?Qui¨¦n debe decidir el uso de falda o pantal¨®n en la Guardia Civil?
El borrador de la Orden de Uniformidad deja abierta la puerta a que sea el mando quien elija la indumentaria de las agentes
El borrador de la Orden de Uniformidad para la Guardia Civil deja abierta la posibilidad de que sea un mando quien decida si las agentes deben de llevar falda o pantal¨®n. A falta de que el pr¨®ximo 28 de marzo pase por el Consejo de la Guardia Civil, la Asociaci¨®n Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha presentado ya una serie de alegaciones para que sean las 5.000 mujeres del cuerpo, de un total de 76.200 agentes, quienes decidan si llevan falda o pantal¨®n en los actos que corresponda vestir el uniforme. El pasado mes de septiembre se celebraron los 30 a?os de ingreso de la mujer en el Instituto Armado.
Con un texto bastante enrevesado, en el borrador se indica que "para un determinado acto del servicio esta facultad [el uso opcional de determinada prenda] podr¨¢ ser ejercida por la autoridad que lo organice, convoque o presida". En la AUGC entienden que "resulta necesario concretar algo m¨¢s esta frase, ya que por s¨ª sola da a entender que el uso de la falda es potestativo (no obligatorio), pero que cualquier mando, en consonancia con esta ¨²ltima frase, puede revocar ese car¨¢cter y ordenar el uso de dicho elemento del uniforme femenino". La asociaci¨®n, que aglutina a la gran mayor¨ªa de los guardias civiles, propone a?adir a la ¨²ltima l¨ªnea del texto del borrador esta frase: ¡°¡a excepci¨®n del uso de la falda en uniformidad femenina que, en todo caso, ser¨¢ de uso opcional y potestativo para quien la porte¡±. A su entender, de ese modo "quedar¨ªa totalmente aclarado que la elecci¨®n entre la falda y el pantal¨®n por parte de las agentes ser¨ªa siempre, y en cualquier caso, potestad exclusivamente suya".
En la AUGC consideran que se trata de un asunto de "notable importancia, ya que, al margen del car¨¢cter sexista que tendr¨ªa el hecho de que fuera un mando el que eligiera la indumentaria de una agente, cabe se?alar tambi¨¦n que la imposici¨®n de la falda har¨ªa visibles los posibles tatuajes que la trabajadora tuviese en las piernas, que con el pantal¨®n quedar¨ªan ocultos, como exige la norma".
En el punto segundo del art¨ªculo 4 de la norma ("Competencias en la determinaci¨®n de la modalidad de uniforme a utilizar"), a?aden una ¨²ltima frase como apostilla en el mismo sentido al final del texto: "La autoridad o mando de la Guardia Civil que organice un acto institucional u otro evento incluir¨¢ entre las normas de protocolo la indumentaria a utilizar por los asistentes (...) En ning¨²n caso podr¨¢ especificar para su uso elementos de la uniformidad que tengan car¨¢cter voluntario y potestativo".
La Direcci¨®n General del Instituto armado est¨¢ ultimando esta nueva orden general para afinar al m¨¢ximo y fijar todos los detalles del aspecto f¨ªsico de sus agentes, ya que la anterior norma data de 1996 y necesitaba una "actualizaci¨®n". Eso incluye tatuajes, piercings, pulseras y relojes, largo de u?as o decoraciones en el pelo. No obstante, seg¨²n fuentes cuerpo, est¨¢ previsto que se incluyan modificaciones.
Desde la AUGC apelan a la importancia de "ser extremadamente precisos en la redacci¨®n de las normativas, para evitar precisamente esas lagunas que a la larga siempre terminan perjudicando a los trabajadores".
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