El padre de Laura Sanz: ¡°La gente estaba grab¨¢ndolo todo con sus m¨®viles y nadie les ayudaba¡±
La familia de la turista espa?ola muerta en la explosi¨®n de gas en Par¨ªs espera poder repatriarla en dos o tres d¨ªas. Dos espa?oles siguen ingresados en estado leve
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Eran cerca de las nueve de la ma?ana del s¨¢bado. Laura Sanz Nombela, nacida en Toledo, cajera, de 38 a?os, se hab¨ªa levantado antes que su marido y se acababa de duchar en la habitaci¨®n de su hotel en Par¨ªs, donde la pareja pasaba un fin de semana rom¨¢ntico. ?l le hab¨ªa querido dar una sorpresa y hab¨ªan dejado a sus tres hijos con los padres de ella en Burguillos (Toledo). "Venga, Luis Miguel, arriba, lev¨¢ntate, vamos a desayunar que nos vamos", apremiaba la mujer a su marido. "Laura se estaba vistiendo delante de la ventana, con las cortinas echadas. Ten¨ªa ya el pantal¨®n y estaba poni¨¦ndose el jersey cuando se produjo la explosi¨®n" de gas que revent¨® la panader¨ªa?Hubert, justo enfrente de su hotel, cuenta por tel¨¦fono y a duras penas su padre, Jos¨¦ Luis Sanz Guti¨¦rrez, desde la morgue parisina donde velaban el domingo su cad¨¢ver.
Su yerno, d¨ªa y medio despu¨¦s del accidente en el que murieron otras tres personas y unas 50 resultaron heridas, todav¨ªa no puede ni hablar. "?l estaba en la cama cuando pas¨®, pero a mi hija le alcanz¨® de pleno. La explosi¨®n arranc¨® el marco de la ventana y le dio en la cabeza. El pobre no para de repetir que, si llega a haber sido dos minutos antes o dos minutos despu¨¦s, Laura estar¨ªa viva. Dos minutos antes, mi hija estaba en la ducha y no le hubiera pasado nada. Dos minutos despu¨¦s, ¨¦l se hubiera levantado ya y...", se lamenta en vano el padre. Ante la tragedia, ante lo inevitable, uno no puede dejar de golpearse en la cabeza con el martillo de los si hubiera.?
Luis Miguel ni siquiera sabe si perdi¨® o no el conocimiento, solo recuerda que la onda expansiva lo estamp¨® contra la cama. Al ver a su mujer, empez¨® a gritar por la ventana "ayuda, ayuda". Desesperado, la cogi¨® en brazos y tir¨® escaleras abajo pidiendo auxilio, pero nadie acudi¨®. "Todo el mundo estaba con los m¨®viles grabando y nadie les socorri¨®, hasta que a mi yerno se la quit¨® de los brazos un bombero, que le hizo un masaje card¨ªaco hasta que lleg¨® la ambulancia". La trasladaron al?Hospital Universitario de Par¨ªs, donde se certific¨® su muerte horas despu¨¦s.
A la capital francesa viajaron el padre y el hermano de la v¨ªctima, que no llegaron a verla con vida. Ninguno de los tres habla franc¨¦s. Tras pasar la tarde y parte de la noche "en un box de urgencias" con el cad¨¢ver,?les informaron por se?as a las cuatro de la madrugada de que la trasladaban a la morgue. "Nos echaron a un hall con dos escalones y un papel con la direcci¨®n, mi yerno pidi¨® permiso para ir en la ambulancia, pero le dijeron que no", relata el padre, entre la impotencia y la desesperaci¨®n. Los tres estuvieron una hora y media dando vueltas por el enorme complejo hospitalario ¡ªson?90 edificios repartidos en 33 hect¨¢reas¡ª?hasta que dieron con el dep¨®sito, a unos ocho kil¨®metros de urgencias. "Llegamos a las cinco y media, pero hasta las ocho no abr¨ªan. Hemos estado en la puerta, esperando". Ni siquiera hab¨ªa un sitio donde tomar un caf¨¦.
