La UE definir¨¢ a Gibraltar como ¡°colonia¡± por la presi¨®n de Espa?a si hay Brexit duro
Londres califica de ¡°inaceptable¡± definirla de este modo porque "tiene una relaci¨®n constitucional moderna y madura con Reino Unido"
Espa?a ha ganado otra peque?a batalla diplom¨¢tica en Bruselas por el contencioso de Gibraltar. Un texto comunitario redactado por si se produce un Brexit duro define al Pe?¨®n como colonia, algo que Reino Unido considera ¡°inaceptable¡±. El t¨¦rmino figura en un documento acordado este viernes por los 27 socios que quedar¨¢n en la UE tras el Brexit que exime de visado a todos los brit¨¢nicos (incluidos los gibraltare?os) para estancias cortas. Espa?a conf¨ªa en que la etiqueta siente precedentes.
Un texto legal pensado para facilitar los flujos entre brit¨¢nicos y el resto de europeos en caso de salida abrupta de la UE ha sembrado la discordia en Reino Unido a cuenta de Gibraltar. As¨ª lo ha hecho saber el representante brit¨¢nico ante el club comunitario. A pesar de ello, el texto est¨¢ cerrado (aunque queda la ratificaci¨®n definitiva), seg¨²n explican fuentes de la negociaci¨®n. En todo caso, esa modificaci¨®n al reglamento de visados solo entrar¨¢ en vigor si la salida brit¨¢nica se salda sin acuerdo, una hip¨®tesis cada vez m¨¢s probable, aunque no definitiva.
La ventaja de viajar sin visados se aplicar¨¢ tambi¨¦n a los ciudadanos del Pe?¨®n. Pero para consignarla, el documento aclara que se trata de una colonia brit¨¢nica. A petici¨®n de los representantes del Gobierno espa?ol, el texto incluye una nota a pie de p¨¢gina en la que se indica que ¡°existe una controversia entre Espa?a y Reino Unido respecto a la soberan¨ªa de Gibraltar, un territorio para el que la soluci¨®n debe ser alcanzada bajo la luz de las relevantes resoluciones y decisiones de la Asamblea General de Naciones Unidas¡±, seg¨²n ha podido confirmar este diario. La nota establece claramente que Gibraltar debe ser considerada ¡°una colonia de la Corona brit¨¢nica¡±. La ONU considera el Pe?¨®n como ¡°territorio no aut¨®nomo pendiente de descolonizaci¨®n¡±, pero Londres no comparte esa definici¨®n.
La clave de esta apostilla de inspiraci¨®n espa?ola reside en un cap¨ªtulo anterior del conflicto gibraltare?o, que Espa?a considera una victoria aun m¨¢s rese?able que esta. En los planes de contingencia que esboz¨® la Comisi¨®n Europea el pasado diciembre, hab¨ªa una menci¨®n expl¨ªcita a que Gibraltar no formaba parte de los preparativos en caso de no acuerdo. Por eso, permitir que el Pe?¨®n se beneficiara, junto a Reino Unido, de la exenci¨®n de visados requer¨ªa otra referencia expl¨ªcita. Aunque esa modificaci¨®n del reglamento solo prosperar¨¢ si finalmente Reino Unido sale de la UE sin red, Espa?a conf¨ªa en que la denominaci¨®n de colonia siente un precedente y se consolide en los textos comunitarios como etiqueta para Gibraltar. Preguntado sobre esta disputa, un portavoz de la Comisi¨®n Europea evit¨® este viernes pronunciarse en rueda de prensa.
El Gobierno de Reino Unido transmiti¨® a EL PA?S su posici¨®n ante el contenido del texto. ¡°Gibraltar no es una colonia y es completamente inaceptable definirlo de este modo. Gibraltar forma parte de la familia de Reino Unido y tiene una relaci¨®n constitucional moderna y madura con Reino Unido. Esta situaci¨®n no cambiar¨¢ por nuestra salida de la UE. Todas las partes deben respetar el deseo del pueblo de Gibraltar de ser brit¨¢nico¡±, explic¨® un portavoz.
Quejas de Picardo
Tambi¨¦n el Gobierno de Gibraltar expres¨® su disconformidad con estos t¨¦rminos, que considera anacr¨®nicos. ¡°El uso de semejante lenguaje, en caso de materializarse en los documentos finales, no ayuda a la creaci¨®n de un clima de entendimiento y confianza entre Gibraltar y Espa?a a medida que nos preparamos para abandonar la UE¡±, afirm¨® en un comunicado el Ejecutivo que preside Fabi¨¢n Picardo.
La nota a pie de p¨¢gina, seg¨²n explica el diario Financial Times, es el fruto de un acuerdo entre Madrid y Par¨ªs. El Gobierno franc¨¦s quiso acotar un texto previo que hac¨ªa referencia a la lista de Naciones Unidas de ¡°territorios sin autogobierno [...] sujetos a la descolonizaci¨®n¡±, en la que figura Gibraltar. El El¨ªseo mostr¨® su inquietud porque la lista incluye tambi¨¦n territorios como la Polinesia Francesa o Nueva Caledonia. La soluci¨®n, centrada exclusivamente en la definici¨®n de Gibraltar, ha desatado los nervios en Downing Street.
