Los cuatro acusados por el asesinato de Luc¨ªa Garrido niegan cualquier relaci¨®n con el crimen
El juicio ha arrancado este mi¨¦rcoles 11 a?os despu¨¦s de que se encontrara el cad¨¢ver de la mujer flotando en su piscina de Alhaur¨ªn de la Torre, en M¨¢laga
El cad¨¢ver de Luc¨ªa Garrido fue encontrado flotando en la piscina el 30 de abril de 2008. Ten¨ªa golpes en la cabeza y una herida de un cuchillo en la yugular, pero la autopsia determin¨® que la muerte fue por asfixia, ahogada. La mujer, de 35 a?os, fue hallada por dos agentes de la Polic¨ªa Local en la finca Los Naranjos a las afueras de Alhaur¨ªn de la Torre (M¨¢laga) donde resid¨ªa. Todo apunta desde entonces a un asesinato. Es lo ¨²nico claro de un caso que ha empezado a juzgarse este mi¨¦rcoles, 11 a?os despu¨¦s. Hay cuatro acusados: su expareja, dos agentes de la Guardia Civil y un supuesto sicario. Este mi¨¦rcoles, en la primera sesi¨®n del juicio, todos ellos han declarado no conocerse entre s¨ª antes de la muerte de la mujer -salvo los agentes, que trabajaban juntos- y no tener nada que ver con los hechos.
En un primer momento, el caso se investig¨® como violencia machista. Sin embargo. El Juzgado de Violencia sobre la Mujer 1 de M¨¢laga consider¨® en 2016 que las pruebas practicadas exculpan a la expareja de la v¨ªctima, Manuel Alonso. El magistrado relacion¨® la muerte entonces con una presunta red de tr¨¢fico de drogas y se inhibi¨® a favor del Juzgado de Instrucci¨®n 4 para continuar la investigaci¨®n contra otros investigados.
Ahora, el Ministerio Fiscal, que tild¨® lo sucedido como un crimen ¡°premeditado y cobarde¡± acusa de un delito de asesinato a A. V., como presunto autor material, y a A. P. que entonces era Guardia Civil, como autor intelectual. Para ambos pide 23 a?os y medio de prisi¨®n. Por el momento, no acusa a Alonso, aunque el fiscal explic¨® que al final del juicio le acusar¨¢ ¡°de ser c¨®mplice del delito de asesinato¡±. ¡°Nunca le consideramos inocente¡±, a?adi¨® el representante de la Fiscal¨ªa. Quien s¨ª lo considera autor intelectual es la acusaci¨®n particular (la familia la ejerce doblemente) que tambi¨¦n a?ade un delito de malos tratos continuados. Tambi¨¦n incluye al otro guardia civil. Para todos piden 25 a?os de prisi¨®n y cuatro m¨¢s para el supuesto autor material por allanamiento de morada. La acusaci¨®n particular afirm¨® al jurado popular -compuesto por siete mujeres y dos hombres- que el caso juzga una ¡°trama oscura¡± donde hay ¡°maltrato, asesinatos, droga, corrupci¨®n policial y conexiones con el narcotr¨¢fico¡±. ¡°Esto no es ficci¨®n, es la realidad¡±, a?adi¨® el abogado de la hermana de Garrido. Las cuatro defensas solicitan la libre absoluci¨®n de sus clientes.
La expareja de la fallecida, con quien tuvo una hija, repas¨® la coartada que posee, porque en el momento que ocurrieron los hechos se encontraba en un recorrido que le llev¨® a Castellar de la Frontera, Sotogrande y Ronda. Asegur¨® no conocer al supuesto sicario y rechaz¨® que realizara maltratos a Garrido o que le cortara el agua y la luz. Tambi¨¦n ha negado que la finca donde se encontr¨® el cad¨¢ver -la mujer ten¨ªa el derecho a usar la casa y el hombre al resto del terreno para su negocio de compraventa de animales ex¨®ticos- haya sido usada como guarder¨ªa de droga o para esconder dinero procedente de actividades il¨ªcitas.
¡°?Cu¨¢l cree que fue el motivo del crimen de Luc¨ªa Garrido?¡±, le ha preguntado la acusaci¨®n particular a Alonso, que ha respondido: ¡°Yo ya no creo nada¡±.