"Cuando han abierto, nos han dejado en una habitaci¨®n con Laura hasta las cuatro y media de la tarde, que nos han vuelto a echar hasta ma?ana", dice Jos¨¦ Luis, que no piensa volver de Par¨ªs sin su hija. Aunque en un principio les informaron de que la repatriaci¨®n se demorar¨ªa unos 10 d¨ªas, el consulado intenta agilizar los tr¨¢mites y les habla de solo de dos o tres. La familia se ha alojado en un hotel que encontraron ellos mismos y "por casualidad, a unos 30 metros del dep¨®sito", a la espera de noticias.?
"Desde esta ma?ana, el personal del consulado no nos ha dejado, dicen que para evitar m¨¢s errores. Ojal¨¢ esto que est¨¢n haciendo hoy lo hubieran hecho ayer", afirma el padre de la v¨ªctima sobre el apoyo que, ahora s¨ª, les est¨¢n brindando las autoridades espa?olas. Tras la denuncia hecha el s¨¢bado por la familia, que afirm¨® sentirse "totalmente sola, desamparada y desistida" en Par¨ªs, este domingo han recibido la llamada del vicec¨®nsul y la visita de la canciller y del propio embajador, as¨ª como de la polic¨ªa francesa, que les ha informado de que ma?ana lunes podr¨¢n recoger las pertenencias del hotel, el?Mercure Paris Op¨¦ra Lafayette, que amenaza ruina.?
Tambi¨¦n han sido atendidos por una psic¨®loga, como llevaban pidiendo desde el s¨¢bado. "Mi yerno est¨¢ f¨ªsicamente bien, pero psicol¨®gicamente... No nos creemos la desgracia, no dejamos de pensar en los ni?os [de?10, 5 y 3 a?os], el panorama es tremendo", confiesa. "Llevaban juntos desde que se conocieron, cuando Laura ten¨ªa 16 a?os. Hasta ahora", concluye su relato entre l¨¢grimas el padre a la salida de la morgue en direcci¨®n al hotel, donde intentar¨¢n descansar y comer algo por primera vez desde que llegaron a Par¨ªs.?
Adem¨¢s de Laura, la explosi¨®n ha dejado otros tres fallecidos. La ¨²ltima v¨ªctima es una mujer joven que viv¨ªa justo encima de la panader¨ªa, cuyo cuerpo ha sido recuperado a primera hora de la tarde de entre los escombros del edificio en el que se produjo la explosi¨®n. El domingo por la ma?ana,?los bomberos de la capital francesa y la fiscal¨ªa hab¨ªan informado de que estaba desaparecida.?"Unos 40 bomberos retiran los escombros con la mano, piedra por piedra, debido a la peligrosidad de la situaci¨®n", explic¨®?a la agencia AFP un portavoz de dicho cuerpo. Los otros dos fallecidos son precisamente bomberos que hab¨ªan acudido al lugar alertados por el olor a gas. Unas cincuenta personas resultaron heridas, 10 de ellas de gravedad.
Entre los heridos hay dos espa?oles. No se sabe ni su identidad, ni su edad, ni su procedencia. La Oficina de Informaci¨®n Diplom¨¢tica (OID) no ofrece datos personales o sobre la evoluci¨®n de sus heridas por la Ley de Protecci¨®n de Datos. Solo detalla que se trata un hombre y una mujer ¡ªse desconoce si pareja¡ª y que?son turistas. Tambi¨¦n que siguen ingresados en dos hospitales distintos, aunque su estado no es grave. "La canciller, acompa?ada de m¨¢s personal del consulado, los ha visitado en el hospital y ha saludado a la familia de uno de los heridos que estaba acompa?¨¢ndolo", se ha limitado a declarar a este peri¨®dico el diplom¨¢tico de guardia de la OID, que ha reiterado, en contra de la versi¨®n del padre de Laura, que?el consulado mantuvo el s¨¢bado "en todo momento el contacto con la familia de la espa?ola fallecida".
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