La imparcialidad del juez Ollero, a examen

El Tribunal Constitucional va a resolver el pr¨®ximo mes de enero la recusaci¨®n de uno de sus magistrados, Andr¨¦s Ollero, a quien la Generalitat quiere mantener al margen de diversos recursos por considerar que ha perdido su imparcialidad. A tenor de los contactos ya habidos sobre este asunto, todo indica que la iniciativa del Govern ser¨¢ rechazada. Pero de momento el incidente ¡ªdebido a que Ollero se refiri¨® en un voto particular al ¡°supremacismo¡± catal¨¢n¡ª ya ha supuesto que se paralice el debate sobre tres recursos de inconstitucionalidad y dos cuestiones de competencias que afectan a Catalu?a en materias importantes, entre ellas el C¨®digo Tributario, recurrido por el Gobierno.

La recusaci¨®n lleg¨® cuando el Constitucional estaba en plena discusi¨®n sobre esta ley, que podr¨ªa ser anulada total o parcialmente. Un sector del tribunal propugna la primera opci¨®n, por entender que dicha normativa auton¨®mica pretend¨ªa crear una de las estructuras de Estado que quiso levantar el proc¨¦s. Pero muy probablemente prospere la idea de salvar los preceptos que no se consideren abiertamente inconstitucionales, habida cuenta de que Catalu?a cuenta con competencias propias, aunque limitadas, en materia tributaria.

Consciente de la importante labor que le queda por delante sobre los recursos que afectan la administraci¨®n catalana y a los l¨ªderes independentistas, el Constitucional evit¨® rechazar de plano la recusaci¨®n presentada contra Ollero. El tribunal no quiere que pueda decirse que no ha dado ocasi¨®n a escuchar a las partes, y ha nombrado un instructor del incidente, el magistrado Antonio Narv¨¢ez. La Fiscal¨ªa, a su vez, se inclinar¨ªa previsiblemente por sostener que no hay motivo para apartar al magistrado Ollero del pleno del Tribunal Constitucional.

La recusaci¨®n, que se centra en estos casos, llega en un momento particularmente delicado para el tribunal, que en teor¨ªa tendr¨ªa que haber sido renovado este mes de diciembre. Lo ha impedido la falta de di¨¢logo entre los partidos. El Constitucional se dispone, por tanto, a asumir los recursos de amparo que lleguen contra la sentencia dictada por el Tribunal Supremo en el juicio del proc¨¦s, mientras iniciativas como la de la Generalitat contra Ollero evocan pasados escenarios de conflictividad en torno a la instituci¨®n encargada de velar por la vigencia de la Constituci¨®n.

Para la Generalitat resulta claro que al hablar de ¡°supremacismo¡± en el voto particular por el que el magistrado Ollero se opuso a avalar la reforma del derecho civil catal¨¢n, dicho magistrado ha demostrado falta de imparcialidad para enjuiciar y resolver los recursos que afecten a Catalu?a. Ollero es catedr¨¢tico de Filosof¨ªa del Derecho, y lleg¨® al Constitucional tras 17 a?os como diputado del PP y portavoz de su partido en el ¨¢rea de Justicia. En diversas ocasiones ha trasladado a sus votos particulares el estilo ir¨®nico, y a veces incluso sarc¨¢stico, que empleaba en las Cortes. Pero la Generalitat considera que esta vez no hab¨ªa iron¨ªa, sino directamente ¡°animadversi¨®n¡± e incluso ¡°odio¡± hacia lo catal¨¢n.

Los servicios jur¨ªdicos del Govern lo exponen as¨ª en su escrito de recusaci¨®n. Critican sobre todo el pasaje del voto particular de Ollero en el que este magistrado escribi¨® que no se prestaba a someterse ¡°al supremacismo de quienes ¡ªa estas alturas¡ª se sienten humillados si se les trata como si fueran iguales a los dem¨¢s¡±. La Generalitat sostiene que Ollero incluy¨® en su voto discrepante este pasaje para negar que Catalu?a pudiera pretender mejor trato que otras comunidades ¡ªy cita expresamente las de Valencia y Galicia¡ª en materia de normas propias de derecho civil.

El criterio mayoritario en el Tribunal Constitucional es que hay que resolver pronto este incidente y centrarse en los recursos pendientes, entre ellos los del exvicepresidente Oriol Junqueras, Jordi S¨¢nchez y Jordi Turull contra la decisi¨®n que en su d¨ªa adopt¨® el Supremo para no dejarles salir de la c¨¢rcel para acudir a plenos del Parlament.

El tribunal ya se dividi¨® por nueve votos a tres cuando rechaz¨® conceder amparo a Junqueras por su larga prisi¨®n preventiva, de casi dos a?os. El voto discrepante de tres magistrados se debi¨® a que entendieron que se hab¨ªan vulnerado los derechos de representaci¨®n pol¨ªtica del l¨ªder de ERC. Ahora, la mayor preocupaci¨®n del presidente Constitucional, Juan Jos¨¦ Gonz¨¢lez Rivas, es que el final de etapa de la instituci¨®n con su actual composici¨®n permita mantener la unidad interna ¡ªtraducida en resoluciones aprobadas por unanimidad¡ª, y sin que el mecanismo de las recusaciones enturbie su labor.

En el Constitucional se sostiene que Ollero tendr¨¢ que mostrarse m¨¢s contenido en sus textos, pero que su voto particular sobre el derecho civil catal¨¢n no es motivo suficiente para diezmar al tribunal. De la resoluci¨®n del incidente depende que la instituci¨®n pueda reanudar su tarea en enero con plenas funciones. Aparte de la citada ley Tributaria, el plan estrat¨¦gico de acci¨®n exterior de la Generalitat y relaciones con la Uni¨®n Europea, la ley catalana de Comercio o el reglamento de Adopci¨®n Internacional, todos ellos recurridos por el Gobierno, esperan, entre otros asuntos, que se dicten las correspondientes sentencias.