La familia s¨ª que cree que el m¨®vil del asesinato fue precisamente que el acusado necesitaba usar toda la finca para mantener su actividad empresarial, ¡°pero tambi¨¦n los negocios oscuros¡±. El hecho de que Garrido conociera esas supuestas actividades il¨ªcitas es lo que, seg¨²n los familiares, llev¨® a Alonso a avisar a los otros acusados, ¡°a los que consigue manipular para hacer lo que hizo¡±, como ha dicho uno de los abogados de la acusaci¨®n particular. Y, aunque un testigo afirm¨® la existencia de un encuentro en una terraza de Torremolinos un mes antes del asesinato para planificarlo con un precio ¡°que pudo ser de 30.000 euros¡±, seg¨²n Fiscal¨ªa. Todos los acusados negaron saber nada de esa reuni¨®n.
Entre ellos el agente de la Guardia Civil A. P., quien ha asegurado no tener nada que ver con lo ocurrido. ¡°Juro por Dios que no conoc¨ªa a Luc¨ªa ni a su pareja¡±, ha afirmado, para pasar luego a denunciar estar pasando durante los ¨²ltimos tres a?os ¡°un aut¨¦ntico infierno¡±. Tambi¨¦n ha dicho que conoc¨ªa al supuesto autor material del asesinato desde 2013 por las carreras de motos y karting en las que participan sus respectivos hijos y por un negocio que nunca lleg¨® a producirse. ¡°Yo solo quiero justicia¡±, ha insistido, adem¨¢s de explicar que fue una vez a Los Naranjos para conocer los ¡°leones, tigres y otros animales ex¨®ticos¡± que all¨ª hab¨ªa en compa?¨ªa de su mujer y su hija. Fue meses despu¨¦s de la muerte de Garrido. ¡°Ni siquiera sab¨ªa que all¨ª hab¨ªa fallecido la mujer¡±, ha subrayado.
¡°Nadie tiene derecho a quitarle la vida a nadie", ha manifestado este acusado, quien ha puntualizado que ¡°jam¨¢s¡± ha participado en una reuni¨®n en la que se preparara la muerte de nadie. El otro Guardia Civil acusado ha insistido en que tampoco conoc¨ªa antes del crimen a los otros procesados y a la v¨ªctima y que no tuvo ning¨²n papel en el asesinato. ¡°Mi profesi¨®n es Guardia Civil: ni ladr¨®n ni narcotraficante¡±, ha afirmado.
Por su parte, A. V., al que se considera el encargado de matar a Luc¨ªa Garrido, declar¨® directo, serio y a la defensiva, alegando que el d¨ªa de los hechos estaba sac¨¢ndose el carn¨¦ de conducir y, m¨¢s tarde, en el cumplea?os de su madre. Afirm¨® que nunca ha estado en la finca Los Naranjos, que no conoc¨ªa a Manuel Alonso y se consider¨® ¡°un cabeza de turco¡±. La clave para inculparlo est¨¢ en una llave que supuestamente recibi¨® de la expareja de la mujer -algo que este neg¨®- para entrar a la finca y esperar escondido a su llegada. En ella se encontr¨® ADN que, en un primer momento, dio negativo. Sin embargo, en 2016, la Guardia Civil utiliz¨® un procedimiento m¨¢s avanzado en los que s¨ª pudo cotejar los restos biol¨®gicos de la llave con los suyos, con un resultado positivo.
La defensa del supuesto autor material aleg¨® que es ¡°imposible¡± que eso sea as¨ª porque las dos pruebas que usaron en 2008 ¡°se hab¨ªan consumido¡± y, por tanto, ¡°no hay forma de hacer nuevos an¨¢lisis sobre algo que no existe¡±. ¡°Esa es la prueba principal y, sin ella, no puede haber condena¡±, ha destacado su abogado al jurado popular. La agente de Polic¨ªa Local que encontr¨® el cad¨¢ver de Garrido ha declarado que cuando ella lleg¨® hab¨ªa, junto a la entrada a la vivienda, un ladrillo con sangre roto en tres partes, una cuarta parte dentro de un macetero, el bolso, la cartera, el llavero y un pendiente de la mujer, as¨ª como bolsas de la compra y un regalo ¡°envuelto y con lazo¡±. Todo estaba seco. No vio la referida llave ni esta se ve en las fotos que hizo su compa?ero de patrulla minutos despu¨¦s.
El juicio continuar¨¢ este jueves con la declaraci¨®n de agentes de Asuntos Internos de la Guardia Civil, a quienes los acusados consideran haber provocado su acusaci¨®n. Se prev¨¦ que el juicio se prolongue durante toda la semana y la siguiente. Durante estas jornadas declarar¨¢n m¨¢s de 80 personas, entre testigos y peritos.
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