S¨¢nchez propone a dos mujeres, Batet y Llop, para dirigir Congreso y Senado

Empieza la legislatura y llegan los primeros cambios en el n¨²cleo de poder alrededor de Pedro S¨¢nchez. Meritxell Batet ser¨¢ confirmada este martes, si todo sale seg¨²n lo previsto, como presidenta del Congreso. Pero Manuel Cruz, un catal¨¢n como Batet, dejar¨¢ la presidencia del Senado que ocupa desde mayo.?Pilar Llop, una juez especializada en violencia de g¨¦nero que dio el salto a la pol¨ªtica en 2015 y es senadora por Madrid, ser¨¢ su relevo, seg¨²n fuentes del PSOE. Cruz tendr¨¢ ¡°otras responsabilidades¡±, pero el PSC pierde un puesto clave.

Las dos principales instituciones legislativas del pa¨ªs pasar¨¢n a estar dirigidas por mujeres. La presidencia del Congreso y del Senado, adem¨¢s de su importancia pol¨ªtica en una legislatura con las Cortes muy fragmentadas ¡ªel PSOE ha perdido su mayor¨ªa absoluta en la C¨¢mara alta, otra de las consecuencias negativas de la repetici¨®n electoral¡ª, tienen un papel institucional muy destacado, al tratarse de la tercera y cuarta autoridades del pa¨ªs, despu¨¦s del Rey y del presidente del Gobierno. S¨¢nchez siempre insiste en que ¨¦l es un presidente ¡°feminista¡± y ya form¨® en 2018 un Ejecutivo con m¨¢s mujeres que hombres.

Llop (46 a?os) constituye la gran novedad de esta semana. Su elecci¨®n se votar¨¢ el martes. Accedi¨® a la carrera judicial en 1999, y all¨ª ejerci¨® en distintos puestos. Antes de incorporarse a la pol¨ªtica estaba destinada en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer n¨²mero 5 de Madrid. Fue diputada en la Asamblea de Madrid desde 2015. En 2018, cuando S¨¢nchez lleg¨® al poder, fue nombrada delegada del Gobierno para la Violencia de G¨¦nero.

Su elecci¨®n ¡ªque est¨¢ pendiente del respaldo de los dem¨¢s grupos, aunque es casi imposible que se forme una mayor¨ªa alternativa a la del PSOE¡ª es as¨ª un gesto claro hacia el movimiento feminista, justo cuando S¨¢nchez est¨¢ a punto de dejar el Ministerio de Igualdad en manos de Unidas Podemos, un asunto que est¨¢ pr¨¢cticamente cerrado y que genera suspicacias en el mundo socialista.

Cruz, que estaba en las listas del PSC como independiente, fue un nombramiento inesperado en junio, despu¨¦s de que el independentismo frustrara el plan de S¨¢nchez de que Miquel Iceta, l¨ªder de este partido y hombre muy cercano al secretario general del PSOE, se hiciera con la presidencia del Senado. Junts per Catalunya y ERC impidieron con sus votos que Iceta pudiera ser designado senador por el Parlament, y vetaron as¨ª su nombramiento, algo in¨¦dito.

Cruz es un fil¨®sofo muy respetado en el mundo pol¨ªtico por su peso intelectual y, seg¨²n fuentes del PSOE, asumir¨¢ otras ¡°importantes responsabilidades¡± a partir de ahora, aunque de momento no quieren detallar cu¨¢les porque a¨²n hay muchas decisiones importantes por tomar. S¨¢nchez tiene que armar un Gobierno de coalici¨®n con Unidas Podemos y se esperan algunos cambios en su estructura de poder.

El nuevo Ejecutivo, si finalmente logra la abstenci¨®n de ERC y sale adelante la investidura, se enfrentar¨¢ al reto de una mayor¨ªa muy fraccionada y al experimento de una coalici¨®n de izquierdas in¨¦dita en Europa y nunca vista tampoco en Espa?a, donde siempre se ha gobernado en solitario desde 1978. Estos nuevos desaf¨ªos implicar¨¢n probablemente cambios importantes en la organizaci¨®n de Gobierno, pero ahora S¨¢nchez y su equipo m¨¢s cercano est¨¢n concentrados en lograr la investidura. El presidente comparte con muy pocas personas los posibles cambios que pueda tener en la cabeza. La negociaci¨®n con Unidas Podemos, que est¨¢ muy avanzada, tambi¨¦n se lleva con gran discreci¨®n. El reparto de poder final condicionar¨¢ los cambios en el resto del Ejecutivo, que controlar¨¢ el PSOE.

S¨¢nchez no ha modificado su n¨²cleo de confianza, los ¨²nicos que realmente tienen conocimiento de sus pasos. All¨ª est¨¢n Iv¨¢n Redondo, su principal estratega, que sigue al frente de su Gabinete y ayuda en el dise?o de los cambios que pueda querer el presidente, y los cuadros clave del Gobierno y del PSOE: Carmen Calvo, Adriana Lastra, Jos¨¦ Luis ?balos y Santos Cerd¨¢n.

La elecci¨®n de Llop, adem¨¢s del gesto hacia el feminismo y contra Vox, en un momento en el que este partido cuestiona las pol¨ªticas contra la violencia de g¨¦nero, tiene tambi¨¦n una lectura interna en el PSOE. El PSC daba por hecho que Batet y Cruz seguir¨ªan presidiendo, respectivamente, el Congreso y el Senado, algo especialmente simb¨®lico para este partido. Fuentes del PSC admit¨ªan este domingo su frustraci¨®n aunque aseguraban que apoyar¨ªan cualquier decisi¨®n de S¨¢nchez. Es posible ahora que haya compensaciones en el Gobierno. El PSC ten¨ªa a Batet en el anterior Ejecutivo, y ahora sale tambi¨¦n otro catal¨¢n, Josep Borrell, aunque ¨¦l no era de la ¨®rbita de la direcci¨®n de los socialistas catalanes. S¨¢nchez tendr¨¢ que compensar de alguna manera ese vac¨ªo. Unidas Podemos s¨ª estaba buscando a un catal¨¢n para el ministerio de Universidades.

El PSC pierde peso y lo gana el socialismo madrile?o. Los presidentes auton¨®micos y l¨ªderes territoriales consultados celebraron la elecci¨®n de Llop. ¡°No todo es PSC¡±, resum¨ªa un bar¨®n socialista que mantiene una relaci¨®n cordial con el partido hermano en Catalu?a. Otro dirigente auton¨®mico apuntaba que ¡°una cosa es un gesto y otra acaparar¡± mientras recordaba que la apuesta por Batet ya ten¨ªa la ¡°fuerza suficiente¡± tras convertirse en la primera catalana en presidir la C¨¢mara Baja. Llop est¨¢ muy ligada a ?ngel Gabilondo, l¨ªder de la oposici¨®n madrile?a e independiente como ella. Tambi¨¦n a Jos¨¦ Manuel Franco, secretario general del PSOE de Madrid que en las primarias de 2017 desempe?¨® un papel muy activo en la b¨²squeda de apoyos para S¨¢nchez frente a Susana D¨ªaz.