Los intentos por deshacer lo que Franco dej¨® ¡°atado y bien atado¡±

En Apuntes de un condenado por el 23-F, escrito en la c¨¢rcel, el excoronel Ignacio San Mart¨ªn recuerda una "emocionante" excursi¨®n al Valle de los Ca¨ªdos - ¡°Nuestras mujeres depositaron flores en la tumba. Se rez¨® por el caudillo¡­¡±- antes de explicar el ¡°malestar militar¡± preludio del intento de golpe de Estado. Treinta y siete a?os despu¨¦s, en 2018, el teniente coronel Jos¨¦ Ignacio San Mart¨ªn Naya, su hijo, suscrib¨ªa con m¨¢s de un centenar de militares una ¡°declaraci¨®n de desagravio¡± a la ¡°vilipendiada figura del general Franco¡± que, ¡°llegado el momento crucial para la supervivencia de la naci¨®n espa?ola, asumi¨® la responsabilidad para ejercer el mando ¨²nico de la Espa?a agredida y asediada por el comunismo internacional¡±. El texto reclamaba al Gobierno que abandonara ¡°la perversa pretensi¨®n de exhumar¡± sus restos y exig¨ªa ¡°gratitud¡± hacia el dictador.

FRANCO: El SUPREMO avala la EXHUMACI?N del VALLE DE LOS CA?DOS y que los restos vayan a EL PARDO

En 1993, un joven de 21 a?os llamado Santiago Cantera se present¨® a las elecciones generales y europeas por una rama de Falange Espa?ola. El pasado 9 de octubre firm¨®, como ¡°prior administrador de la Abad¨ªa de la Santa Cruz del Valle de los Ca¨ªdos¡±, una carta a la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, negando la entrada a la bas¨ªlica para exhumar a Franco. Unos d¨ªas antes, el 24 de septiembre, el Supremo hab¨ªa avalado por unanimidad el traslado de los restos del dictador.

Llev¨® 18 a?os construir el monumento, 13 m¨¢s de lo que Franco hab¨ªa previsto. Y la democracia ha tardado cerca de medio siglo en arrebat¨¢rselo para que deje de ser lo que el dictador quiso que fuera: un monumento a s¨ª mismo y a su triunfo en la Guerra Civil. ¡°La dimensi¨®n de nuestra Cruzada, los heroicos sacrificios que la victoria encierra y la trascenden?cia que ha tenido para el futuro de Espa?a esta epopeya no pueden quedar perpetuados por los senci?llos monumentos con los que suelen conmemorarse en villas y ciudades los hechos salientes de nuestra historia. Es necesario que las piedras que se levanten ten?gan la grandeza de los monumentos antiguos y que desaf¨ªen al tiempo y al olvido¡±, dej¨® escrito Franco en el decreto de 1 de abril de 1940 en el que declar¨® ¡°la urgente ejecuci¨®n de las obras¡±. El mausoleo se inaugur¨® finalmente en 1959. Tambi¨¦n la democracia ha invertido m¨¢s tiempo y esfuerzos de los previstos en empezar a cambiar su significado. ¡°Es urgente porque vamos tarde¡±, declar¨® Calvo el 24 de agosto de 2018, cuando se aprob¨® el real decreto ley para la exhumaci¨®n. A¨²n quedaban 14 meses m¨¢s de obst¨¢culos en los que iba a aflorar esa ¨²ltima resistencia franquista. Lo que sigue es la historia del trabajoso camino que ha recorrido el pa¨ªs hasta levantar una losa de 1.500 kilos y deshacer los nudos que el dictador cre¨ªa haber dejado atados y bien atados.

Leguina: ¡°Forman parte de la historia; dej¨¦moslos en paz" (1983). En 1982, el Gobierno de Leopoldo Calvo Sotelo dict¨® la ley reguladora de patrimonio nacional, que en una disposici¨®n adicional anunciaba una comisi¨®n con las partes afectadas (el Ayuntamiento de San Lorenzo del Escorial, el Gobierno madrile?o, el Ministerio de la Presidencia y los benedictinos) para elaborar una propuesta sobre el r¨¦gimen jur¨ªdico de la Fundaci¨®n del Valle de los Ca¨ªdos, administrada por los benedictinos desde 1958. En julio de 1983, el entonces presidente de madrile?o, Joaqu¨ªn Leguina (PSOE), admit¨ªa que el monumento ten¨ªa ¡°connotaciones claramente antidemocr¨¢ticas¡±, pero consider¨® "absurdo y arbitrario" cualquier proyecto que implicara el traslado de los restos de Franco y Primo de Rivera. "Forman parte de la historia; dej¨¦moslos en paz". La comisi¨®n no prosper¨®.

