lo que ya apuntaba el d¨ªa anterior el comunicado que emiti¨® el Gobierno tras el encuentro en el Vaticano. All¨ª ya se aseguraba que el cardenal Parolin hab¨ªa garantizado a la vicepresidenta que la Iglesia no se iba a oponer a la exhumacio?n de los restos de Francisco Franco del Valle de los Cai?dos y que se buscar¨ªa una "soluci¨®n" para la inhumacio?n. Esto ya apuntaba, como explic¨® la vicepresidenta, que ambos est¨¢n de acuerdo en que catedral madrile?a no es el sitio adecuado.

"Les advertimos de que vamos a aplicar nuestra legislaci¨®n. No pueden estar los restos de Franco en ning¨²n lugar donde puedan ser enaltecidos u homenajeados. Eso est¨¢ prohibido en nuestra legislaci¨®n. Esta aplicaci¨®n se tiene que hacer en cualquier lugar del territorio. El cardenal entendi¨® que deb¨ªamos buscar una salida para que los restos de Franco est¨¦n en un lugar con dignidad pero que no puedan ser objeto de homenaje de ning¨²n tipo. El Estado tiene instrumentos para que esto no ocurra", sentenci¨® Calvo.

Cuando se le pregunt¨® c¨®mo se puede impedir que se entierre en la cripta, un lugar que seg¨²n la Iglesia es diferente a la catedral y por tanto puede entenderse como privado, Calvo fue tajante: "La catedral de La Almudena no es titularidad privada, es de la Iglesia. El Estado tiene que garantizar que no se enaltezca a Franco. Sus restos deben estar en un lugar donde no se produzcan manifestaciones".

Fiscalidad e inmatriculaciones

La reuni¨®n fue m¨¢s lejos, seg¨²n explic¨® la vicepresidenta. El Gobierno no solo comunic¨® que tiene intenci¨®n de modificar el C¨®digo Penal para caminar hacia la imprescriptibilidad de los delitos de abusos contra menores. Tambi¨¦n hablaron a fondo de fiscalidad y Calvo anunci¨® que se va a empezar a cobrar el IBI a los inmuebles de la Iglesia que no se usan para el culto, como se hace en Italia. "El secretario de Estado entendi¨® que las exenciones fiscales para lugares no de culto no son sostenibles. No cabe en nuestra pol¨ªtica fiscal que la Iglesia cat¨®lica no tribute. Entendieron perfectamente esta propuesta del Gobierno", insisti¨®.

Por ¨²ltimo, sobre inmatriculaciones, otro asunto muy delicado, Calvo fue algo m¨¢s suave. Ambos acordaron crear una comisi¨®n para evaluar los inmuebles que han sido registrados en los ¨²ltimos a?os. "Hablamos de la puerta que abri¨® el se?or Aznar para que la Iglesia inmatriculara los bienes. La propia Iglesia admite que puede haber habido excesos. Le propuse que antes de que se cierre la lista miremos los inmuebles que no pueden ser admitidos como bienes de la Iglesia cat¨®lica. Tambi¨¦n le dije que algunos inmuebles simb¨®licos como la mezquita de C¨®rdoba necesitan una particular salida. Les ped¨ª que hubiera una reflexi¨®n", sentenci¨® la vicepresidenta.