Un juez proh¨ªbe a un hombre mirar fijamente a unos vecinos a los que acosaba
La denunciante ha conseguido una orden de alejamiento tras dos a?os de ¡°tortura diaria¡±
Ni tirar huevos, ni hacer pintadas, ni colgar carteles. Ni siquiera mirar a sus vecinos. Es la condena que la Audiencia Provincial de Murcia ha ratificado para un hombre que, durante dos a?os, no ha dejado de acosar a diario a sus vecinos de rellano y con los que no podr¨¢ mantener ning¨²n tipo de contacto durante seis meses, adem¨¢s de pagar una multa de 180 euros por ¡°coacciones leves¡±.
La denunciante, que prefiere mantenerse en el anonimato por miedo a futuras represalias, ha explicado en una conversaci¨®n telef¨®nica con EL PA?S el ¡°calvario¡± que ha sufrido desde que, hace ahora dos a?os, tras dejar su coche en el garaje del edificio, sus tres hijos, menores de edad, le dijeron que el vecino les estaba sacando la lengua ¡°de forma obscena¡±.
¡°Llev¨¢bamos 18 a?os viviendo en el edificio y ¨¦l era el t¨ªpico vecino raro. No saludaba a nadie, estaba peleado con toda su familia y hab¨ªa causado ya problemas en la comunidad, haciendo pintadas y destrozos en las zonas comunes. Les dije a los ni?os que no hicieran caso y lo dej¨¦ pasar¡±, relata. Pero los gestos obscenos hacia los menores continuaron repiti¨¦ndose y fueron a m¨¢s cuando una tarde, asomado a su balc¨®n, les ense?¨® el trasero y les amenaz¨® con tirarles huevos.
La madre lo denunci¨® en comisar¨ªa al d¨ªa siguiente y ¡°a ra¨ªz de esa denuncia, empez¨® el martirio¡±, asegura. O lo que es lo mismo: c¨¢scaras de huevos a en la puerta de su piso, carteles y dibujos pegados en su vivienda y en su coche, escupitajos en el veh¨ªculo, dibujos de ni?os desnudos, llamadas al timbre de madrugada y una constante obsesi¨®n de que estaba siendo perseguido por un amigo de la familia.
Con esos hechos, la familia interpuso una segunda denuncia, y una tercera cuando, adem¨¢s de esas coacciones, el vecino comenz¨® a perseguir a la denunciante cuando hac¨ªa la compra en el supermercado. Todas ellas se saldaron con sentencias que le condenaban a multas de unos 100 euros, excepto en el caso de exhibicionismo ante los menores, a¨²n en tr¨¢mites, pero ninguna sirvi¨® para suavizar la situaci¨®n, sino m¨¢s bien al contrario.
La sentencia actual es fruto de la cuarta denuncia de la familia: el vecino lleg¨® a tirar del pelo a la mujer en julio de 2017 y la justicia dict¨® esta peculiar ¡°orden de alejamiento¡± durante seis meses, en los que la Audiencia Provincial condena al acusado a evitar cualquier contacto con los denunciantes hasta el punto de prohibirle incluso ¡°mirar fijamente¡± a la vecina ni a sus hijos.
Para el abogado de la familia, Vicente Sanmart¨ªn Aisa, se trata de una sentencia novedosa, pues este tipo de coacciones suelen ser tratadas como faltas que se penan con multas casi en exclusiva. En su opini¨®n, las ¨®rdenes de alejamiento contra vecinos solo se establecen en casos muy extremos, ya que es muy dif¨ªcil evitar un contacto real sin echar a la persona implicada de su vivienda. Por eso, se siente muy satisfecho con esta sentencia, que ha cumplido con las expectativas de la denunciante.
No obstante, y aunque satisfecha, la familia ha acabado por abandonar el edificio y mudarse, ¡°principalmente por los ni?os¡±, asegura, que viv¨ªan con ¡°miedo constante¡±. ¡°Te sientes impotente, porque la justicia te da la raz¨®n, pero el acosador sigue viviendo a tu lado. Siempre tienes miedo. Acabas psicol¨®gicamente destrozada¡±, ha lamentado. Por eso, ha animado a cualquier persona que sufra una situaci¨®n similar a que acuda a los tribunales, para que se pueda crear jurisprudencia que ayude a terminar con este tipo de acosos vecinales.
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