Almer¨ªa, la depresi¨®n de una tierra emprendedora
La esquinada ubicaci¨®n geogr¨¢fica y el car¨¢cter poco reivindicativo de sus habitantes dejan fuera de foco la provincia y sus problemas
El psic¨®logo y dibujante Miguel Arranz diagnostica el ¨¢nimo de los almerienses: ¡°depresi¨®n leve¡±. El aislamiento por la falta de infraestructuras, especialmente el tren, o la inquietud de no tener garantizada el agua en una provincia cuyo producto interior bruto depende en un 40% de la agricultura, quedan fuera del foco de atenci¨®n nacional e incluso del debate regional andaluz. A esto se suma que, sea por ese estado de des¨¢nimo del que habla Arranz, o por un car¨¢cter resignado, son poco dados a salir a protestar, seg¨²n coinciden los entrevistados para este reportaje.
¡°El ciudadano de Almer¨ªa es muy de plantearse ?Para qu¨¦ protestar?... a ver si al final nos quitan el tren del todo¡±, expone Arranz. El olvido de las administraciones es un tema recurrente en las vi?etas que publica en La Voz de Almer¨ªa, con mensajes como ¡°Almer¨ªa t¨®o lejos¡±.¡°Estamos hablando de un destino tur¨ªstico ?C¨®mo vamos a enganchar a la gente si es m¨¢s barato irse a Londres en avi¨®n?¡±, se pregunta. ¡°No es una provincia f¨¢cil orogr¨¢ficamente, pero ya nos toca¡±.
#Almer¨ªa, la isla de las comunicaciones. Aviones por las nubes y trenes de pesadilla @fomentogob @FomentoAND. Genial siempre @ArranzMiguel pic.twitter.com/7ifBcLaXfj
— MesaFerrocarrilAL (@MesaFerrocarril) July 17, 2018
Almer¨ªa no es una provincia de paso. ¡°Primero hay que saber d¨®nde est¨¢ y luego hay que venir¡±, bromea Jos¨¦ Mar¨ªa Rodr¨ªguez, director del parque tem¨¢tico Oasis MiniHollywood, situado en el desierto de Tabernas, a 40 kil¨®metros de la capital. ¡°Es como Teruel, sabes que existe, pero cuando llegas te sorprendes de todo lo que hay, los invernaderos, la industria del m¨¢rmol que se ha reinventado y se ha convertido en todo un motor econ¨®mico, el arrastre del cine", enumera.
LAS DIFERENCIAS ENTRE LAS PROVINCIAS ANDALUZAS
Es la segunda provincia andaluza con la renta per c¨¢pita m¨¢s alta (18.466 euros frente a los 18.477 de la primera, que es Sevilla). Con un voto tradicional de derechas, el PP siempre la ha reivindicado como uno de sus feudos.? Su sentimiento identitario es distinto. Fue la ¨²nica provincia donde no prosper¨® el refer¨¦ndum de autonom¨ªa del 28 de Febrero de 1980. En las elecciones andaluzas del 2-D se eligen 12 de los 109 parlamentarios. En la anterior edici¨®n, PP y PSOE empataron a cinco. Ciudadanos y Podemos lograron un representante. El bar¨®metro del Centro de Investigaciones Sociol¨®gicas para las auton¨®micas de 2018 dibuja un escenario que pasa por los pactos y otorga un diputado al partido de extrema derecha Vox, el ¨²nico en toda Andaluc¨ªa.
Las pocas pancartas que se han levantado en los tres ¨²ltimos a?os han sido para reclamar una buena comunicaci¨®n ferroviaria. Un grupo de ¡°siete u ocho loquillos¡± que quer¨ªan salir a la calle para concienciar a los almerienses de que no se pod¨ªan conformar con las conexiones por carretera cre¨® en 2015 la plataforma c¨ªvica Mesa del Ferrocarril. Tres a?os despu¨¦s, Jos¨¦ Carlos Tejada, hist¨®rico sindicalista local, reconoce cierta envidia sana de los vecinos de Murcia, que han presionado y conseguido el soterramiento. ¡°Si los almerienses recapacitaran un poco, saldr¨ªan m¨¢s a la calle¡±. La plataforma, de la que forman parte casi 200 colectivos ¡ªentre los que hay asociaciones, empresarios del m¨¢rmol, colegios profesionales y 70 ayuntamientos¡ª prepara nuevas acciones. ¡°El presente del tren en Almer¨ªa es calamitoso, estamos hartos de las promesas, de la falta de rigor pol¨ªtico¡±.
Tejada describe con profusi¨®n el ¡°desastroso panorama¡± del servicio convencional: viajes interminables (siete horas para llegar hasta Sevilla, otras siete a Madrid) o la yincana de ir combinando hasta tres autobuses y dos trenes para llegar desde Almer¨ªa a Sevilla. ¡°En los ¨²ltimos cinco meses se han acumulado 35 aver¨ªas y retrasos. Extremadura se est¨¢ quejando, pero si hay una provincia maltratada por el tren somos nosotros¡±.
