Los ni?os futbolistas que huyeron de San Sebasti¨¢n ped¨ªan limosna en un supermercado

Ni el Par¨ªs Saint Germain, ni el Bayern Munich, ni la Roma. Los dos menores integrantes del equipo de f¨²tbol sierraleon¨¦s que particip¨® en la 28 edici¨®n de la Donosti Cup ¡ªtorneo de futbol de menores en la que participan 640 equipos de 27 pa¨ªses¡ª y que desparecieron la madrugada del 13 de julio, acabaron pidiendo limosna para una mafia en un supermercado de la periferia de Burdeos, en Francia. La Interpol los localiz¨® en septiembre y poco despu¨¦s los traslad¨® a un centro de menores de la misma ciudad, donde se encuentran desde entonces. "Est¨¢n bien y eso es lo importante", ha confirmado a este peri¨®dico uno de sus educadores, el cantante y fundador de la ONG Diamond Child School of Arts and Culture, Anthony Seydu. El equipo lleg¨® a Donosti en julio gracias a su mediaci¨®n y a la financiaci¨®n de la Diputaci¨®n de Gupuzkoa, despu¨¦s de sortear numerosos problemas para obtener los visados.

Su desaparici¨®n puso a trabajar a varios cuerpos policiales, que en un primer momento consideraron la posibilidad de que se tratase de una iniciativa de los propios menores, posiblemente confundidos y deslumbrados por lo que ve¨ªan en San Sebasti¨¢n. Todo lo contrario. Seg¨²n explica Seydu y confirman fuentes policiales, los ni?os fueron enga?ados con la participaci¨®n de algunos familiares y de una organizaci¨®n ilegal pero muy conocida en Sierra Leona, que por unos 3.000 euros organiza viajes a Europa. En este caso, puesto que el viaje ya estaba organizado, la promesa con la que les enga?aron fue la de llevarles desde San Sebasti¨¢n a los mejores clubes de futbol de Europa.

"Los familiares de estos chavales pr¨¢cticamente regalaron a los cr¨ªos a la mafia", critica Seydu, que desde su ONG patrocina desde hace ya muchos a?os al equipo Diamond Child. En torno a diez d¨ªas despu¨¦s de la desaparici¨®n, y gracias a las llamadas de un colaborador de la ONG a los entrenadores de los chicos, lograron los n¨²meros de tel¨¦fonos de, al menos, uno de los menores y de uno de sus posibles captores. El propio Seydu y miembros de la organizaci¨®n de la Donosti Cup presentaron las nuevas pruebas a la Ertzaintza y a la Interpol, que se puso manos a la obra para localizar los tel¨¦fonos y detener a los captores de los menores. Fue la polic¨ªa de Luxemburgo ¡ªque posiblemente coordin¨® la operaci¨®n de la Interpol¡ª la que comunic¨® a la Ertzaintza a finales de septiembre que los ni?os hab¨ªan sido localizados en el supermercado de Burdeos.

Los chicos de esta ONG, fundada en 2005, tienen un pasado complicado en muchos casos. Esta entidad ayuda a j¨®venes que viven en los barrios m¨¢s pobres de Freetown, la capital de Sierra Leona. Unos son hu¨¦rfanos, otros hijos de los ni?os soldado de la guerra civil que enfrent¨® a sus ciudadanos durante la d¨¦cada de 1991 a 2002, y otros han pagado las consecuencias de la epidemia de ¨¦bola de los a?os 2014 y 2015. "Espero que superen lo que les ha pasado", ha explicado el fundador de la ONG en referencia a los ni?os futbolistas. Al propio Seydu le acusaron en su pa¨ªs de tr¨¢fico de menores, una acusaci¨®n que, seg¨²n dice, ha desmontado la Interpol despu¨¦s de dar con los ni?os y con la mafia que les reten¨ªa.

"Afortunadamente lo que sabemos es que Francia no va a devolver a los menores, sobre todo despu¨¦s de constatar c¨®mo se ha producido el enga?o, y que les va a dar una oportunidad para formarse. Quien sabe si su sue?o de jugar en alg¨²n gran club todav¨ªa pueda convertirse en una realidad", explica el sierraleon¨¦s. "Nosotros vamos a seguir ayud¨¢ndo a los menores en nuestra tierra", asegura.

Los j¨®venes integrantes del equipo Diamond Child disputaron ocho partidos en la categor¨ªa B14 de la Donosti Cup, en la que terminaron segundos entre 68 equipos. Ganaron siete partidos antes de llegar a la final, en la que cayeron frente al conjunto catal¨¢n Segre por dos a cero.