Una elecci¨®n arriesgada

El acuerdo alcanzado este mi¨¦rcoles in extremis entre el PSN, Geroa Bai, Podemos e Izquierda-Ezkerra para constituir la Mesa del Parlamento navarro prefigura un pr¨®ximo Gobierno cuatripartito de fuerzas de izquierda y nacionalistas moderados en la comunidad foral, presidido por la socialista Mar¨ªa Chivite. Esta primera decisi¨®n del cuatripartito por com¨²n acuerdo ha implicado que Geroa Bai presida el Parlamento navarro y que Bildu ¡ªcon la oposici¨®n del PSN¡ª ocupe una secretar¨ªa de la Mesa.

El PSN ha cumplido su compromiso electoral de no negociar ni pactar con Bildu ni con Navarra Suma, la coalici¨®n derechista integrada por UPN, PP y Ciudadanos, como acord¨® con su direcci¨®n federal. Como consecuencia, Navarra Suma, como fuerza m¨¢s votada, recuper¨® el s¨¢bado Pamplona y otros municipios navarros importantes, con la irritaci¨®n de Bildu. Sin embargo, este mi¨¦rcoles Navarra Suma no recuper¨® la presidencia del Parlamento navarro porque el cuatripartito suma, sin necesidad de Bildu, 23 votos frente a 20. Y todo apunta a que el pr¨®ximo Gobierno navarro ser¨¢ presidido por el PSN con apoyo del cuatripartito y sin Bildu.

Esta decisi¨®n tiene implicaciones a nivel nacional porque el presidente Pedro S¨¢nchez no dispondr¨¢ de los dos votos que le ofrec¨ªa Navarra Suma para asegurar su investidura. S¨¢nchez sab¨ªa que ese apoyo, con PP y Ciudadanos dentro, era muy precario porque no le garantizaba la estabilidad de la legislatura. Y la contrapartida era car¨ªsima: el sacrificio del PSN para asegurar el Gobierno de la derecha navarrista, cuyo talante qued¨® retratado este mi¨¦rcoles al declarar su l¨ªder, Javier Esparza, tras perder la mayor¨ªa en la Mesa del parlamento: ¡°Es inmoral que el PSN quiera gobernar con los amigos de Josu Ternera¡±.

El dislate de Esparza es antol¨®gico si se tiene en cuenta que Navarra Suma ha recuperado Ayuntamientos importantes como Pamplona porque el PSN no pact¨® con Bildu, que los socialistas tampoco lo han hecho para constituir la Mesa del Parlamento navarro y que, de hecho, no necesitan a Bildu para formar Gobierno porque el cuatripartito tiene mayor¨ªa: 23 diputados frente a 20 de Navarra Suma y siete de Bildu. Parad¨®jicamente, quien podr¨ªa bloquear ese virtual Gobierno es un acuerdo entre Navarra Suma y Bildu.

El PSN ha optado por una arriesgada apuesta porque va a estar sometido a un fuego cruzado entre Bildu y una derecha farisaica que pacta sin complejos con la ultraderecha y le acusa de complicidades inexistentes, precisamente con Bildu. El del PSN es un intento loable de apostar a largo plazo por un Gobierno plural, de convivencia entre distintas sensibilidades, que evite el choque entre bloques, el navarrismo y el nacionalismo vasco. Es la ant¨ªtesis del modelo catal¨¢n y se parece bastante al vasco, que funciona bien.