Desde el pasado mi¨¦rcoles, 14 de noviembre, el ferrocarril de Almer¨ªa ha alcanzado un nuevo hito: no llega hasta la capital por unas obras de soterramiento que durar¨¢n, en principio, un a?o. Esta nueva desviaci¨®n suma tiempo de viaje e incomodidades. Los trenes salen y llegan a la estaci¨®n de Hu¨¦rcal de Almer¨ªa, un municipio situado a 6,5 kil¨®metros de la capital. La sala de espera y los ba?os son barracones de obra. La conexi¨®n con la capital se hace en autobuses. ¡°En 2019, Almer¨ªa ser¨¢ la capital gastron¨®mica de la tapa y quienes se bajen del tren se llevar¨¢n esta imagen¡±, se lamenta Tejada.
El AVE, para 2023
El AVE, toda una esperanza para el transporte de viajeros y mercanc¨ªas, es el futuro. La ¨²ltima promesa del Gobierno fijaba su llegada para 2023. El subdelegado del Gobierno, Manuel de la Fuente (PSOE), asegur¨® el pasado jueves de que se cumplir¨¢n los plazos que marc¨® Fomento durante el Gobierno del PP. En unas jornadas organizadas por la Mesa del Ferrocarril y la Universidad de Almer¨ªa, el coordinador adjunto de infraestructura del Corredor Mediterr¨¢neo, Antonio Vicente S¨¢nchez, representante del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), se mostr¨® comprensivo con el malestar ciudadano por la situaci¨®n de las infraestructuras ferroviarias y mantuvo que el proyecto de la alta velocidad ¡°va en serio¡±. Seg¨²n sus declaraciones, la inversi¨®n (3.259 millones) ya est¨¢ disponible. "El transbordo en Hu¨¦rcal de Almer¨ªa es un incordio, pero as¨ª la obra se har¨¢ m¨¢s r¨¢pido", explica por tel¨¦fono.
¡°De aqu¨ª salen una media de 1.000 tr¨¢ileres diarios cargados de hortalizas, pero si no tenemos el agua garantizada no tiene que venir el tren¡±, resume Jos¨¦ Antonio Fern¨¢ndez, portavoz de la Mesa del Agua, una plataforma formada en 2016 por los usuarios de agua de riego de la provincia, entre ellos regantes, colectivos del sector empresarial y agr¨ªcola.
Fern¨¢ndez cree que esta voz ¨²nica para abordar los problemas del d¨¦ficit h¨ªdrico, que estima en 190 hect¨®metros c¨²bicos, ha logrado que los pol¨ªticos escuchen. Buscan abaratar el precio del agua, algo que pasa por usar m¨¢s agua embalsada y menos desalada, y mejorar las infraestructuras que la transportan, una tarea compleja en la que hay que poner de acuerdo a diferentes administraciones. Todo, para mantener el modelo de Almer¨ªa. ¡°Aqu¨ª no hay grandes terratenientes. En la comarca de N¨ªjar, las zonas de invernaderos son familiares, somos peque?os agricultores que nos constituimos como cooperativas, pero queremos decir que estamos aqu¨ª, que producimos, que hemos salido de la nada y somos emprendedores¡±, argumenta.
Y de vuelta a la depresi¨®n almeriense, el psic¨®logo Arranz marca unas pautas. ¡°Urge un tratamiento. Se combate con actividad, diciendo ¡®yo me merezco esto¡±, prescribe.
Fuga de especialistas m¨¦dicos
En la esquina de la esquina est¨¢ el hospital comarcal de La Inmaculada, un centro de la Junta situado en Hu¨¦rcal Overa (18.600 habitantes). Atiende a unos 140.000 habitantes de la zona norte de Almer¨ªa, la menos poblada, y padece un mal recurrente: no logra cubrir las plazas de oftalm¨®logos, otorrinos o dermat¨®logos, algo que obliga a sus pacientes a desplazarse unos cien kil¨®metros hasta la capital o a Granada.
La gerente del hospital, Macarena Mar¨ªn, habla de una ¡°alta rotaci¨®n¡± ¡ªlos m¨¦dicos aguantan poco tiempo en el centro¡ª que afecta a especialidades en las que suelen compatibilizar su actividad con una consulta privada, algo que no es rentable en este entorno y que tambi¨¦n ocurre en otros lugares, como Huelva. Confluyen otros factores, como que no hay especialistas suficientes para llenar todas las plazas. Y quienes logran una plaza, prefieren trabajar en las capitales.
Los sindicatos consultados piden que se incentive econ¨®micamente a estos m¨¦dicos para que se queden. ¡°O les pones 500 euros, como ayuda, por ejemplo, para la vivienda, o no se vienen¡±, explica Antonio Moreno, de CSIF. Los contratos ¡°m¨¢s jugosos", que pasen de los tres meses, son otra opci¨®n, sugiere Herminia Palenciano, vocal de CC OO que lleva m¨¢s de 35 a?os en el centro huercalense. ¡°Siempre ha sido un hospital de paso y si no tienes nada que te ate, pues te vas a otro lugar con m¨¢s movimiento¡±, resume. ¡°El que no tiene arraigo se marcha¡±, coincide el presidente del Sindicato M¨¦dico de Almer¨ªa.
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