Juramentos y promesas por Espa?a, por Catalu?a, por el planeta y las Trece Rosas

Los juramentos de acatamiento de la Constituci¨®n de los diputados electos han vuelto a convertir en bronco el arranque de la XIV Legislatura. El Congreso m¨¢s heterog¨¦neo de la historia de la democracia ¡ª16 partidos¡ª dej¨® un sinf¨ªn de variantes sobre el ¡°s¨ª, juro¡± o ¡°s¨ª, prometo¡± convencional. De lo local a lo global: se jur¨® por la rep¨²blica catalana, por Espa?a (as¨ª a secas y por la vaciada) y por el Planeta. De lo tangible a lo intangible: por los servicios sociales, por las mujeres asesinadas, por la democracia y por el amor frente al odio. Se prometi¨® la Constituci¨®n hasta por las Trece Rosas.

Jurar con alguna ocurrencia se ha convertido en algo habitual ¡ªtanto como inaugurar legislaturas¡ª pero eso no ha impedido las quejas de los partidos de la derecha, que acusaron a la reci¨¦n reelegida presidenta del Congreso, Meritxell Batet, de ser c¨®mplice de lo que consideran un insulto.

Esta vez no hubo pataleo ni golpes en las mesas. Con el espect¨¢culo de la anterior constituci¨®n de las Cortes a¨²n en la memoria, a finales de mayo, los partidos de la derecha apostaron esta vez por anunciar medidas legales en lugar de llenar de ruido el hemiciclo para ahogar las f¨®rmulas de acatamiento de sus compa?eros de C¨¢mara. El l¨ªder del PP, Pablo Casado, se dirigi¨® a Batet: ¡°Usted no deber¨ªa haber dicho que todos han adquirido la condici¨®n de parlamentarios¡±. Seg¨²n Casado, la f¨®rmula utilizada en ¡°medio centenar de ocasiones¡± no hab¨ªa sido v¨¢lida. El PP anunci¨® que interpondr¨¢ un recurso ante la Mesa y ante el Tribunal Constitucional.

Ya lo hab¨ªa avisado antes de arrancar la ronda de acatamientos la portavoz del partido, Cayetana ?lvarez de Toledo, al decir que ¡°no caben juramentos con reservas mentales ni verbales¡±. La popular lanz¨® una advertencia a la presidenta y a los diputados: ¡°Que se atengan a las consecuencias los diputados y la presidencia si no garantiza que eso sea as¨ª¡±.

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En el centro de las cr¨ªticas est¨¢n las f¨®rmulas de los partidos independentistas. Los catalanes de Junts y ERC juraron por los ¡°presos pol¨ªticos¡± o ¡°el mandato del 1-O¡±; los de Bildu lo hicieron ¡°por imperativo legal hasta la creaci¨®n de la rep¨²blica vasca¡± y ¡°por imperativo legal, hasta lograr una Navarra soberana y una Euskal Herria libre¡±. Pero hubo m¨¢s proclamas territoriales. ¡°Prometo defender los intereses leg¨ªtimos del pueblo valenciano¡±, dijo Joan Baldov¨ª, de Comprom¨ªs. O el para ¡°defender Galiza¡±, del diputado del BNG, N¨¦stor Rego. Al portavoz de Teruel Existe no se le escuch¨® bien, pero sus dos compa?eros en el Senado optaron por una de las f¨®rmulas m¨¢s largas que se recuerdan: "Para exigir el equilibrio territorial recogido en los art¨ªculos 138 y 139 y evitar que tengamos una Espa?a vaciada y una desarrollada, s¨ª prometo".

El l¨ªder de Vox, Santiago Abascal, asegur¨® que ¡°no solo no han jurado la Constituci¨®n, sino que han hecho un acto de conjura contra la Constituci¨®n¡±. Denuncia a la que sum¨® la portavoz de Ciudadanos, In¨¦s Arrimadas, que calific¨® las f¨®rmulas de ¡°insultos a la democracia¡±.

Por alusiones, Batet record¨® dos sentencias del Tribunal Constitucional y una interpretaci¨®n reciente de la Junta Electoral Central que avalan la ¡°flexibilidad¡± de los requisitos formales y reiter¨® su consideraci¨®n de que todas las f¨®rmulas escuchadas hab¨ªan sido v¨¢lidas. As¨ª, avis¨® a los l¨ªderes de los partidos de la derecha de que la decisi¨®n ¨²ltima es suya y que su deber es acatarla.

M¨¢s all¨¢ de territorialismo, hubo f¨®rmulas de lo m¨¢s variadas. Ni siquiera Vox se ajust¨® al guion. En un proceso en el que los cargos electos hablan a viva voz, sin micr¨®fono, algunas frases resultan casi inaudibles, pero la voz de los 52 de la ultraderecha sobresali¨® por encima de todas: ¡°Por Espa?a, yo juro¡±. Una variante que hasta Casado consider¨® un juramento imaginativo.