Condenados cinco miembros de Reconstrucci¨®n Comunista como grupo criminal

La Audiencia Nacional ha condenado a penas de entre seis meses y tres a?os y medio de prisi¨®n a cinco miembros de Reconstrucci¨®n Comunista (RC), un peque?o partido de ideolog¨ªa marxista leninista por delitos de pertenencia a grupo criminal y tenencia de armas prohibidas. Dos de los integrantes de esta formaci¨®n de ultraizquierda, implantada en Madrid y Valencia, viajaron a Siria e Irak entre diciembre de 2014 y junio de 2015 para luchar contra el Estado Isl¨¢mico. El tribunal absuelve a los acusados del delito de tenencia de explosivos, ya que las sustancias y elementos, como petardos, pilas, nitrato pot¨¢sico y az¨²car que la polic¨ªa hall¨® en su sede no estaban dispuestos ni bastaban para elaborar un artefacto.

El tribunal absuelve tambi¨¦n al sexto acusado en el juicio, el ciudadano kurdo Nizzametin Gul, del delito de enaltecimiento del terrorismo de que estaba acusado. Gul hab¨ªa exhibido banderas del Partido de los Trabajadores del Kurdist¨¢n (PKK), formaci¨®n considerada terrorista. Sin embargo, el tribunal considera que esta exhibici¨®n "no supone ninguan alarma social ni entra?a alteraci¨®n de la paz p¨²blica".

La Secci¨®n Primera de lo Penal de la Audiencia rechaza la petici¨®n de la fiscal¨ªa de ilegalizar Reconstrucci¨®n Comunista en aplicaci¨®n de la Ley de Partidos Pol¨ªticos. El tribunal afirma que el partido ¡°se encuentra formalmente constituido¡± y considera que aunque sus integrantes, incluidos sus l¨ªderes, hayan cometido delitos y exhiban actitudes violentas, la responsabilidad no trasciende a la formaci¨®n. ¡°El partido pol¨ªtico no consta que defienda en su ideario planteamientos violentos y debe considerarse ajeno a estos delitos¡±.

El partido marxista leninista Reconstrucci¨®n Comunista se cre¨® en 2009 y se inscribi¨® en el registro de partidos del Ministerio del Interior en 2014. A finales de ese a?o se buscaron voluntarios para desplazarse a Siria e integrarse en una de las unidades de protecci¨®n del pueblo kurdo (YPG) para combatir al Estado Isl¨¢mico. Para ello fueron seleccionados dos de los acusados, ?lvaro Fern¨¢ndez y Pablo D¨ªaz Ocampo, quienes viajaron a Siria y despu¨¦s a Irak, donde se integraron en una YPG. All¨ª recibieron adiestramiento militar y permanecieron hasta junio de 2015.

Entre 2014 y 2015 los acusados Roberto Vaquero, secretario general del partido, Carlos Javier del Val y Adri¨¢n Delgado asumieron que la defensa de sus ideas pol¨ªticas requer¨ªa el empleo de la fuerza y la violencia frente a las personas que no compartiesen su ideolog¨ªa o ¡°incluso frente a aquellos militantes que quisiesen apartarse la l¨ªnea pol¨ªtica que ellos marcaban¡±. Para ello decidieron que era necesario disponer de armas blancas que les permitieran la confrontaci¨®n con sus adversarios y adiestrarse en defensa personal.

Comienzan entonces, dice la sentencia, a proveerse de navajas, cuchillos y otros mecanismos de defensa y ataque y a salir siempre a la calle con ellos, ¡°utiliz¨¢ndolos en cualquier concentraci¨®n o acto en que se encontrasen a personas a las que consideraban adversarios pol¨ªticos¡±. A?ade que cuando los otros dos acusados regresaron de Siria los incorporaron a este grupo.

La Sala subraya la cantidad de armas incautadas en los domicilios de los acusados cuando fueron detenidos en enero de 2016, entre ellas un machete, un hacha, numerosos cuchillos, dos catanas y una defensa extensible, entre otros efectos. Para los magistrados, el n¨²mero de armas intervenidas, junto con las conversaciones que mantienen entre ellos, en las que se mencionan peleas, no son ¡°fanfarronadas ni bravuconadas¡±.

¡°Los acusados tiene un cierto n¨²mero de armas blancas, adem¨¢s de otros instrumentos, porque los est¨¢n usando, convirtiendo lo que tendr¨ªan que ser focos de discusi¨®n pol¨ªtica en enfrentamientos f¨ªsicos violentos, donde las navajas sustituyen a las palabras¡±, explican los jueces, que apuntan que hab¨ªan iniciado la v¨ªa del ¡°uso de la violencia¡±. Agrega que los acusados se pusieron de acuerdo para protagonizar acciones violentas contra sus adversarios y que forman uno de los grupos de que desarrollan esa violencia.