Las peticiones del PNV: ¡°Va siendo hora¡­¡±. En 2001, el diputado peneuvista Jos¨¦ Juan Gonz¨¢lez de Tx¨¢barri defendi¨® en el Congreso una proposici¨®n no de ley para condenar el alzamiento militar recordando que en ¡°esa mole fara¨®nica¡± llamada Valle de los Ca¨ªdos ¡°nada honra¡± a los ca¨ªdos por la Rep¨²blica ni a los que fueron obligados a construirlo. El PP tumb¨® la iniciativa. En 2004, el senador I?aki Anasagasti tambi¨¦n urgi¨® al Ejecutivo a intervenir. ¡°Va siendo hora de que un gobierno socialista se cuestione si es de recibo que en el siglo XXI se tenga en el Valle de los Ca¨ªdos un inmenso monumento a una de las partes de la contienda y enterrado en ¨¦l al m¨¢ximo responsable de aquella barbarie¡±.

El PP, en 2003, como en 2019: ¡°A ver si as¨ª saca votos¡­¡±. El 24 de septiembre de 2003, como recuerda Fernando Olmeda en su exhaustivo El Valle de los Ca¨ªdos, una memoria de Espa?a, la diputada socialista Mar¨ªa Jos¨¦ L¨®pez mantuvo un rifirrafe en el Congreso con la ministra de Cultura, Pilar del Castillo, por la subvenci¨®n de 150.000 euros que el Gobierno del PP hab¨ªa concedido a la Fundaci¨®n Franco en los ¨²ltimos a?os. Del Castillo respondi¨® con una frase id¨¦ntica a la que su partido repite estos d¨ªas, esto es, que el PSOE quiere hablar de Franco ¡°a ver si as¨ª saca votos¡±. Amparo Valcarce le replic¨® recordando a la ministra su pasado comunista: ¡°Hay que ver qu¨¦ recorrido el suyo: ha ido desde la Bandera Roja al Valle de los Ca¨ªdos¡±. Un d¨ªa despu¨¦s del 28 aniversario de la muerte de Franco, la socialista tambi¨¦n afe¨® al Gobierno que hubiera permitido a los invitados de la fundaci¨®n a la misa por Franco no pagar la entrada al monumento.

Fin a las concentraciones franquistas (2007). Durante el debate de la ley de memoria hist¨®rica, Izquierda Unida, ERC y el BNG plantearon convertir el Valle de los Ca¨ªdos en un lugar de memoria y hablaron del traslado de los restos de Franco. El texto finalmente aprobado se limita a prohibir ¡°actos exaltadores del franquismo¡± como los que llevaban a?os celebr¨¢ndose cada 20-N.

El auto de Garz¨®n (2008). El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garz¨®n orden¨® ocho exhumaciones de restos de republicanos enterrados en el Valle, pero la Audiencia suspendi¨® su orden. El magistrado termin¨® sentado en el banquillo acusado de prevaricaci¨®n por abrir una causa contra los cr¨ªmenes del franquismo. El Supremo finalmente, le absolvi¨®.

El Comit¨¦ de expertos (2011). ¡°Le pido por favor al Gobierno de Mariano Rajoy que no meta este informe en un caj¨®n¡±. El ruego del entonces ministro de la presidencia en funciones, Ram¨®n J¨¢uregui, cay¨® en saco roto. El Ejecutivo del socialista Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero hab¨ªa llegado con la bocina, al final de su segunda legislatura, a la presentaci¨®n del informe de la comisi¨®n de 13 expertos que se hab¨ªa encerrado durante seis meses para decidir c¨®mo transformar el monumento. El documento, que recomendaba el traslado de los restos de Franco, se present¨® en una rueda de prensa el 28 de noviembre de 2011, una semana despu¨¦s de las elecciones que aquel a?o se celebraron, precisamente, un 20-N. El PP lo meti¨®, efectivamente, en un caj¨®n.

El aval parlamentario (2017 y 2018). Dos veces ha votado el Congreso sobre la exhumaci¨®n de Franco y dos veces ha ganado el s¨ª por mayor¨ªa. En 2017 se trataba de una proposici¨®n no de ley del PSOE. El PP se abstuvo y Ciudadanos vot¨® a favor. En 2018, el Congreso convalid¨® el decreto ley para exhumar a Franco. El partido de Albert Rivera, en esta ocasi¨®n, se abstuvo.

El aval judicial. El pasado septiembre, el Supremo aval¨® por unanimidad la decisi¨®n del Gobierno de exhumar a Franco, rechazando los recursos de su familia, que ha batallado hasta el final. ¡°No se pretende m¨¢s que retirar del primer plano, desde luego en un lugar de titularidad estatal, cuanto signifique, represente o simbolice el enfrentamiento civil¡±, argumentaron los magistrados. Jos¨¦ Yusty, responsable del juzgado Contencioso-Administrativo n¨²mero 3 de Madrid, hijo y nieto de almirantes franquistas, tambi¨¦n trat¨® de suspender la exhumaci¨®n alegando motivos de seguridad para los operarios. Esta semana, el mismo d¨ªa que el Constitucional y el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo rechazaron el ¨²ltimo intento de los nietos de Franco por detener la exhumaci¨®n, el juez Yusty archiv¨® su causa.

Cuarenta y cuatro a?os despu¨¦s de la muerte de Franco, la democracia salv¨® el ¨²ltimo obst¨¢culo.