Espa?a considera que la situaci¨®n no deber¨ªa ser objeto de controversia. Gibraltar constituye un territorio en disputa entre los dos Estados y ha sido objeto de m¨¢s de un sinsabor durante la negociaci¨®n del Brexit. Hasta ahora la Uni¨®n Europea, como club que albergaba tanto a Espa?a como a Reino Unido, hab¨ªa evitado el t¨¦rmino colonia porque deseaba mantener la equidistancia en el conflicto. Una vez fuera del club ¡ªel escenario en el que se sit¨²a este documento europeo, concebido para trazar la pol¨ªtica de visados en caso de Brexit abrupto¡ª, Bruselas tendr¨¢ menos dificultades en alinearse con la l¨®gica espa?ola.
El Gobierno de Pedro S¨¢nchez, adem¨¢s, buscaba un ejercicio de reafirmaci¨®n tras el rev¨¦s que sufri¨® en el tratado del acuerdo de retirada, que incluy¨® ¡°con nocturnidad y alevos¨ªa¡±, seg¨²n lo defini¨® en su momento el Ejecutivo, un art¨ªculo que traspasaba las l¨ªneas rojas de Espa?a en esta negociaci¨®n: perder su derecho de veto en la extensi¨®n a la colonia brit¨¢nica de los beneficios del acuerdo de retirada. Finalmente se logr¨® una soluci¨®n aceptable para todos, pero con muchas dificultades. Tampoco en esta ocasi¨®n ha sido f¨¢cil poner por escrito un vocablo tan controvertido como el de colonia, explican las fuentes consultadas.
La voluntad de May de reabrir las negociaciones sobre el acuerdo del divorcio de la UE ha provocado advertencias en Londres de que otros pa¨ªses podr¨ªan aprovechar la oportunidad para visitar de nuevo asuntos pendientes. Y el ejemplo m¨¢s evidente es el contencioso de Gibraltar. El Gobierno espa?ol ya amenaz¨®, con ¨¦xito, el pasado noviembre con vetar la aprobaci¨®n del acuerdo de retirada de Reino Unido si no se ofrec¨ªan garant¨ªas de que el estatus de este territorio permanecer¨ªa al margen del acuerdo y ser¨ªa objeto de negociaciones bilaterales entre Madrid y Londres.
Downing Street acept¨®, a rega?adientes, que se incluyeran varias declaraciones de las instituciones comunitarias para aclararlo, pero no ha dejado de expresar desde entonces su malestar con la presi¨®n espa?ola. May ha insistido en varias ocasiones en sede parlamentaria en la soberan¨ªa brit¨¢nica de Gibraltar y se ha visto obligada a lanzar gui?os constantes de respaldo a Fabi¨¢n Picardo, ministro principal del Pe?¨®n.
Un largo camino hacia el encaje futuro
Espa?a se juega en el Brexit mucho m¨¢s que la relaci¨®n con Gibraltar. El impacto que la salida brit¨¢nica pueda tener en sectores clave como el turismo o el comercio excede los efectos del contencioso con la colonia brit¨¢nica. Pero la oportunidad de crear una relaci¨®n m¨¢s equilibrada con el Pe?¨®n tras el divorcio se ha convertido en la principal demanda espa?ola en esta tortuosa negociaci¨®n.
El texto pactado ayer tiene la importancia de constituir el primero con sello de la UE que etiqueta como colonia a ese peque?o territorio de 32.000 habitantes. En el fondo, la esperanza de todos los socios europeos es que nunca llegue a entrar en vigor porque se ha concebido solo en el caso de que el Brexit se salde sin acuerdo. Pese a todo, Espa?a considera que se trata de un paso trascendente, aunque la UE tambi¨¦n ha dado algunas muestras de agotamiento respecto a la insistencia espa?ola en un dosier altamente t¨®xico en Reino Unido. El apoyo autom¨¢tico a nuevas demandas espa?olas de este tipo no est¨¢ garantizado.
Si la retirada brit¨¢nica concluye sin apret¨®n de manos, el Gobierno espa?ol conf¨ªa en que rijan los memorandos de entendimiento que ha firmado con Reino Unido para poner orden en las ¨¢reas m¨¢s sensibles. Esos cuatro documentos ya est¨¢n firmados por ambas partes, pero nada garantiza que Londres mantenga su palabra si el di¨¢logo con Bruselas salta por los aires. El ministro de Exteriores, Josep Borrell, no cesa de recalcar su validez aun en caso de Brexit abrupto. Fuentes jur¨ªdicas ligadas a la Administraci¨®n arrojan dudas y apuntan a las referencias cruzadas que hay en ambos textos (el acuerdo de retirada alude a los memorandos y viceversa). Adem¨¢s, tres de esos acuerdos (referentes al tabaco, al medio ambiente y a la cooperaci¨®n policial) aclaran que solo se aplicar¨ªan en el llamado periodo de transici¨®n (el que regir¨¢ desde el Brexit hasta el eventual acuerdo de relaci¨®n futura entre Reino Unido y la UE). Sin pacto, tampoco habr¨¢ transici¨®n y, por tanto, esos textos pueden quedar en un limbo.
El ¨²nico texto con vocaci¨®n de permanencia es el referido a la circulaci¨®n de ciudadanos (esencialmente, de esos m¨¢s de 10.000 espa?oles que cruzan la verja cada d¨ªa para trabajar). Incluso en el comunicado que emiti¨® este viernes Gibraltar para lamentar el empleo del t¨¦rmino colonia en los textos comunitarios, el Gobierno del Pe?¨®n dejaba patente que facilitar¨¢ ese tr¨¢nsito.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.