Cospedal, punto final a un camino de espinas

¡°Va a ser un camino de espinas y rosas¡±, anticip¨® Mar¨ªa Dolores de Cospedal?(Madrid, 1965), cuando, en 2008, se convirti¨® en la primera mujer en ocupar la secretar¨ªa general del PP. La portavoz popular en el Congreso, Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa, present¨® a la nueva n¨²mero dos de la formaci¨®n, al igual que ella, abogada del Estado, como ¡°una mujer moderna, con una capacidad de trabajo inmensa¡±. ¡°?Qui¨¦n nos iba a decir que ¨ªbamos a estar donde estamos ahora?¡±, declar¨® la que iba a ser, diez a?os despu¨¦s, su rival en la carrera para suceder a Mariano Rajoy. La exvicepresidenta se retir¨® el pasado septiembre y Cospedal lo ha hecho este lunes?tras la difusi¨®n de sus conversaciones con el comisario encarcelado Jos¨¦ Manuel Villarejo que revelan, entre otras cosas, c¨®mo encarg¨® un informe para investigar a su compa?ero de partido Javier Arenas. ¡°Pero nada de lo que ha pasado en los ¨²ltimos diez a?os en el PP se explica sin el enfrentamiento entre ambas. Si Cospedal se va, dejar¨¢ un partido tranquilo por primera vez en mucho tiempo¡±, afirmaba la pasada semana un veterano cargo popular.

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El ¡®caso Cospedal¡¯ incomoda y mucho a Casado

A diferencia de Santamar¨ªa, Cospedal s¨ª tuvo, desde muy joven, vocaci¨®n pol¨ªtica. A los 17 a?os, ayud¨® a su padre, Ricardo de Cospedal, cuando se present¨® por el Partido Reformista, liderado por Miquel Roca. El batacazo paterno no la desanim¨®. Prepar¨® en dos a?os la oposici¨®n para ser abogada del Estado, empez¨® a trabajar en la Administraci¨®n, y pronto dio el salto del t¨¦cnico al pol¨ªtico. Fue en 1996, y de la mano, precisamente, de Javier Arenas, a quien a?os despu¨¦s pidi¨® investigar, como han revelado ahora las grabaciones de Villarejo. Pero aquella no fue la ¨²nica carambola pol¨ªtica de su carrera.

En 2005, Esperanza Aguirre la nombr¨® consejera de Obras P¨²blicas y Transportes de Madrid en sustituci¨®n de Francisco Granados ¡ªposteriormente encarcelado por el caso P¨²nica¡ª, que acababa de ser ascendido a consejero de la presidencia. ¡°Apoyo a Rajoy, pero no voy a apu?alar a Aguirre¡±, dijo Cospedal un mes antes de convertirse en secretaria general del PP tras el congreso de 2008 en Valencia, en el que la presidenta madrile?a hab¨ªa intentado moverle la silla al l¨ªder del partido.

Cospedal y Santamar¨ªa despidieron a ?ngel Acebes y Eduardo Zaplana y se entregaron a una misi¨®n compartida: enterrar el aznarismo. Pero su rivalidad fue creciendo, dividi¨® primero al partido, y luego al Gobierno, en dos, y termin¨® entregando la presidencia del PP al heredero pol¨ªtico de Aznar, Pablo Casado.

En 2011, Cospedal logr¨® hacerse con el Gobierno de un viejo basti¨®n socialista, Castilla-La Mancha, y lo compatibiliz¨® con la secretar¨ªa general del PP. Esa acumulaci¨®n de responsabilidades fue generando malestar en el partido y se recrudeci¨® al ser nombrada, en 2016, ministra de Defensa. El congreso del PP de 2017 lo puso de manifiesto al presentar Francisco Risue?o, miembro del PP de Castilla-La Mancha, la llamada ¡°enmienda antiCospedal¡±, que ped¨ªa impedir la acumulaci¨®n de cargos. Ella infravalor¨® la amenaza y gan¨® la votaci¨®n por apenas 25 votos con alg¨²n grito de ¡°pucherazo¡± entre el p¨²blico, compuesto por compromisarios del partido.

El pasado julio, la secretaria general del PP, es decir, la due?a del aparato del partido, cay¨® eliminada en la primera vuelta de las primarias. Cospedal hab¨ªa iniciado su campa?a criticando la aplicaci¨®n del 155 en Catalu?a y tratando de restar puntos a Casado sugiriendo que detr¨¢s de su candidatura estaba Aznar. Y la termin¨® reuniendo a los ministros del clan antisoraya en una comida para arropar al que iba a ser nuevo l¨ªder del PP, el mismo que extender¨ªa una alfombra roja para que el antiguo presidente de honor del partido volviera por todo lo alto a la sede de G¨¦nova 13. Esos ¨²ltimos movimientos la distanciaron definitivamente de Rajoy. El viernes, Cospedal fue la ausencia m¨¢s comentada en el funeral por su padre en Pontevedra, aunque s¨ª estuvo en el tanatorio.

Tambi¨¦n durante las primarias, Cospedal reivindic¨® que ella s¨ª hab¨ªa ¡°dado la cara¡± en los momentos m¨¢s duros del partido, aunque durante un tiempo cedi¨® las comparecencias inc¨®modas a Carlos Floriano. A su pesar, figurar¨¢ en cada resumen de su carrera su retorcida explicaci¨®n del famoso ¡°despido en diferido¡±del tesorero Luis B¨¢rcenas. Aquel a?o, 2013, Cospedal tambi¨¦n hab¨ªa dicho: ¡°En el PP, quien la hace, la paga. Que cada palo aguante su vela¡±. Varios cargos populares que ahora conf¨ªan en que dimita para poder retomar su agenda pol¨ªtica han recordado estos d¨ªas aquella frase. Cospedal, no obstante, apoy¨® a Jos¨¦ Manuel Soria, Rita Barber¨¢ y Cristina Cifuentes en sus respectivos esc¨¢ndalos hasta el final.

¡°Lo est¨¢ pasando muy mal, pero es muy dura¡±, afirma un cargo popular que se pregunta por qu¨¦ Cospedal, sabiendo que esas grabaciones de Villarejo exist¨ªan, se ha arriesgado a llegar hasta aqu¨ª. ¡°Tuvo mucha suerte de que esto no saliera antes. Ya estaba tocada por la fama de su marido, que se paseaba por G¨¦nova como Pedro por su casa¡±, a?ade. En el PP hay quien piensa que se arriesg¨® por culpa de esa rivalidad con Santamar¨ªa, pero pocos dudan de que tambi¨¦n para ella ha llegado el final de su carrera pol¨ªtica. La ¨²ltima grabaci¨®n de difundida este lunes precipit¨® finalmente su dimisi¨®n.