Pilar Llop, presidenta del Senado por mayor¨ªa simple

Pilar Llop Cuenca, del grupo socialista, ha sido elegida este martes presidenta del Senado con 130 votos a favor de los 265 que forman la C¨¢mara Alta. Llop, juez especializada en violencia de g¨¦nero, ha tenido que esperar a la segunda votaci¨®n para lograr el cargo por mayor¨ªa simple. El candidato popular, P¨ªo Garc¨ªa-Escudero, ha obtenido 109 votos en esta segunda votaci¨®n. Otros 16 representantes han emitido un voto nulo y ocho han votado en blanco. Llop estar¨¢ acompa?ada en la vicepresidencia primera por la socialista Cristina Narbona y en la vicepresidencia segunda por Garc¨ªa Escudero. La C¨¢mara alta est¨¢ formada por 265 senadores: 208 salieron de las urnas el pasado 10 de noviembre y otros 57 son elegidos por los parlamentos de cada comunidad.

En la primera votaci¨®n, Llop ha logrado 132 apoyos, a uno solo de ser elegida por mayor¨ªa absoluta. Garc¨ªa-Escudero ha obtenido 107 apoyos en la primera vuelta, el mismo n¨²mero de senadores que suman PP, Ciudadanos y Navarra Suma. Vox tambi¨¦n ha presentado a un candidato para presidir el ¨®rgano, Jos¨¦ Manuel Mar¨ªn, a pesar de contar solo con tres senadores ¡ªen esta sesi¨®n constitutiva solo estaban presentes dos porque el tercero est¨¢ pendiente de designar por el Parlamento de Andaluc¨ªa¡ª y no ha pasado a segunda vuelta por no encontrarse entre los dos m¨¢s votados.?

En su primer discurso como presidenta del Senado, ha querido lanzar un mensaje social, centrado en la lucha contra el cambio clim¨¢tico y la igualdad de g¨¦nero. Ha arrancado un aplauso un¨¢nime, con la ¨²nica excepci¨®n de los dos representantes de Vox, al pedir terminar con la violencia machista, para lo que ha reivindicado ¡°el consenso del Pacto de Estado contra la violencia de g¨¦nero¡±. Llop tambi¨¦n ha asegurado que la C¨¢mara alta es un espacio ¡°id¨®neo para el di¨¢logo¡± en un discurso que ha comenzado y finalizado en todas las lenguas cooficiales del Estado, as¨ª como en lenguaje de signos.

Llop, que no est¨¢ afiliada al PSOE al imped¨ªrselo su condici¨®n de juez, tendr¨¢ que presidir un Senado en el que los socialistas no tienen mayor¨ªa absoluta. Aunque no es la primera vez que esto ocurre, es un escenario infrecuente en un ¨®rgano en el que el partido m¨¢s votado en las elecciones suele disfrutar de mayor¨ªa, porque el sistema de elecci¨®n de tres senadores por lista tiende a primar al partido m¨¢s votado. Los socialistas tienen 113 representantes, lejos de los 139 que ten¨ªa la pasada legislatura. El PP, que ahora cuenta con 96 senadores, frente a los 69 que obtuvo tras las elecciones del pasado 28 de abril. Ciudadanos solo tendr¨¢ est¨¢ legislatura la representaci¨®n de los ocho senadores de los parlamentos aut¨®nomos.

El Senado, C¨¢mara de segunda lectura a la que la Constituci¨®n otorga una funci¨®n de representaci¨®n territorial que no ha sido desarrollada en cuatro d¨¦cadas de democracia, tiene otra funci¨®n que le ha dado protagonismo en los ¨²ltimos tiempos. De ¨¦l depende la aprobaci¨®n, por mayor¨ªa absoluta, de las medidas que el Gobierno estime necesarias, en virtud del art¨ªculo 155, para obligar a una comunidad aut¨®noma a cumplir con la Constituci¨®n y las leyes. Este mecanismo solo se ha activado una vez, en octubre de 2017, para intervenir las instituciones catalanas y convocar elecciones auton¨®micas tras la declaraci¨®n unilateral de independencia encabezada por el fugado expresident Carles Puigdemont.

En aquella ocasi¨®n, el PP gozaba de mayor¨ªa absoluta y habr¨ªa podido aprobar la aplicaci¨®n del 155 por s¨ª solo, aunque el PSOE decidi¨® apoyarlo, junto con Ciudadanos y Coalici¨®n Canaria. Tras la p¨¦rdida de esta mayor¨ªa absoluta, en caso de que el Gobierno decidiera aplicar de nuevo este mecanismo frente al desaf¨ªo independentista, deber¨ªa negociarlo con otras formaciones, especialmente el PP, sin cuyo concurso ser¨ªa imposible sacarlo adelante.

El papel del Senado es, en la democracia espa?ola, secundario al del Congreso. La C¨¢mara alta puede vetar o enmendar los proyectos de ley que el Gobierno presenta en el Congreso, pero la ¨²ltima palabra corresponde a la C¨¢mara baja. Lo mismo sucede con el proyecto anual de Presupuestos Generales del Estado. El Senado tiene tambi¨¦n una funci¨®n de control del Ejecutivo, a trav¨¦s de preguntas, interpelaciones y peticiones de comparecencia. Sin embargo, la moci¨®n de censura y la cuesti¨®n de confianza, mecanismos que pueden acabar con una presidencia del Gobierno, como sucedi¨® en junio de 2018 con Mariano Rajoy, est¨¢n reservados al Congreso.